La arremetida de Gaviria contra el procurador Carrillo

Que la política es dinámica, dicen. Fernando Carrillo, el hoy procurador general, fue ministro de Justicia en el gobierno de César Gaviria, actual director del Partido Liberal, por lo que siempre se ha considerado que son cercanos y aliados. Pero en cuestiones de poder político y de defender fichas claves, y más aún en plena campaña de autoridades locales y regionales, las prioridades son otras. Y la decisión de Carrillo de suspender por tres meses al alcalde de Pereira, Juan Pablo Gallo, por intervención en política electoral, molestó mucho al exmandatario, que se fue lanza en ristre contra el jefe del Ministerio Público.

Gallo fue sancionado tras conocerse un audio en el que estaría solicitando apoyo a contratistas de su administración para las candidaturas de Carlos Maya, candidato a sucederlo en la Alcaldía; Jaime Duque, candidato a la Asamblea de Risaralda, y Diego Naranjo, aspirante a la Gobernación. “Se investigan hechos presuntamente irregulares al parecer cometidos por el mandatario local, quien al parecer solicitó respaldos a las candidaturas de diversos aspirantes. Además, se investigan las denuncias presentadas ante el ente de control sobre una posible presión sobre otras personas para que respalden aspiraciones políticas de los candidatos”, explicó la Procuraduría en un comunicado.

Pero para Gaviria, la suspensión es una medida “arbitraria y exagerada”, pues “se toma con base en una grabación de una conversación privada, de la que no se puede inferir que el alcalde estuviese usando los bienes públicos para favorecer a un determinado candidato, ni que incurra en un constreñimiento para inducir a que las personas voten en un determinado sentido”. Asimismo, el exmandatario dio a entender que pareciera que la intención de Carrillo es desprestigiar la campaña liberal a la Alcaldía, en cabeza precisamente de Maya, y aseguró que “debería aceptar que sus decisiones son exageradas e inocuas frente a hechos que sí son verdaderamente graves".

En este sentido, Gaviria señaló que la Procuraduría debería estar centrando su atención en las denuncias sobre la presencia de dineros del narcotráfico en las campañas de Risaralda. “Debo manifestar mi extrañeza, en cambio, por la inacción de la Procuraduría y de las demás autoridades en relación con las versiones, avaladas por funcionarios públicos, que indican que dineros del narcotráfico se están usando para financiar campañas en Risaralda, sin que hasta ahora se conozca resultado alguno de las investigaciones sobre hechos que se han dado a conocer desde hace varias semanas”, expresó en su comunicado el jefe liberal.

Hay que señalar que el alcalde Gallo ha dicho que va a dar la pelea y que recurrirá hasta las últimas instancias para probar que no intervino en  política electoral. “Fue una conversación que tuve con un amigo cercano, es un amigo del trabajo, con quien en determinado momento llegamos al tema de cómo se desarrollaba el panorama electoral, pero que para nada constituye una indebida participación en política”, expresó.

Que la política es dinámica, dicen. Fernando Carrillo, el hoy procurador general, fue ministro de Justicia en el gobierno de César Gaviria, actual director del Partido Liberal, por lo que siempre se ha considerado que son cercanos y aliados. Pero en cuestiones de poder político y de defender fichas claves, y más aún en plena campaña de autoridades locales y regionales, las prioridades son otras. Y la decisión de Carrillo de suspender por tres meses al alcalde de Pereira, Juan Pablo Gallo, por intervención en política electoral, molestó mucho al exmandatario, que se fue lanza en ristre contra el jefe del Ministerio Público.

Gallo fue sancionado tras conocerse un audio en el que estaría solicitando apoyo a contratistas de su administración para las candidaturas de Carlos Maya, candidato a sucederlo en la Alcaldía; Jaime Duque, candidato a la Asamblea de Risaralda, y Diego Naranjo, aspirante a la Gobernación. “Se investigan hechos presuntamente irregulares al parecer cometidos por el mandatario local, quien al parecer solicitó respaldos a las candidaturas de diversos aspirantes. Además, se investigan las denuncias presentadas ante el ente de control sobre una posible presión sobre otras personas para que respalden aspiraciones políticas de los candidatos”, explicó la Procuraduría en un comunicado.

Pero para Gaviria, la suspensión es una medida “arbitraria y exagerada”, pues “se toma con base en una grabación de una conversación privada, de la que no se puede inferir que el alcalde estuviese usando los bienes públicos para favorecer a un determinado candidato, ni que incurra en un constreñimiento para inducir a que las personas voten en un determinado sentido”. Asimismo, el exmandatario dio a entender que pareciera que la intención de Carrillo es desprestigiar la campaña liberal a la Alcaldía, en cabeza precisamente de Maya, y aseguró que “debería aceptar que sus decisiones son exageradas e inocuas frente a hechos que sí son verdaderamente graves".

En este sentido, Gaviria señaló que la Procuraduría debería estar centrando su atención en las denuncias sobre la presencia de dineros del narcotráfico en las campañas de Risaralda. “Debo manifestar mi extrañeza, en cambio, por la inacción de la Procuraduría y de las demás autoridades en relación con las versiones, avaladas por funcionarios públicos, que indican que dineros del narcotráfico se están usando para financiar campañas en Risaralda, sin que hasta ahora se conozca resultado alguno de las investigaciones sobre hechos que se han dado a conocer desde hace varias semanas”, expresó en su comunicado el jefe liberal.

Hay que señalar que el alcalde Gallo ha dicho que va a dar la pelea y que recurrirá hasta las últimas instancias para probar que no intervino en  política electoral. “Fue una conversación que tuve con un amigo cercano, es un amigo del trabajo, con quien en determinado momento llegamos al tema de cómo se desarrollaba el panorama electoral, pero que para nada constituye una indebida participación en política”, expresó.