“Empezó el cambio”: Gustavo Petro y Rodolfo Hernández se reunieron en Bogotá

El presidente electo, Gustavo Petro, continúa en su tarea de ampliar el pacto que lo catapultó a la Casa de Nariño. En campaña, la colectividad reunió a varias figuras de la centro-izquierda y una vez se confirmó como nuevo mandatario de Colombia empezó a acercarse a la derecha y partidos tradicionales con el fin de consolidar un acuerdo nacional, también conocido como “Frente Amplio”. Bajo ese precepto, desde el Pacto Histórico le han tendido la mano a conservadores y liberales, al Partido de la U, a Cambio Radical e incluso al Centro Democrático, con cuyo líder, el expresidente Álvaro Uribe, se reunirá Petro en las próximas semanas.

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Rodolfo Hernández, excandidato presidencial, contendor de Petro en la segunda vuelta y líder de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, fue el más reciente “suscriptor” del acuerdo nacional. El exalcalde de Bucaramanga y el presidente electo se reunieron este martes en el norte de Bogotá, en un encuentro en el que Hernández reafirmó su compromiso de hacer parte de la construcción de un país con la voz de varios sectores políticos.

En la reunión se comentaron temas como las diferencias y similitudes entre los programas de gobierno que ambos pusieron a consideración de la ciudadanía el pasado 19 de junio. El objetivo era avanzar en ciertas políticas comunes para cooperar en la construcción del acuerdo nacional que plantea el Pacto Histórico, teniendo en cuenta que tanto e excandidato presidencial como su fórmula, Marelen Castillo, estarán en el Congreso vía Estatuto de Oposición, aunque según declaró Hernández hace unos días no harán oposición al nuevo gobierno.

Eso sí, desde la campaña de Hernández mencionaron que el exalcalde de Bucaramanga se mantiene en que su único compromiso es con la ciudadanía, en especial “quiénes han sufrido el abandono del Estado”. Así las cosas, el excandidato presidencial, que ahora cuenta con un nada despreciable caudal político de 10,5 millones de votos, afirmó que dará su aval a cualquier proyecto que beneficie a los más vulnerables.

>LEA: Frente amplio: ¿el reencauche de la Unidad Nacional?

“Empezó el cambio”, escribió Rodolfo Hernández en su cuenta de Twitter, donde anunció la reunión. En eso coincidió Petro, quien publicó un mensaje en el que afirmó que “vamos con seguridad a un acuerdo nacional. Aquí comenzó el cambio”.

Con esta movida, prácticamente, Petro espantó uno de los mayores temores entre analistas políticos y los propios miembros del Pacto Histórico: tener una oposición feroz en el Congreso que le impidiera tramitar las reformas que prometió a sus 11,2 millones de electores.

En la previa todo indicaba que así iba a ser, pues si se sumaban los congresistas de partidos como el Liberal, el Conservador, Cambio Radical, la U y Centro Democrático se tenía una bancada más grande que la alternativa, compuesta por el Pacto Histórico, Comunes, y algunos parlamentarios liberales y de Alianza Verde que desde la campaña estuvieron con Petro.

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Pero en apenas una semana, la mediación de Roy Barreras, quien posiblemente será el primer presidente del Senado para el periodo 2022-2026, logró que la bancada liberal se sumara a la coalición de Petro y que Alianza Verde se proclamara como partido de gobierno. Además, el Partido de la U y el Conservador, muy opuestos a Petro en campaña, ya anunciaron que no serán oposición y están pensando si declararse como partidos de gobierno o independientes.

En todo caso, tal parece que la única oposición que tendrá Petro en el Congreso estará a cargo del Centro Democrático, al que no le fue muy bien en las elecciones legislativas pues perdió cinco curules en el Senado y 16 en la Cámara. Para el periodo 2022-2026, el uribismo tendrá 14 miembros en el Senado y 16 en la Cámara, que serán los encargados de frenar la apisonadora petrista que se sigue consolidando en el Congreso.

