“Este golpe marca el final del Clan del Golfo”: Duque tras captura de Otoniel
En una rueda de prensa conjunta, el primer mandatario celebró la captura del líder del Clan del Golfo y la comparó con la caída de Pablo Escobar.
La captura de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel y líder Clan del Golfo, es el gran legado del gobierno de Iván Duque. Así lo dio a entender el actual presidente durante la rueda de prensa en la que confirmó la detención y dio detalles del operativo conjunto, en el que participaron “Ejército, Fuerza Aérea, Armada y Policía”.
“Colombianos, desde el fuerte de Tolemaida, quiero decirles que se ha adelantado una operación conjunta articulada y meticulosa con el nombre de operación Osiris y en esta ha sido capturado alias Otoniel, el máximo cabecilla del Clan del Golfo”, expresó Duque en el comienzo de su discurso, para luego agregar que, a su consideración, era “el golpe más duro que se le ha dado al narcotráfico en este siglo”.
En este mismo sentido de celebrar la detención, el primer mandatario aseveró que la captura de Otoniel “solo es comparable con la caída de Pablo Escobar”. A este punto agregó que supuestamente Dairo Antonio Úsuga era el narcotraficante más temido del mundo y los soportó en los cientos de crímenes que habría cometido: “Asesino de policías, soldados y líderes sociales. Además, reclutador de menores y con una demencia que lo llevó a abusar a niños, niñas y adolescentes”.
Puede ver: Clan del Golfo: Capturan a alias Otoniel, el hombre más buscado del país
Duque destacó que este este fue un trabajo conjunto, que no solo incluyó a la Fuerza Pública, sino que contó con la participación de la Fiscalía y organismos de inteligencia de Estados Unidos y Reino Unido, que habrían participado de las operaciones contra Otoniel debido a su peligrosidad. En este punto concluyó con una de las máximas de su administración: “Es un triunfo de la legalidad y una muestra del que la hace la paga”.
En la misma rueda de prensa recordó que una de sus promesas había sido capturar “a este bandido y lo cumplimos”. Luego reveló que van a proceder a cumplir con las solicitudes de extradición que Otoniel tiene en su contra, “pero no es obstáculo para que se sepa toda la verdad”. “El narcotráfico se enfrenta con toda la determinación”, añadió.
El primer mandatario, sin ninguna duda, calificó este hecho como el “golpe que marca el final del Clan del Golfo”. Por eso aprovechó la rueda de prensa para decirle a los miembros de esta organización que “o se someten a la justicia de inmediato o les caerá todo el peso de la ley”. Sin embargo, puede no ser del todo preciso debido a que la captura o falta de un líder de una organización no implica su final, como es el caso de las Farc, que perdió a varios miembros de su secretariado, dos de sus máximos líderes y solo se acabó a través de un proceso de paz.
Además: Estas son las primeras fotos de Otoniel tras su captura
“Me siento orgulloso de ser el comandante supremo de estas fuerzas”, continuó el presidente Duque, que destinó parte de su discurso a recordar a los miembros de la Fuerza Pública que murieron en las diferentes operaciones para dar con Otoniel. “Un homenaje a los que entregaron todo y recordar a Edwin Guillermo Blanco, que falleció en esta operación, y que su trabajo llevó a este gran golpe”, concluyó el presidente colombiano.
El primer mandatario fue seguido por el ministro Diego Molano, que destacó el trabajo conjunto de las Fuerzas y lo calificó como “una victoria de la política de seguridad. Es una victoria del Estado y la legalidad contra el narcotráfico”. En este punto reseñó que el Clan del Golfo serpia uno de los grandes exportadores de estupefacientes al mundo y al igual que uno de los “articuladores del microtráfico”.
Molano aseguró que gracias a las muchas operaciones que se realizaron en contra de Úsuga y su organización se había logrado frenar la expansión del Clan del Golfo “que tenía la intención de llegar a la costa pacífica, Casanare y otros departamentos de la Orinoquía”. Luego concluyó: “No hay un rincón de Colombia en el que un criminal quede tranquilo”.
El ministro fue seguido por el comandante de las Fuerzas Militares, Luis Fernando Navarro. Este dijo que parte del éxito se debía a que en enero habían decidido cambiar los ritmos de operación; “y es así como fuimos develando los anillos y los corredores de movilidad y nos colocamos de manera estratégica”, contó el militar.
Gracias a esta nueva estrategia, según el general Navarro, “cada vez más perdía sus anillos de seguridad”- El golpe final, de acuerdo con lo dicho por el comandante, se habría planeado el 15 de octubre desde Bogotá y se habría insertado unidades de todo el país para evitar filtraciones. “Dimos la sorpresa el viernes en la madrugada, y nunca tuvo la oportunidad de salir del área”, concluyó Navarro, que confirmó que la captura se dio a las 3 de la tarde.
También tuvo participación en la rueda de prensa el comandante de la Policía, Jorge Luis Vargas. Este también dio detalles de la operación, aunque se remitió a años atrás para decir que fue una inteligencia sostenida en la que se usaron “fiscales especiales para hacer minería de datos para entender los movimientos”. Según Vargas, haber contado en medios que Otoniel estaba en el nudo de Paramillo sirvió para recibir información de inteligencia al detalle, tanto así que sabían cuál era su alimentación y otras dinámicas personales.
