“Yo sí veo necesaria la constituyente”: vicepresidenta Francia Márquez
La vicepresidenta Francia Márquez aceptó dialogar con un equipo periodístico de El Espectador para aclarar varios asuntos sobre los que la opinión pública le viene exigiendo explicaciones desde hace meses. Por un lado, sentó posición acerca de la propuesta del presidente Gustavo Petro de encaminar a Colombia hacia una Asamblea Nacional Constituyente. Además, zanjó el debate en torno a si tiene o no buena relación con el jefe de Estado y, de paso, respondió por los duros cuestionamientos que se le ha hecho a la gestión del Ministerio de la Igualdad que lidera. ¿Será candidata presidencial en el 2026?
Daniel Valero
El presidente Gustavo Petro abrió la puerta a una constituyente. ¿Usted qué opina, Vicepresidenta?
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El presidente Gustavo Petro abrió la puerta a una constituyente. ¿Usted qué opina, Vicepresidenta?
Bueno, creo que siempre acompañamos al Presidente en las decisiones que como Gobierno vamos tomando, pero también en los planteamientos que el Presidente le hace al país. El Presidente está invitando al pueblo a tomar decisiones sobre puntos básicos, como son la garantía de derechos fundamentales de los colombianos y las colombianas. A pesar de que la Constitución del 91 es progresista y garante de derechos, desde 1991 hacia acá esa Constitución ha sufrido modificaciones que, a mi modo de ver, van desmontando los derechos básicos de los colombianos y las colombianas; eso pasó con el derecho a la salud, a un empleo digno, a la educación.
¿Las reformas que tanta polémica han desatado van en esa vía?
Mucho de las reformas que hemos planteado precisamente se basa en el espíritu y la esencia de la Constitución del 91, que plantea los derechos fundamentales como un principio rector y como una obligación del Estado. Hoy la mayoría de los colombianos no tienen la garantía de esos derechos fundamentales y es ahí que el pueblo decide, el pueblo manda, y el Presidente le ha hecho al pueblo esta propuesta.
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Vicepresidenta, ¿hay ambiente para que un tema de esta naturaleza avance, sabiendo que debe pasar por el Congreso y por las altas cortes?
La Constitución estableció que el constituyente primario es el pueblo, y el Congreso es del pueblo. Es un mandatario, como todos nosotros, porque estas instituciones son mandatarios del pueblo y es el pueblo el que toma la decisión de, si frente a los derechos básicos y fundamentales que hoy no tienen los colombianos y las colombianas, se debe plantear una constituyente o no. El Presidente ha puesto una propuesta para la gente, y en ese sentido es el pueblo soberano el que toma la decisión de asumir. Y yo creo que la constituyente debe ser en favor de los derechos fundamentales que hoy no se han materializado.
¿Eso se traduce en que usted sí ve necesaria una constituyente?
Yo sí veo necesaria la constituyente. Pero no se trata de modificar o de crear una nueva Constitución, porque la Constitución del 91 estableció principios rectores de una sociedad igualitaria, de una sociedad que camina hacia la dignidad y que precisamente debe caminar hacia la igualdad. La misma creación del Ministerio de la Igualdad lo pensamos en términos de cumplir el mandato de la Constitución del 91, que plantea la necesidad de avanzar no solo en la igualdad legal, sino en términos materiales. Colombia está entre los países más desiguales e inequitativos del planeta y, en ese sentido, es necesario pensar en cómo se avanza en la garantía de los derechos fundamentales de todos los colombianos y las colombianas.
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Vicepresidenta, hay un sector del país que dice que su relación con el presidente Petro no es muy buena. ¿Qué tan cierto es eso?
