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Este martes se conoció los nombres de los que compondrán el equipo de Gustavo Petro para el empalme con el gobierno de Iván Duque. Varios de los nombres han sido cuestionados por distintas razones. Además del de la directora de la MOE, Alejandra Barrios, que aclaró que su colaboración será técnica y al margen del empalme, la controversia viene porque varios de ellos son allegados a los que le hicieron campaña o debido a dudas éticas y judiciales sobre algunos de ellos.
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Uno de los más cuestionados es Guillermo Reyes, que será la cabeza del empalme con el Ministerio de Justicia. Los primeros reparos vienen de que este fue viceministro de justicia durante el primer periodo de Álvaro Uribe y varios de sus enfoques sobre la justicia serían conservadores. Sin embargo, los mayores cuestionamientos son porque Reyes habría incurrido en plagio en distintas ocasiones.
Según reportó la Silla Vacía en 2015, cuando Reyes fue candidato a registrador, hubo múltiples evidencias de que este incurrió en plagio en sus tesis doctoral y en otros textos académicos. Sobre la tesis, este habría subsanado con una fe de erratas en la que achacaba el incidente a errores de edición.
Sin embargo, en cuanto a los otros textos académicos, hay elementos que indicarían que Reyes se apropió de las ideas de Juan Fernando Jaramillo, fallecido jurista que alcanzó a ser magistrado auxiliar de la Corte Constitucional y fue uno de los fundadores de Dejusticia. De acuerdo con la Silla Vacía, Guillermo Reyes plagió al pie de la letra “cuatro capítulos completos de un artículo que Jaramillo había publicado seis años antes”. Los textos supuestamente plagiados fueron del artículo ‘Los órganos electorales supremos’ y fueron incluidos en el libro ‘El nuevo orden político y electoral en Colombia’, publicado en 2004.
Solo en 2007 se vino a conocer el supuesto plagio y todo se solucionó con una carta en la que se pidió que se subsanara el error. En 2014 habría vuelto a ocurrir un caso similar. Sin embargo, según registró el medio político, Reyes se escudó en ambas ocasiones en que se trataba de un error de edición y que nunca hubo intención de apropiarse de las ideas de Jaramillo. Precisamente uno de los hijos de este último fue el que cuestionó la inclusión de Reyes en el equipo de empalme, sobre todo porque el presidente electo, Gustavo Petro, dio a entender que los que estén en esta instancia pueden terminar siendo ministros en su administración.
Además de Reyes, los cuestionamientos vinieron por la inclusión de Carolina Corcho en el empalme del Ministerio de Salud. Esta ya había sido incluida en el equipo inicial de empalme y desde entonces ha sido cuestionada por algunas de la posiciones que tomó durante la pandemia, en la que incluso la señalaron por supuestamente incurrir en difusión de ‘fake news’. También ha sido controvertida su posición de buscar acabar con las EPS en el país.
En esta misma línea de cuestionamientos figura el nombre de César Manrique. Este fue gerente del Fondo de Vigilancia y Seguridad en el gobierno Petro en Bogotá. Fue durante su paso por esta cartera que se hizo la contratación de las motos eléctricas para la Policía. Este proceso causó un millonario detrimento al distrito y llevó a que Manrique fuera destituido y enfrentara un proceso penal. En un primer momento fue condenado, pero en segunda instancia fue absuelto.
Los otros reparos vienen debido a la cercanía de algunos de los escogidos para el empalme con los que participaron en la campaña. Por ejemplo, en la transición en el área de Inclusión Social se incluyeron a dos cercanas de los dos principales alfiles de Gustavo Petro en esta campaña. Roy Barreras y Armando Benedetti. Por el primero se incluyó a Gloria Arizabaleta, exesposa de Barreras que fue incluida en las listas de la Cámara del Pacto.
Por el segundo figura Ángela Benedetti, hermana del ahora excongresista. Esta última respondió a los cuestionamientos y reconoció que es hermana del cercano a Petro, pero sus méritos para estar en el empalme serían haber estado desde que fue concejal en las toldas petristas y ser abogada constitucionalista y defensora pública.
Entre los cercanos a Benedetti también figura Adelina Covo, actual suegra de este y quien estará en el equipo del sector Defensa. En este caso, el congresista respondió a los señalamientos diciendo que nada tiene que ver con el nombramiento de Covo, pues esta se encuentra en las toldas petristas desde antes que este llegara a reforzar el Pacto Histórico.
En el mismo camino de los cuestionamientos figura Adriana Barragán, esposa de Alfonso Prada, jefe de debate de Gustavo Petro. Barragán fue incluida en el equipo de Reyes para el empalme en el Ministerio de Justicia. Además de la clara cercanía con Prada, los cuestionamientos a Barragán vienen por las situaciones que se vivieron en el servicio postal público, 472, cuando esta fue su directora.
Además de los antes mencionado, también se pone en cuestionamiento la inclusión de Temístocles Ortega y Roosevelt Rodríguez en el empalme del sector justicia. En el caso de Ortega, quien fue hasta hace unos días senador y fue de los pocos de Cambio Radical que brindó su apoyo a la campaña petrista, tiene investigaciones en su contra. En sentido parecido las quejas van por el lado de Hugo (Ministerio de Vivienda) y Sebastián Guanumen (Ministerio de las TIC). Las críticas recaen sobre todo en el segundo nombramiento, puesto que este fue uno de los estrategas expuesto en los ‘petrovideos’. En estos se le ve hablando de supuestamente difundir ‘fake news’ y otras estrategias de campaña negra.