La decisión de Gustavo Petro de remover de sus cargos a los ministros de Salud, Interior, Hacienda, Ciencia, Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC), Transporte y la dirección del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre) ha generado diversas reacciones por parte de políticos y miembros de la opinión pública.
Algunos congresistas han manifestado, de manera general, su apoyo a las decisiones del Ejecutivo, como es el caso de María José Pizarro: “Ganamos las elecciones para gobernar y legislar por el Cambio, de la mano de gente y las comunidades. Respaldo las decisiones en relación con el gabinete de nuestro compañero, el Presidente, Gustavo Petro”. O el senador Ariel Ávila, quien afirmó que “las crisis ministeriales son absolutamente normales. Todos los gobiernos las hacen en Colombia para reacomodar fuerzas, lo grave sería que se quedaran con los mismos y que no cambiara nada”.
Sin embargo, otros han expresado dudas puntuales frente a la salida de algunos ministros y la llegada de otros. Este es el caso del Ministerio de Hacienda, que deja José Antonio Ocampo y es relevado por Ricardo Bonilla. “Me preocupa la salida de Ocampo porque alguien tiene que ser el freno de mano, el que aterriza y contextualiza. El de Petro es un gobierno de transición en el que Ocampo fungía como puente entre una política antigua y una política futura. Daba confianza a todas las partes”, afirmó la columnista Cristina Nicholls. Esta visión de Ocampo como el polo a tierra del Gobierno es compartida por otros personajes del ojo público.
Mauricio Cárdenas, quien estuvo a cargo de la cartera de Hacienda durante el Gobierno de Juan Manuel Santos, expresó que el ministro entrante, Ricardo Bonilla debía dar declaraciones inmediatas sobre: “Apego a la regla fiscal; respeto a la independencia Banco de la República y Superfinanciera; respaldo a las actividades de exploración de Ecopetrol”. “De lo contrario, dólar abre mañana por encima de $5 mil. Y el agradecimiento de un país con usted, ministro Ocampo, por su firme defensa de la estabilidad macro, indispensable para enfrentar con éxito la volatilidad de los últimos meses”, escribió en su cuenta de Twitter.
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Entre los nombramientos que dejaron sin sabores también se encuentra el de Mauricio Lizcano como nuevo ministro de las TIC, en reemplazo de Sandra Milena Urrutia. Aunque se decía desde la semana pasada que el funcionario saldría de su puesto a la cabeza del DAPRE, su nombramiento el día de hoy resultó sorpresivo para muchos. Entre los cuestionamientos se señala la falta de experiencia técnica de Lizcano y que, sin duda, requiere la catera.
La suya ha sido una carrera mucho más política. Todo esto cobra aún más relevancia si se tiene en cuenta que tendrá la tarea de asumir el despliegue comercial de la red 5G (que ta tiene adelantada sus bases técnicas y jurídicas), el cierre de las brechas digitales y los programas para la formación de competencias 4.0 en la fuerza laboral colombiana.
Adicionalmente, algunos periodistas han señalado a Lizcano de presuntamente censurar su trabajo.
Nombrado en mintic el tipo que habría censurado el programa de Pirry y mi investigación. Qué miedo.
— DianaSalinasPlaza (@DianaSalinasP) April 26, 2023
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