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Aunque los deseos en Año Nuevo se depositan en la esperanza de un inicio en paz y lleno de vida, ya que 2019 fue un año convulsionado en el que solo en diciembre se reportaron 23 homicidios a líderes sociales, según Indepaz, la realidad en Colombia es otra. En las vísperas de 2020 se conoció la alerta de una posible toma en el corregimiento de Pogue, Bojayá, y ayer los medios de comunicación tuvieron que registrar la dolorosa noticia de que la defensora de DD.HH. Gloria Ocampo fue asesinada en Putumayo.
Así pues el Gobierno activó sus alarmas y convocó para este miércoles una sesión de la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad a la que asistirán el presidente Iván Duque, la ministra del Interior Nancy Patricia Gutiérrez, otros funcionarios y Leyner Palacios, líder que sobrevivió a la masacre de Bojayá y que ahora denuncia amenazas de muerte en su contra por su labor en la zona.
El pasado 31 de diciembre, la comunidad de Pogue denunció de la llegada de miembros de estructuras armadas de la Autodefensas Gaitanistas de Colombia. La Comunidad Intereclesial de Justicia y Paz alertó que unos 300 hombres hacían presencia en la zona amenazando a los habitantes del corregimiento de Bojayá. El Gobierno llegó el 3 de enero dando un parte de tranquilidad y llegando con presencia del Ejército a otras zonas del municipio.
(En contexto: Comunidad de Bojayá, amenazada por la guerra entre el ELN y las AGC)
Este hecho que convoca la sesión de la Comisión, que debe ser objeto de estudio y análisis detallado, no es el único en estos escasos ocho días del año. Como se mencionó, se suma el asesinato de Ocampo. También en Buenaventura, Valle del Cauca, la situación es crítica. El Consejo Nacional de Paz Afrocolombiano (Conpa) publicó una alerta sobre el riesgo en el que se encuentran 13 comunidades (2.300 personas) que habitan la parte baja del río Raposo por enfrentamientos entre el Eln y miembros de las disidencias de las Farc de la columna Jaime Martínez.
Lea más: Alerta en río Raposo (Buenaventura) por posibles choques entre grupos armados.
“Esta alerta se suma en el territorio de la región del Pacífico, a las alertas en Bojayá, a la amenaza por parte del Clan del Golfo a Leyner Palacios, líder y defensor de DD.HH., y al anuncio realizado por paramilitares de tomar control territorial en el Bajo San Juan y el Bajo Calima en Buenaventura, Valle del Cauca, y en el Litoral San Juan, departamento del Chocó”, alertó el Consejo.