El presidente electo, Gustavo Petro, continúa en su tarea de ampliar el pacto que lo catapultó a la Casa de Nariño. En campaña, la colectividad reunió a varias figuras de la centro-izquierda y una vez se confirmó como nuevo mandatario de Colombia empezó a acercarse a la derecha y partidos tradicionales con el fin de consolidar un acuerdo nacional, también conocido como “Frente Amplio”. Bajo ese precepto, desde el Pacto Histórico le han tendido la mano a conservadores y liberales, al Partido de la U, a Cambio Radical e incluso al Centro Democrático, con cuyo líder, el expresidente Álvaro Uribe, se reunirá Petro en las próximas semanas.

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Rodolfo Hernández, excandidato presidencial, contendor de Petro en la segunda vuelta y líder de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, fue el más reciente “suscriptor” del acuerdo nacional. El exalcalde de Bucaramanga y el presidente electo se reunieron este martes en el norte de Bogotá, en un encuentro en el que Hernández reafirmó su compromiso de hacer parte de la construcción de un país con la voz de varios sectores políticos.

En la reunión se comentaron temas como las diferencias y similitudes entre los programas de gobierno que ambos pusieron a consideración de la ciudadanía el pasado 19 de junio. El objetivo era avanzar en ciertas políticas comunes para cooperar en la construcción del acuerdo nacional que plantea el Pacto Histórico, teniendo en cuenta que tanto e excandidato presidencial como su fórmula, Marelen Castillo, estarán en el Congreso vía Estatuto de Oposición, aunque según declaró Hernández hace unos días no harán oposición al nuevo gobierno.

Eso sí, desde la campaña de Hernández mencionaron que el exalcalde de Bucaramanga se mantiene en que su único compromiso es con la ciudadanía, en especial “quiénes han sufrido el abandono del Estado”. Así las cosas, el excandidato presidencial, que ahora cuenta con un nada despreciable caudal político de 10,5 millones de votos, afirmó que dará su aval a cualquier proyecto que beneficie a los más vulnerables.

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“Empezó el cambio”, escribió Rodolfo Hernández en su cuenta de Twitter, donde anunció la reunión. En eso coincidió Petro, quien publicó un mensaje en el que afirmó que “vamos con seguridad a un acuerdo nacional. Aquí comenzó el cambio”.

Con esta movida, prácticamente, Petro espantó uno de los mayores temores entre analistas políticos y los propios miembros del Pacto Histórico: tener una oposición feroz en el Congreso que le impidiera tramitar las reformas que prometió a sus 11,2 millones de electores.

En la previa todo indicaba que así iba a ser, pues si se sumaban los congresistas de partidos como el Liberal, el Conservador, Cambio Radical, la U y Centro Democrático se tenía una bancada más grande que la alternativa, compuesta por el Pacto Histórico, Comunes, y algunos parlamentarios liberales y de Alianza Verde que desde la campaña estuvieron con Petro.

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Pero en apenas una semana, la mediación de Roy Barreras, quien posiblemente será el primer presidente del Senado para el periodo 2022-2026, logró que la bancada liberal se sumara a la coalición de Petro y que Alianza Verde se proclamara como partido de gobierno. Además, el Partido de la U y el Conservador, muy opuestos a Petro en campaña, ya anunciaron que no serán oposición y están pensando si declararse como partidos de gobierno o independientes.

En todo caso, tal parece que la única oposición que tendrá Petro en el Congreso estará a cargo del Centro Democrático, al que no le fue muy bien en las elecciones legislativas pues perdió cinco curules en el Senado y 16 en la Cámara. Para el periodo 2022-2026, el uribismo tendrá 14 miembros en el Senado y 16 en la Cámara, que serán los encargados de frenar la apisonadora petrista que se sigue consolidando en el Congreso.