Siempre van a haber intrigas, siempre van a haber comentarios, siempre hay gente que crea cizaña y que quiere generar conflicto donde no lo hay. Mi relación con el Presidente es cordial, de respeto. Yo lo respeto como nuestro Presidente y, por supuesto, él también me respeta, me reconoce y me valora como la Vicepresidenta de este país. A los dos nos eligieron para trabajar juntos. Él tiene unas ventajas, unas virtudes, unas condiciones, por eso es nuestro Presidente y a mí me eligieron para acompañarle en las decisiones de Gobierno, en las acciones que tenemos que hacer, valga la redundancia, para la transformación de este país. Queremos un país más justo, un país en paz, un país igualitario, un país que no discrimine, que no violente a la mayoría de colombianos y colombianas. Y en eso estamos trabajando, al igual que en llevar equidad, igualdad, desarrollo productivo, proyectos y programas que materialicen los derechos de la mayoría de los colombianos, que son los más excluidos y marginados.
¿No están distanciados?
No hay ninguna pelea, no hay ninguna discusión. A mí me colocaron una tarea ardua como Vicepresidenta en la coordinación interinstitucional para el avance y la garantía de los derechos en territorios marginados y excluidos, y en eso he estado articulando a distintas instituciones. Pero, además, tengo la tarea del Ministerio de la Igualdad. Lo que he estado haciendo es concentrarme en eso.
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¿Hacia dónde va el Gobierno, Vicepresidenta? Hay voces que alertan por una posible “radicalización”…
El Gobierno va a cumplir las promesas de un cambio y una transformación para este país. Lo dijimos en campaña, que queremos el cambio, que a los territorios llegue la educación, darle oportunidades a la juventud, transformar las violencias estructurales que golpean a la mayoría de los colombianos y las colombianas. A todos nos debe doler cualquier situación de violencia en este país. Si nos duele nuestra Nación, si amamos nuestra patria, nos debe doler la violencia, el conflicto armado. Entonces, tenemos que seguir trabajando por la paz, lo que implica seguir con diálogos con grupos armados. Pero la paz también significa inversión social, y en eso estamos concentrados. Por eso estamos, desde la estrategia de “Gobierno con el pueblo”, llegando a esos territorios excluidos y marginados, y a mí eso me da mucha alegría, porque yo nunca había visto a un gobierno llegar así a un territorio. Eso quiere decir que hay un Presidente que tiene el corazón bien puesto, y sobre todo que piensa en la gente más necesitada de Colombia.
¿Se siente a gusto con el actual equipo de Gobierno, con el gabinete que, incluso, en algún momento criticó?
El año pasado yo sentía que había mucha incertidumbre, no veía muchos avances, pero ahora lo entiendo más porque se estaba construyendo el Plan Nacional De Desarrollo. El Gobierno llega, se elige y por unos meses le toca asumir las políticas y los programas de un gobierno saliente. Además, parte del presupuesto queda comprometido con programas y proyectos del gobierno anterior. Y ahí yo no veía mayores avances en términos de los proyectos. Lo que hoy veo es que ya se empiezan a hacer colegios, escuelas, que hoy ya se empieza a llevar agua potable y saneamiento básico a los territorios más excluidos, que hoy ya empieza a fortalecerse el desarrollo productivo, que hoy ya se empiezan a priorizar las vías terciarias. Eso, para mí, ya muestra un cambio y lo digo con toda la honestidad. Yo siento que estamos avanzando. Estoy empezando a ver materializados los derechos de la gente en los territorios y eso me alegra mucho.
¿Le gusta el gabinete que hay actualmente?
Sí, claro, y creo que hoy hay mayor conexión. Con muchos no nos conocíamos, pero hemos hecho un esfuerzo para articularnos y decir “venga, vamos juntos, usted lleva el agua, usted lleva la carretera, usted lleva el proyecto productivo”, y eso genera un impacto que ahorita mismo tal vez no se vea, pero se va a empezar a ver en pocos meses. Ya he visto inversión, priorización de proyectos, materialización y concreción del programa de Gobierno, que fue lo que movió a los colombianos y las colombianas a que votaran por Gustavo Petro y Francia Márquez.
