“Lo de Iván Name estaba planeado por los verdes”: Gustavo Bolívar
El senador que fue el primer candidato de la oposición para la segunda vicepresidencia sostuvo que no esperaba que la Alianza Verde terminara por desconocer el artículo 18 del Estatuto de la Oposición, pero que la postulación de Name no se dio de la nada.
Lo que se construyó durante los últimos tres años de una oposición que operó y funcionó a modo de bancada, pese a estar conformada por más de cinco partidos y movimientos políticos, se disolvió este 20 de julio. La primera muestra del deterioro de las relaciones interpartidistas se evidenció cuando se dividieron los 20 minutos para el discurso de réplica al presidente Iván Duque durante la instalación de la última legislatura de este Congreso. La Alianza Verde sostiene que esta ocasión era su turno de tomar la palabra, como lo hicieron Jorge Robledo en 2018 en nombre del Polo Democrático –organización a la que ya no pertenece– y Aída Avella en 2019 en representación de la Lista de los Decentes.
Lea: Las razones de la oposición sobre sus réplicas por separado este 20 de julio.
Voces dentro de la oposición pidieron que en esta ocasión fueran los Comunes los que hablaran, pues consideran que los verdes han protagonizado y liderado otros espacios de oposición. Ante la ausencia de un consenso, por derecho propio, optaron dividir los 20 minutos entre los verdes, MAIS y Comunes. Olvidado este capítulo, lo que transcurrió en la plenaria del Senado mientras la elección de la Mesa Directiva ahondó más las grandes diferencias entre la Alianza Verde y el resto de senadores de la oposición.
De acuerdo con el artículo 18 de la Ley 1909 de 2018, la oposición tiene derecho a tener representación en la Mesa Directiva del Senado, ocupando año a año la segunda vicepresidencia. De acuerdo con la normativa, se debe cumplir el principio de alternancia en género (un año una mujer, al otro un hombre, de nuevo una mujer, etc.) y cada partido puede ejercer el cargo una vez, a menos de que haya consenso de que algún integrante repita la segunda vicepresidencia.
También: Oposición no se pone de acuerdo y le responde al presidente por separado)
La oposición para este año postuló a Gustavo Bolívar, quien estaba previsto que fuera segundo vicepresidente el año pasado, pero por la obligatoriedad de la alternancia cedió su puesto a Sandra Ramírez, de Comunes, bajo el compromiso de que este año sería su turno junto al de la Lista de los Decentes. El problema es que Bolívar no sacó los votos suficientes para posesionarse en el cargo, pues el voto en blanco logró 66 votos. Aunque el Polo, Unión Patriótica, Comunes, MAIS y Decentes insistieron en la postulación de Bolívar, al considerar que era su derecho y que era inadmisible que las mayorías impongan a su representante, la Alianza Verde postuló a Iván Name, pese a que para el período 2018 I - 2019 II Angélica Lozano se desempeñó como segunda vicepresidenta a nombre de toda la oposición.
El Espectador habló con Gustavo Bolívar sobre este hecho inédito que abre una discusión interesante sobre el Estatuto de la Oposición que no contempla la eventualidad de que gane el voto en blanco y que termina dándole poder a las mayorías de decidir sobre quién de la oposición llega a ese puesto.
¿Qué pasó con los acuerdos para el discurso de réplica?
Yo nunca me he metido en eso, porque yo nunca he hablado, nunca he querido pelearme con ese espacio que de pronto tienen menos vitrina que yo. Pero lo que le peleé es que le tocara a Comunes porque ellos nunca han hablado, son 10 congresistas y nunca les han dado un espacio. A Comunes les hacen el asco, los sacan a un lado, les burlan los acuerdos y ellos nunca han hablado. Entonces yo metí la mano en esto por los Comunes. Eso fue todo lo que dije ahí. Lo que es cierto es que la Alianza Verde ha hablado más veces que los demás partidos.
A partir de ahí, ¿cree que hubo una división o una fisura en toda la oposición?
No, son dos cosas muy distintas. La elección de la Mesa Directiva es un cargo que nos otorgó a nosotros el Estatuto de Oposición. No nos lo da el Congreso, ni el Gobierno, ni lo deciden las mayorías del Congreso. Y ahí es donde nace la indignación de todos los grupos alternativos al final de la jornada porque lo que quiere el uribismo, así como impuso contralor, magistrados, procuradora, defensor, también quieren imponer el candidato de la oposición en la Mesa Directiva. Eso no lo aceptamos, por eso la gente se paró y se fue. Obviamente eso va a tener consecuencias porque el Estatuto es claro en cuanto a que los únicos que pueden decidir quién es el candidato de la oposición somos nosotros y no el uribismo, que lo que hizo fue interferir para ellos decir: este no me gusta, pongan a otro. Claro, pusieron a Name que es de la clase política tradicional, de toda la vida, que sí les gusta. Y el Partido Verde se prestó para eso.
