Publicidad

Las razones por las que Colombia tendrá dos nuevos partidos políticos

En las últimas semanas, el CNE les ha dado vida a tres nuevos partidos. ¿Se está gestando una nueva partiditis?

Juan Sebastián Lombo
20 de diciembre de 2022 - 12:00 p. m.
Carlos Caicedo y Juan Fernando Cristo  recibieron las personerías de sus movimiento políticos: Fuerza Ciudadana y En Marcha, respectivamente.
Carlos Caicedo y Juan Fernando Cristo recibieron las personerías de sus movimiento políticos: Fuerza Ciudadana y En Marcha, respectivamente.
Foto: El Espectador
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

La Constitución de 1991 tuvo entre sus enfoques una apertura política que rompiera con el férreo bipartidismo que dominó el siglo XX colombiano. El intento tuvo un gran éxito, incluso se podría decir que demasiado. Hacia los primeros años de los 2000, el país llegó a tener poco más de 50 colectividades. El tarjetón era todo un dolor de cabeza.

Ante la crisis de exceso de representación, una reforma constitucional impuso un umbral electoral para mantener la personería. En 2003 la modificación de la Carta Magna exigió que se sacara al menos el 2% de la votación legislativa para seguir siendo un partido reconocido, en 2009 se aumentó a 3%. También hubo éxito en esta medida y se bajó de nuevo el número de partidos.

Sin embargo, las negociaciones de paz de La Habana volvieron a poner sobre la mesa necesidad de relajar las reglas de participación para acceder a la personería jurídica de un partido. De esta forma, el acuerdo de paz con las extintas Farc han servido para una nueva explosión de partidos. Tan solo esta semana el Consejo Nacional Electoral le ha dado vida a tres nuevas colectividades.

>Lea más sobre el Congreso, el Gobierno Petro y otras noticias del mundo político

Primero fue el partido de Roy Barreras, La Fuerza de la Paz. Luego, este lunes se conoció que a la parilla partidista se unían dos miembros nuevos: En Marcha y Fuerza Ciudadana. Ambas colectividades son de viejos conocidos de la política, Juan Fernando Cristo y Carlos Caicedo. Las dos personerías se fundamentaron en el acuerdo de paz y en fallos posteriores, como el que le devolvió la vida al Nuevo Liberalismo.

En el caso de En Marcha, el magistrado César Lorduy señaló que bajo el acuerdo de paz, sobre todo bajo la premisa de que “el reconocimiento de nuevos grupos políticos se vuelve crucial para lograr la paz”, se le otorgaba personería jurídica al movimiento de Cristo, que alcanzó a avalar a tres candidatos que resultaron electos al Senado por la lista de Centro Esperanza.

Este caso es llamativo, pues en dicha lista había otros partidos y aún así En Marcha presentó como avalados a Guido Echeverri, Gustavo Moreno Hurtado y Jairo Alberto Castellanos y los sacó elegidos. Por eso, el trío de senadores electos, junto con Juan Fernando Cristo, presentó una demanda ante el CNE para que se les diera la personería, pues “la lista de la coalición superó ampliamente el umbral requerido”.

Esta petición fue atendida por el magistrado, y exrepresentante, César Lorduy. Para el togado del CNE, “sería incomprensible que una agrupación política que, al interior de la Coalición Centro Esperanza, permitió la elección de tres senadores, no se le reconozca el derecho, a sus militantes y electores y a los ciudadanos en general, a ejercer la defensa de una plataforma programática con las mismas garantías de los partidos que participaron de la coalición”.

Puede ver: Los detalles de la decisión que dejó a Roy Barreras con partido propio

De acuerdo con el magistrado Lorduy, el tema pasa porque En Marcha incluso sacó mejores resultados que otras colectividades que participaron de la coalición y no habrían tenido electos. Por eso, señaló que el CNE debe hacerse garante para que esas colectividades que alcanzaron representatividad no desaparezcan y “mantengan su individualidad como tal”.

Aunque el magistrado encontró algunos faltantes en cuanto a temas de estatutos e inscritos en el movimiento, señaló que estaban todos los requisitos básicos para reconocer su personería jurídica. Además, le dio 15 días hábiles a la colectividad para que corrija los posibles errores.

El caso de Fuerza Ciudadana

Carlos Caicedo es un cabeza de un movimiento que, a pesar de no tener personería hasta hace unos días, sacó varios alcaldes en Santa Marta y hasta lo llevó a la gobernación del Magdalena. Incluso, bajo este movimiento, Fuerza Ciudadana, participó de la contienda presidencial de 2018. Se enfrentó a Gustavo Petro en una consulta de precandidatos, en la que claramente salió derrotado.

Aunque perdió, esa participación en dicho proceso electoral es la que tiene ahora a Caicedo con partido político. En este caso, la demanda para recibir la personería la tuvo a su cargo Fabiola Márquez, que llegó al CNE como cuota del Pacto Histórico y ha sido partidaria de Caicedo. Esta fue la que determinó que el movimiento de Caicedo merecía tener personería oficialmente.

Fundamentada en el punto de participación política del acuerdo de paz y en el fallo que le devolvió la personería jurídica al Nuevo Liberalismo, la magistrada señaló que Caicedo y su movimiento debían recibir a personería. Una de las principales razones es que Fuerza Ciudadana hizo parte de la coalición con la que Gustavo Petro le peleó la presidencia a Iván Duque.

Además: ¿Se está gestando una nueva “partiditis” en Colombia?

Aunque Caicedo salió derrotado en la consulta presidencial, su movimiento siguió figurando entre los avales de Gustavo Petro, por lo que debía extenderse a este el fallo que le entregó la personería a la Colombia Humana. En este mismo sentido, se señaló que el líder de Fuerza Ciudadana logró comprobar que su movimiento ha perdurado en el tiempo, desde 2011, y ha tenido una fuerza electoral suficiente en el Magdalena y ha sacado una votación considerable en certámenes a nivel nacional.

De esta forma, para Márquez, el movimiento de Caicedo cumplía con al menos dos requisitos para recibir la personería. Por eso, se ordenó que se haga pleno reconocimiento de Fuerza Ciudadana como partido político y se consolidó a Carlos Caicedo como su presidente fundador y a Rafael Martínez, exalcalde de Santa Marta, como su secretario general.

¿Se avecina una nueva partiditis?

La aparición de dos nuevos partidos termina siendo de suma importancia para el panorama regional, pues en 2023 habría elecciones para alcaldes, gobernadores, asambleas y concejos. No solo es Fuerza Ciudadana y En Marcha, sino que hace unos días fue el partido de Roy Barreras y más atrás están los antecedentes de la Liga de Gobernantes Anticorrupción -cuya personería está en veremos-, el Partido Ecologista Colombiano, Colombia Humana y los partidos resucitados (Verde Oxígeno, Nuevo Liberalismo, Salvación Nacional, Partido Comunista, entre otros).

Para las próximas elecciones regionales habrá un crisol de partidos para que puedan dar avales. Esto será un factor de suma importancia para la estrategia en los territorios, sobre todo cuando el gobierno nacional busca aumentar la presencia de afines en los territorios. Para este fin, podrá contar con una figura como Fuerza Ciudadana y hasta la colectividad de Barreras.

Sin embargo, esto también pasa a ser problemático. En 2003 se hizo una reforma constitucional para frenar la explosión de partidos. Funcionó tan bien, que incluso se tuvo que relajar sus efectos con el acuerdo de paz. No obstante, bajo esta nueva realidad política se ha dado un aumento exponencial de partidos que puede terminar con los mismos problemas de comienzos del siglo XXI.

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar