La tríada de catalanes que pesa en el gobierno de Gustavo Petro

Mientras que el presidente Gustavo Petro busca cómo sortear los escándalos en los que lo tiene su familia, sobre todo su hermano Juan Fernando y su hijo Nicolás Petro Burgos, siguen apareciendo personajes cuestionados cercanos a su círculo familiar. Tres catalanes, al parecer viejos amigos del primer mandatario y su esposa Verónica Alcocer, habrían obtenido beneficios por la cercanía con la pareja y ahora pesarían en el Gobierno. Eva Ferrer, Manuel Grau y Xavier Vendrell son los extranjeros que hoy figuran como superpoderosos en el Ejecutivo y que, además de tener temas pendientes con la justicia de su país, tendrían varios negocios en Colombia.

Mientras que el presidente Gustavo Petro busca cómo sortear los escándalos en los que lo tiene su familia, sobre todo su hermano Juan Fernando y su hijo Nicolás Petro Burgos, siguen apareciendo personajes cuestionados cercanos a su círculo familiar. Tres catalanes, al parecer viejos amigos del primer mandatario y su esposa Verónica Alcocer, habrían obtenido beneficios por la cercanía con la pareja y ahora pesarían en el Gobierno. Eva Ferrer, Manuel Grau y Xavier Vendrell son los extranjeros que hoy figuran como superpoderosos en el Ejecutivo y que, además de tener temas pendientes con la justicia de su país, tendrían varios negocios en Colombia.

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Los tres catalanes habrían sido fichas clave en la campaña que llevó a Gustavo Petro a la Presidencia. Ahora, con su amigo en el mayor cargo político de Colombia, tendrían mayor influencia en algunos asuntos políticos y comerciales. De acuerdo con una investigación realizada por el portal La Silla Vacía, tras la posesión de Petro, a Vendrell y a Graul Pujadas “les fue otorgada la nacionalidad colombiana de manera exprés por orden presidencial”. Acá le contamos de dónde viene cada uno de ellos:

Manuel Grau:

Este es el hombre que, según la investigación del portal, “tiene una vasta red de compañías en Colombia a donde se trasladó en 2012″. Dentro de su abanico de socios comerciales aparece su compatriota Vendrell y, al parecer, fue contratista de la Alcaldía de Santa Marta en el pasado. También, señala el medio, que con Petro en el poder este hombre adquirió otras funciones en Colombia, dentro de las que destacan el acompañamiento a la primera dama a distintos viajes en donde se presentaría como servidor público, y también haría las veces de puente de políticos y empresarios para acercarse al primer mandatario.

De acuerdo con la investigación, Grau, de 51 años, ha sido el más silencioso de los tres extranjeros para moverse en el círculo cercano de los Petro. Su mayor actividad la hizo durante la carrera por la Presidencia, pues fue un asesor en la formulación de la política de economía popular de la campaña. Una de las fuentes consultadas por el medio sostuvo que Grau estaba en las reuniones importantes de Petro, pero que eran pocas sus intervenciones. “Como cuando uno tiene un invitado frecuente en la casa que no es que participe en todo, pero que sí está ahí escuchando”, explicó esa fuente.

Una vez con Petro como presidente, habría circulado una carta por distintos ministerios que iba dirigida al canciller Álvaro Leyva, en la que buscaban la firma de algún alto funcionario para que se presentara el “aporte al Estado colombiano” de Grau y se le concediera la ciudadanía. En el documento habría estado consignado el historial del catalán como empresario, dentro de lo que, según el medio, estaría incluido “su inicio como asistente del director de logística de GSK, una farmacéutica, luego pasó 15 años en la compañía de construcción de su familia, y luego fundó el Barcelona Export Group, una empresa en la que participó Vendrell”.

Aunque no se constató si la carta obtuvo alguna firma ministerial, sí señalan que contenía los méritos con los que justificaban la petición: haber construido dos edificios de residencias estudiantiles entre Bogotá y Chía, que dieron, supuestamente, dos mil empleos directos e indirectos. Dice la investigación que una vez Grau recibió la nacionalidad se alejó de los asuntos empresariales en el país y se dedicó a hacer pasar como el director de Procolombia, empresa que asegura no tener ninguna vinculación con el catalán.

Xavier Vendrell:

En una interceptación telefónica hecha por la justicia española en 2019 se escucha a Vendrell decir que “si tuviésemos al Petro allí, tío, sería un aliado de cojones”. De acuerdo con la investigación, este catalán “enfrenta cargos por delitos de malversación, prevaricato, soborno y tráfico de influencias en España” y estaría acudiendo a la Cancillería de Colombia, para hacerse con un pasaporte diplomático blindarse jurídicamente. El nombre del extranjero había salido a la luz desde la campaña, cuando estalló el escándalo de los llamados “Petrovideos”, que fueron filtraciones de reuniones del equipo de campaña del entonces candidato del Pacto Histórico.

Lo que se encontró en la investigación es que este hombre empezó su vid política en “el grupo terrorista Tierra Illure que se desmovilizó en el 91″. También se afirma que “Vendrell aceptó que participó en dos atentados que no dejaron víctimas. Luego se reinsertó y posteriormente se convirtió en un político visible afiliado al ala que promueve la separación de Cataluña de España. Milita en el partido Esquerra Republicana de Cataluña y fue diputado por varios años. También fue consejero en representación de ese partido. Luego pasó a presentarse como empresario”.

A las tres semanas de que Petro ganar la Presidencia, Vendrell ya contaba con documentos que lo hacían ciudadano colombiano. De acuerdo con La Silla Vacía, el 31 de agosto del año pasado, “por un procedimiento que la ley delega exclusivamente en el presidente, Petro otorgó la “nacionalidad colombiana por adopción mediante exoneración de requisitos” a Vendrell (el mismo día que lo hizo con Eva Ferrer, la amiga de la primera dama)”.

La investigación apunta a que Vendrell está involucrado en un caso de corrupción enorme “descubierto en una operación bautizada ‘Voloh’, que destapó un mega escándalo dentro del establecimiento Catalán”. También aparece que desde 2020 está imputado por cuatro delitos relacionados con corrupción y es investigado también en España sobre su posible participación en “un complot en el que habría estado Rusia para promover y financiar la independencia catalana con Carles Puigdemont. La segunda tiene que ver con los enfrentamientos entre civiles y policías promovidos por un movimiento ciberactivista llamado ‘Tsunami Democratic’. La tercera con beneficiar sus negocios privados para favorecerse a sí mismo y a sus proyectos usando una red clientelar”.

Eva Ferrer:

La amiga personal de Verónica Alcocer y su mano derecha durante campaña ha sido la figura más visible de esta tríada. En lo que va corrido del gobierno Petro, Ferrer ha pasado por dos cargos públicos, el primero como consejera de la Niñez, y el segundo como consejera para la Reconciliación, que quedó oficializado a través de decreto 0068 del 20 de enero de 2023, documento firmado por Óscar Mauricio Lizcano, director del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre). El anterior cargo de la amiga personal de Verónica Alcocer fue el de consejera presidencial para la Niñez y la Adolescencia, que quedó en firme mediante el decreto 1928 del 23 de septiembre de 2022.

La hoja de vida de Ferrer predomina trabajos como estratega de comunicación. Entre 2000-2004 fue consultora de comunicaciones y estratega política en España y México. Luego fue directora de marketing y comunicación en Adwars consulting y luego pasó a trabajar en el poder público con la alcaldía de Barcelona (España). También es amiga de Grau y Vendrell, con quienes habría trabajado en el pasado, incluso antes de la campaña de Petro a la Presidencia.

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