Vicepresidenta, precisamente esa campaña que los llevó al poder está siendo investigada en el Consejo Electoral, en la Fiscalía y en la Comisión de Acusaciones, cada entidad desde sus competencias legales…
Nosotros creemos en la forma en que fuimos elegidos, hubo un compromiso de un pueblo que masivamente salió a votar por Gustavo Petro y Francia Márquez. Yo vi a la gente hacer campaña con sus propios esfuerzos, vi a jóvenes pintando murales con esfuerzos, porque esto fue un impulso de una campaña popular, del pueblo. Respetamos a la justicia y esperamos que la justicia avance en su investigación; esperamos que esa investigación arroje los resultados que tengan que ser. Como lo ha dicho el Presidente, no intervenimos en la justicia.
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Pero los expedientes indican que sí habría indicios de posibles irregularidades…
Creemos en lo que hicimos y esta no fue una campaña ilegal, esta campaña se hizo con transparencia, con compromiso, con esfuerzo, con dedicación y cumpliendo la ley. Eso es lo que yo puedo decir. Y bueno, que se investigue todo lo que se tenga que investigar y que al final del día sea la justicia la que defina esta situación, pero nosotros estamos tranquilos. Yo estoy tranquila, el Presidente está tranquilo, porque no cometimos ninguna irregularidad. Ya lo dijo el Presidente, queremos que esto sea transparente. En campaña exigimos que hubiera transparencia en el proceso, garantías electorales; en la Registraduría varias veces solicitamos la revisión del software para que se garantizara la transparencia. También hubo participación de la comunidad internacional haciendo la veeduría del proceso electoral.
¿Niega cualquier tipo de irregularidad?
Yo no tengo nada que temer; el Presidente tampoco tiene nada que temer. Esto se hizo con toda la honestidad y que sea la justicia la que tome la definición en términos legales, en términos constitucionales, y que sea la investigación la que defina los pasos que siguen. Mientras tanto seguimos trabajando, seguimos gobernando este país y seguimos llevando la esperanza a la gente en los territorios y para toda Colombia.
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¿Aceptarán cualquiera que sea el sentido de los fallos?
Hay una defensa, este Gobierno tiene una defensa, y esperamos que esa defensa, a la luz de cómo se hizo el proceso, nos permita tener resultados positivos de esto. No me adelanto a dar un veredicto, porque es un resultado del proceso que se tiene que dar.
Vicepresidenta, ¿va a asistir al debate de control político al que está citada en el Congreso por las críticas a la ejecución en el Ministerio de Igualdad?
Sí, claro que sí.
¿Por qué esa ejecución tan baja, que en este 2024 no llega ni al 0,50 por ciento?
Se han dicho muchas cosas sobre el Ministerio. Esto es un anuncio que se hizo en campaña, que se crearía un Ministerio de la Igualdad para cumplir lo establecido en el artículo 13 de la Constitución. Y desde ese momento, ese sueño y esa propuesta o promesa de Gobierno empezó a tener ataques. Lo primero que se empezó a decir fue que íbamos a crear una nueva institución para burocracia, para darle contentillo a la Vicepresidenta. Incluso, se atrevieron a decir que iba a recibir dos sueldos, uno de vicepresidenta y otra como ministra. Eso no es cierto, porque la ley no permite que un funcionario reciba dos sueldos. Además, yo no fui nombrada como ministra, fui designada. La Constitución le da facultades al Presidente para que designe a la vicepresidenta o al vicepresidente en lo que él considere. Una decisión inicial fue la coordinación interinstitucional para avanzar en la implementación de la garantía de los derechos de la población afrodescendiente, de la población diversa LGBTIQ+, de la población en situación de discapacidad. También en la implementación del capítulo étnico y en los temas de acuerdos del paro cívico de Buenaventura y el Pacífico. Y en eso yo estaba avanzando.
Eso no responde la pregunta en torno a la ejecución…
Pues estaba avanzando para que se pueda cumplir con esas designaciones. Y también dicen que el Ministerio ya lleva un año y no sé cuánto más y no avanza. Y eso tampoco es cierto. El 29 de junio pasado, el Presidente me designó a mí como ministra de la Igualdad y es desde ese 29 de junio que yo empiezo a hacer mi labor como ministra. Dicen que desde enero de 2023 el Ministerio existe y que yo no lo he puesto a andar. Pero es que el Ministerio sí existe desde ese enero, pero en el papel, porque es en ese momento cuando lo formalizan. El Presidente firma la ley el 4 de enero del 2023, y luego pasan seis meses. El Congreso le da facultades al Presidente para que reglamente el sector de Igualdad y Equidad. Por eso, a mediados del año pasado se firman los decretos que lo definen y que crean la planta de personal del Ministerio, también a partir de un estudio que se hizo con Función Pública, sobre la carga de personal con base en todas las funciones que el ministerio tiene que realizar. Por eso, el 29 de junio soy la primera persona de designada en esta entidad.
