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Guillermo Rivera, ministro del Interior, se pronunció luego de que se conociera, de boca del mismo Iván Márquez, líder del partido político FARC, que no se posesionaría en su curul en el Senado el próximo 20 de julio.
“Les hacemos la invitación a que tomen posesión de su cargo quienes fueron elegidos. Nos parece que eso hace parte de este proceso de reincorporación, es un tema central del acuerdo (…) La invitación a Iván Márquez es a que tome posesión el 20 de julio y ejerza el mandato popular del que fue objeto el pasado 11 de marzo”, señaló Rivera.
El jefe de la cartera política expresó que desde el Gobierno se ha hecho el esfuerzo para garantizar la reincorporación a la vida política de los excombatientes de las antiguas Farc y por cumplir lo estipulado en el acto legislativo 03 de 2017, en el que se determinaron las reglas para que la exguerilla pudiera convertirse en un partido político con personería jurídica. “Están dadas las condiciones para la reincorporación política en virtud de la norma constitucional que ya fue avalada por la Corte Constitucional”, apuntó el ministro.
No obstante, también dijo que la decisión de no tomar la curul es un asunto individual y que, como ese tema no lo previó el acto legislativo 03 de 2017, serán las leyes ordinarias las que se encarguen de regular en caso de que uno de los hoy electos congresistas de la FARC no quiera ocupar su curul en el Legislativo.
En ese sentido, si alguno de los miembros de la FARC no tomara posesión, tendría que ser llamado el siguiente en la lista de la colectividad, como lo señalan las reglas ordinarias. “El gobierno no tiene más alternativa que respetar la decisión individual de cada uno y, en caso de que exista una vacancia, la Constitución tiene previstos los mecanismos”, concluyó el ministro.
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En entrevista con Cm&, Márquez señaló que no ocuparía la curul en el Senado hasta tanto no se dé la liberación de Jesús Santrich, que se encuentra recluido en la cárcel La Picota a la espera de la revisión de su caso por parte de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), en el que es pedido extradición por un juez del distrito sur de Nueva York (Estados Unidos).