La captura de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel y líder Clan del Golfo, es el gran legado del gobierno de Iván Duque. Así lo dio a entender el actual presidente durante la rueda de prensa en la que confirmó la detención y dio detalles del operativo conjunto, en el que participaron “Ejército, Fuerza Aérea, Armada y Policía”.
“Colombianos, desde el fuerte de Tolemaida, quiero decirles que se ha adelantado una operación conjunta articulada y meticulosa con el nombre de operación Osiris y en esta ha sido capturado alias Otoniel, el máximo cabecilla del Clan del Golfo”, expresó Duque en el comienzo de su discurso, para luego agregar que, a su consideración, era “el golpe más duro que se le ha dado al narcotráfico en este siglo”.
En este mismo sentido de celebrar la detención, el primer mandatario aseveró que la captura de Otoniel “solo es comparable con la caída de Pablo Escobar”. A este punto agregó que supuestamente Dairo Antonio Úsuga era el narcotraficante más temido del mundo y los soportó en los cientos de crímenes que habría cometido: “Asesino de policías, soldados y líderes sociales. Además, reclutador de menores y con una demencia que lo llevó a abusar a niños, niñas y adolescentes”.
Puede ver: Clan del Golfo: Capturan a alias Otoniel, el hombre más buscado del país
Duque destacó que este este fue un trabajo conjunto, que no solo incluyó a la Fuerza Pública, sino que contó con la participación de la Fiscalía y organismos de inteligencia de Estados Unidos y Reino Unido, que habrían participado de las operaciones contra Otoniel debido a su peligrosidad. En este punto concluyó con una de las máximas de su administración: “Es un triunfo de la legalidad y una muestra del que la hace la paga”.
En la misma rueda de prensa recordó que una de sus promesas había sido capturar “a este bandido y lo cumplimos”. Luego reveló que van a proceder a cumplir con las solicitudes de extradición que Otoniel tiene en su contra, “pero no es obstáculo para que se sepa toda la verdad”. “El narcotráfico se enfrenta con toda la determinación”, añadió.
El primer mandatario, sin ninguna duda, calificó este hecho como el “golpe que marca el final del Clan del Golfo”. Por eso aprovechó la rueda de prensa para decirle a los miembros de esta organización que “o se someten a la justicia de inmediato o les caerá todo el peso de la ley”. Sin embargo, puede no ser del todo preciso debido a que la captura o falta de un líder de una organización no implica su final, como es el caso de las Farc, que perdió a varios miembros de su secretariado, dos de sus máximos líderes y solo se acabó a través de un proceso de paz.
Además: Estas son las primeras fotos de Otoniel tras su captura
“Me siento orgulloso de ser el comandante supremo de estas fuerzas”, continuó el presidente Duque, que destinó parte de su discurso a recordar a los miembros de la Fuerza Pública que murieron en las diferentes operaciones para dar con Otoniel. “Un homenaje a los que entregaron todo y recordar a Edwin Guillermo Blanco, que falleció en esta operación, y que su trabajo llevó a este gran golpe”, concluyó el presidente colombiano.
El primer mandatario fue seguido por el ministro Diego Molano, que destacó el trabajo conjunto de las Fuerzas y lo calificó como “una victoria de la política de seguridad. Es una victoria del Estado y la legalidad contra el narcotráfico”. En este punto reseñó que el Clan del Golfo serpia uno de los grandes exportadores de estupefacientes al mundo y al igual que uno de los “articuladores del microtráfico”.
Molano aseguró que gracias a las muchas operaciones que se realizaron en contra de Úsuga y su organización se había logrado frenar la expansión del Clan del Golfo “que tenía la intención de llegar a la costa pacífica, Casanare y otros departamentos de la Orinoquía”. Luego concluyó: “No hay un rincón de Colombia en el que un criminal quede tranquilo”.
El ministro fue seguido por el comandante de las Fuerzas Militares, Luis Fernando Navarro. Este dijo que parte del éxito se debía a que en enero habían decidido cambiar los ritmos de operación; “y es así como fuimos develando los anillos y los corredores de movilidad y nos colocamos de manera estratégica”, contó el militar.
Gracias a esta nueva estrategia, según el general Navarro, “cada vez más perdía sus anillos de seguridad”- El golpe final, de acuerdo con lo dicho por el comandante, se habría planeado el 15 de octubre desde Bogotá y se habría insertado unidades de todo el país para evitar filtraciones. “Dimos la sorpresa el viernes en la madrugada, y nunca tuvo la oportunidad de salir del área”, concluyó Navarro, que confirmó que la captura se dio a las 3 de la tarde.
También tuvo participación en la rueda de prensa el comandante de la Policía, Jorge Luis Vargas. Este también dio detalles de la operación, aunque se remitió a años atrás para decir que fue una inteligencia sostenida en la que se usaron “fiscales especiales para hacer minería de datos para entender los movimientos”. Según Vargas, haber contado en medios que Otoniel estaba en el nudo de Paramillo sirvió para recibir información de inteligencia al detalle, tanto así que sabían cuál era su alimentación y otras dinámicas personales.