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¿Eso se traduce en que hasta esas fechas que usted explica no había uso de recursos públicos?
Después de eso comenzamos la reglamentación. Es ahí cuando empezamos en Contaduría Pública a sacar los códigos que se requieren, a sacar en la Cámara de Comercio la personería jurídica del Ministerio. Después, en la Dian hicimos otros trámites para esa personería. Luego se trabajó en el mecanismo con el que el Ministerio de Hacienda nos ayuda a crear las cuentas y en lo que se requiere para ordenar el proceso para hacer la solicitud de presupuesto. Y eso, todos esos pasos, nos costaron tiempo. No son trámites fáciles.
Pero en todo ese tiempo, Vicepresidenta, ¿hay unos recursos públicos asignados?
Haciendo todos esos trámites, ya se da la apertura del Ministerio es en agosto del 2023. Y es ahí cuando ya se puede solicitar presupuesto y empezar a contratar el personal. En ese mes contratamos la primera secretaria. Es que cuando se discutió el presupuesto nacional del 2023 y su inversión, nosotros no teníamos forma de que nos asignaran presupuesto, porque el Ministerio legalmente no existía plenamente, por lo que no había forma de que Hacienda pudiera transferir recursos. Solo hasta agosto, que fue cuando hicimos todos esos trámites, se puede viabilizar la posibilidad de que el Ministerio hiciera la solicitud.
¿Desde cuándo comienza a ejecutarse el presupuesto en este Ministerio?
En medio de todo eso también se discute en el Congreso una adición presupuestal, por lo que le pedimos a Hacienda que haga una solicitud de esa adición presupuestal para el Ministerio porque si empezábamos en el segundo semestre del año 2023, pues no íbamos a tener con qué avanzar. Ahí es cuando se prueban los $500.000 millones para el Ministerio, pero pasan a Hacienda hasta tanto nosotros logramos hacer todo el proceso que conté. Y es en agosto cuando le pedimos a Hacienda recursos para contratar personal; pedimos $30.000 millones de los $500.000 que se habían solicitado en la adición presupuestal. Ya en diciembre teníamos 70 personas contratadas para hacer todo el proceso de constitución formal. Luego tenemos que empezar a hacer el proceso de conseguir una sede, pero con esto arrancamos con la consolidación del Ministerio.
¿Eso también explica por qué no hay ejecución avanzada?
Es que para empezar ejecución en este país, se tienen que formular los proyectos de inversión. Y esa formulación, que incluye la creación de los programas, toma tiempo. A veces toma meses formular técnicamente un proyecto de inversión. Pero también constituimos legalmente el fondo para la superación de las brechas de inequidad y desigualdad. Esa creación terminó en octubre y se hizo el contrato fiduciario, que terminó de aprobándose el 29 de diciembre pasado. Ahí le pedimos a Hacienda que la adición presupuestaria que se había hecho de los $500.000 millones fuera a ese fondo, por lo que se crea una reserva legal, ya que el 29 de diciembre no teníamos forma de ejecutar esos recursos. Pero también iniciamos la solicitud y la gestión del presupuesto para el 2024, que es de $1,3 billones.
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Sus críticos cuestionan muy duro el paradero de esos recursos…
Los recursos del Ministerio de la Igualdad no se han perdido, porque tenemos el fondo y la reserva legal. Y es con esos recursos que hemos ido planificando la inversión de este año. Hemos ido creando los programas y ya tenemos 22, unos más avanzados que otros, y de esos hemos priorizado siete para arrancar rápidamente, como Jóvenes en Paz, al que también tocó buscarle recursos para la operación del programa, que es diferente a la asignación que dio el Departamento de Prosperidad Social.
