Juez ordenó captura de Francisco Ricaurte, pero el documento no se ha expedido

En la mañana de este miércoles el expresidente de la Corte Suprema de Justicia Francisco Ricaurte acudió al Complejo Judicial de Paloquemao en Bogotá para entregarse a las autoridades luego que el Juzgado 10 Penal del Circuito ordenara su detención y emitiera sentido de fallo condenatorio en su contra por su responsabilidad en el llamado cartel de la toga, como se denomina a una red de personas que direccionaba decisiones judiciales en el alto tribunal a cambio de dinero. No obstante, el documento oficial ordenando su captura todavía no está listo.

(Le puede interesar: Cartel de la toga: condenan a Francisco Ricaurte, expresidente de la Corte Suprema)

Ricaurte fue condenado por los delitos de concierto para delinquir, cohecho por dar u ofrecer, utilización indebida de información privilegiada y tráfico de influencias de servidor público. El despacho judicial ordenó su detención en audiencia pública, dejando en claro a la defensa del exmagistrado que la expedición del documento que hace el Centro de Servicios de Paloquemao toma entre tres y cuatro días.

El abogado de Ricaurte, Juan Sebastián Fajardo, dijo que en todo caso el exmagistrado se presentó voluntariamente porque “esa siempre ha sido su conducta procesal: darle cara a la administración de justicia”. Fuentes consultadas por este diario explicaron que no es la primera vez que esto sucede en los pasillo de Paloquemao pues la misma situación le sucedió a Carlos Albornoz, exdirector de la Dirección Nacional de Estupefacientes, quien fue condenado a 19 años de prisión por irregularidades en la venta del centro comercial Villa Country en Barranquilla.

(Le podría interesar: “Este juicio ha sido solo un show mediático”: defensa de Francisco Ricaurte)

El despacho judicial acreditó la responsabilidad de Ricaurte en los hechos del cartel de la toga y cuestionó severamente su rol, dada su calidad de abogado y exmagistrado: “A Francisco Ricaurte le era exigible que su comportamiento se ajustara al ordenamiento legal y constitucional pues contaba con la ilustración y suficiente conocimiento para comprender el alcance y las consecuencias al contrariar el ordenamiento jurídico legal, por ello es susceptible del reproche penal por lo que hizo y se probó en este juicio oral”, explicó el juez.

El despacho avaló el testimonio del exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno, quien confesó que Ricaurte era su conexión en la Corte Suprema y quien está condenado desde 2018 a 4 años y 10 meses de prisión, por los delitos de concusión y utilización indebida de información privilegiada. “Teníamos una organización criminal, es una organización no solo criminal, lamentablemente me corrompí pero el doctor Francisco Ricaurte y el exmagistrado Leonidas Bustos corrompieron además funcionarios como al doctor Camilo Ruiz (exmagistrado auxiliar de la Corte Suprema), señaló Moreno en agosto de 2020 en medio del juicio.

(En contexto: “Si hubiera recibido una insinuación, lo denuncio”, testigo en caso Francisco Ricaurte)

En la mañana de este miércoles el expresidente de la Corte Suprema de Justicia Francisco Ricaurte acudió al Complejo Judicial de Paloquemao en Bogotá para entregarse a las autoridades luego que el Juzgado 10 Penal del Circuito ordenara su detención y emitiera sentido de fallo condenatorio en su contra por su responsabilidad en el llamado cartel de la toga, como se denomina a una red de personas que direccionaba decisiones judiciales en el alto tribunal a cambio de dinero. No obstante, el documento oficial ordenando su captura todavía no está listo.

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Ricaurte fue condenado por los delitos de concierto para delinquir, cohecho por dar u ofrecer, utilización indebida de información privilegiada y tráfico de influencias de servidor público. El despacho judicial ordenó su detención en audiencia pública, dejando en claro a la defensa del exmagistrado que la expedición del documento que hace el Centro de Servicios de Paloquemao toma entre tres y cuatro días.

El abogado de Ricaurte, Juan Sebastián Fajardo, dijo que en todo caso el exmagistrado se presentó voluntariamente porque “esa siempre ha sido su conducta procesal: darle cara a la administración de justicia”. Fuentes consultadas por este diario explicaron que no es la primera vez que esto sucede en los pasillo de Paloquemao pues la misma situación le sucedió a Carlos Albornoz, exdirector de la Dirección Nacional de Estupefacientes, quien fue condenado a 19 años de prisión por irregularidades en la venta del centro comercial Villa Country en Barranquilla.

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El despacho judicial acreditó la responsabilidad de Ricaurte en los hechos del cartel de la toga y cuestionó severamente su rol, dada su calidad de abogado y exmagistrado: “A Francisco Ricaurte le era exigible que su comportamiento se ajustara al ordenamiento legal y constitucional pues contaba con la ilustración y suficiente conocimiento para comprender el alcance y las consecuencias al contrariar el ordenamiento jurídico legal, por ello es susceptible del reproche penal por lo que hizo y se probó en este juicio oral”, explicó el juez.

El despacho avaló el testimonio del exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno, quien confesó que Ricaurte era su conexión en la Corte Suprema y quien está condenado desde 2018 a 4 años y 10 meses de prisión, por los delitos de concusión y utilización indebida de información privilegiada. “Teníamos una organización criminal, es una organización no solo criminal, lamentablemente me corrompí pero el doctor Francisco Ricaurte y el exmagistrado Leonidas Bustos corrompieron además funcionarios como al doctor Camilo Ruiz (exmagistrado auxiliar de la Corte Suprema), señaló Moreno en agosto de 2020 en medio del juicio.

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