¿Cuáles son esos siete programas priorizados?
Jóvenes en Paz, Jóvenes Guardianes de la Naturaleza, Autonomía Económica para las Mujeres, Prevención de las Violencias Basadas en Género, Casas para Mujer, Hambre Cero y otro de Cuidado. También avanzamos rápidamente en otro programa para la atención a la población migrante. Con todo esto ya tenemos más del 70 % del presupuesto general del Ministerio comprometido y en proceso de ejecución. Es que después de 100 años, con este Ministerio, se está creando un ministerio de cero; nos tocó de cero y hoy ya tenemos una sede con de 140 funcionarios, 22 proyectos que se están materializando. Es una gran institución que va a transformar muchas realidades de este país.
Vicepresidenta, ¿por qué le han renunciado las viceministras designadas y dejó en el aire la posesión de otro de estos cargos?
Renunciaron dos viceministras: Diana Gómez al viceministerio de Mujeres, y Luz María Munera, al de Poblaciones y Territorios Excluidos. Solo tengo que agradecerles su trabajo, porque ejercieron un papel muy importante aquí. Este es un Ministerio que está en construcción, la gente llega y se va, así es el Estado y así es el Gobierno.
¿Y qué pasó con Juan Florián y su designación en el viceministerio de la Diversidad?
Eso todavía está en diálogo con el Presidente y vamos a ver cómo resolvemos el nombramiento del viceministro o viceministra de las diversidades.
El Cauca es su tierra y justo ahora, con la ruptura del cese al fuego con la disidencia de Mordisco y la presencia de otras estructuras criminales la situación de violencia es muy dura. ¿Qué está pasando, en qué quedó la paz total?
Primero aprovecho para mandarles un mensaje de solidaridad y de compromiso a los caucanos y a las caucanas, porque este es un territorio que amo con todo mi corazón, como amo a todo mi país. Sí nos preocupa la situación y he expresado públicamente mi preocupación por la seguridad. Creo que este Gobierno les ha puesto sobre la mesa a los actores armados las posibilidades de encontrar caminos posibles para resolver un conflicto y una guerra absurda que nunca debió ser en este país, y que ha servido para violentar los derechos de la gente y para dejar este país herido. Hemos insistido en la paz total, pero también el Gobierno ha venido ejecutando acciones en términos de garantías de seguridad. Parte de lo que está pasando en Cauca tiene que ver con que se hizo un cese bilateral con un grupo armado y este grupo, según lo que nos informan, se aprovechó de ese cese para someter a las comunidades a condiciones de vulnerabilidad.
¿Eso explica el recrudecimiento de la violencia?
El Presidente tomó la decisión de levantar el cese bilateral por esas situaciones, y lo que está pasando ahora es una confrontación con este grupo que de manera miserable está violentando los derechos de la gente. Creo que no está bien que, si se le da una oportunidad a un grupo para que se siente en una mesa y se resuelva a través del diálogo el conflicto, este termine violentando a las comunidades como está pasando en mi departamento. Ahí nosotros como Estado tenemos la responsabilidad de brindar seguridad, de proteger a la comunidad y esa es la directriz que el Presidente ordenó y que yo acompaño.
¿Es optimista en medio de todo esto con la paz total?
Sí, claro. Nunca podemos negarnos la posibilidad del diálogo como un mecanismo para consolidar la paz.
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Vicepresidenta, ¿va a ser o no candidata presidencial en el 2026?
A mí me eligieron para gobernar junto al Presidente de este país del 2022 al 2026 y eso es lo que voy a hacer.
Pero la inquietud está y esta es la oportunidad para que la aclare…
Ahora mi decisión, la que he tomado, es gobernar, llevar la igualdad y la equidad a los lugares más excluidos y marginados; es llevar el cambio. Esa es la decisión que hemos tomado, transformar este país, contribuir y hacer todos los esfuerzos necesarios por la paz y la justicia social. Y vamos para adelante. El pueblo no se rinde, carajo.
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