Más : Senado bloqueó la elección de Gustavo Bolívar para segunda vicepresidencia)
Yo esperaba esa jugada desde ayer, nos habían pasado información de que ellos iban a promover esto. Es más, dijimos que fuéramos a la elección, no importaba que perdiéramos, pero nunca contamos con que el Partido Verde iba a traicionar el acuerdo. Nosotros sí cumplimos el acuerdo cuando Angélica Lozano fue candidata y votamos por ella.
Ella va a decir que votaron por mí, pero lo correcto hoy era que todos los partidos alternativos nos levantáramos y dijéramos que el uribismo no puede decir quién le cae bien y cae mal, quién es cómodo para él, porque obviamente ahí estaría interfiriendo en un Estatuto de la Oposición y eso es lo que vamos a demandar.
Los verdes cuando pasó su elección y postularon a Iván Name y dijeron que los que los traicionaron fueron los conservadores y el uribismo porque, supuestamente, ustedes acordaron votar por Juan Diego Gómez para asegurar sus votos. ¿Es verdad?
Eso es mentira. La candidatura de Antonio Sanguino salió faltando cinco minutos y salió de la nada solo para justificar lo que pasó. Esa candidatura no existía. Faltando menos de cinco minutos dijeron que iban a lanzar a Sanguino. Lo hicieron para curarse en salud, porque ellos sabían que yo no iba a ganar y ahí meter a Name. A mí me habían advertido que él se iba a lanzar. Eso no apareció de la nada. Pero ellos desconocieron que el Estatuto dice en el artículo 18 que ningún partido, que ya ocupó la segunda vicepresidencia, puede volverlo a ocupar hasta que todos los partidos de la oposición no hayan ocupado esa posición. Y los verdes ya habían ocupado esa posición, como también el Polo con Alexánder López y Sandra Ramírez de Comunes. Faltaba la coalición Decentes. Y el candidato de ellos fui yo. Y los demás lo aceptaron. Ellos no podían volver a postular a alguien del partido, porque eso viciaba toda la elección de la mesa directiva.
Si el Partido Verde ya tenía todo esto planeado, ¿por qué ustedes terminaron por votar a Juan Diego Gómez y no por alguien de la oposición?
Le comparto lo que dijo Jorge Eduardo Londoño Ulloa, senador de los verdes: “El día de hoy me aparté de la decisión mayoritaria de la bancada de mi partido y me retiré de la sesión. El Estatuto de la Oposición debe respetarse y es claro en establecer que el Partido Verde no podía ocupar nuevamente la segunda vicepresidencia sin el consenso”. Ahí lo dice todo.
También: Senado eligió al conservador Juan Diego Gómez como su nuevo presidente.
¿Por qué votaron al fin por Gómez y no Sanguino?
Ellos hicieron una sola plancha. Ellos se salieron de la plancha, donde estaba Juan Diego Gómez, Maritza Martínez y yo. Nosotros los votamos y ellos nos traicionaron. El Partido Conservador nos traicionó, nosotros sí cumplimos con el acuerdo. En Cámara, por ejemplo, se votaron por los tres al tiempo, que es como se hace siempre. Estaba tan premeditada la jugada que hicieron las votaciones por separado. Ponen primero Presidencia, para que nosotros caigamos y votamos cumpliendo los acuerdos. Igual con la primera vicepresidenta y después ponen de última la nuestra y ahí hacen el conejo. El Partido Conservador nos hicieron el conejo, está bien, yo me lo esperaba, pero no del Verde.
Esperábamos que toda la oposición le dijera al uribismo que no nos impusiera el candidato a la oposición y nos retiráramos. Para dejar el vacío y limbo. Pero muy vivos, postulan a Name para ganarse los votos y con eso la embarraron porque se igualaron al uribismo. Por eso dije que había nacido una nueva alianza del verde uribismo.
Usted dio a entender que no habían hecho acuerdo con conservadores...
No había más candidatos cuando se presentó la plancha, cuando hay una sola plancha la gente vota por esa plancha.
Ustedes tenían la potestad de votar por Sanguino y no lo hicieron...
Esa candidatura no existía, la inventaron para justificar esto. Y ustedes están cayendo en esta trampa. Miren las papeletas de Antonio Sanguino. No existían. Nosotros no sabíamos que lo iban a postular, nosotros ya habíamos dicho que íbamos en una plancha única de todo el Senado. Cuando aparecen con esa candidatura nos dejan sorprendidos porque ya habíamos dicho que íbamos en la plancha única. No se trata de quien apoyamos y quien no, sino de apoyar a una sola plancha y nosotros aceptamos.
Hace un año también los verdes postularon a uno de los suyos, Iván Marulanda, ¿cuál es el problema ahora?
Esa postulación sí fue consensuada con nosotros y con antelación y nosotros votamos por él. Esta se presenta cuando ya hemos dicho que sí a una plancha única con Juan Diego, Martiza y mi nombre.
¿Cree que esto podría ser una estrategia de los verdes por viciar la elección y que se elija de nuevo una mesa directiva?
Ya está viciada porque es claro el Estatuto. El puesto es la oposición, no lo puede manipular el uribismo, que fue lo que hizo hoy, no votamos por este que nos incomoda, votamos por este que es de los míos. No se pueden en lo nuestro. Por eso no quisimos postular a alguien más, porque según el reglamento había que postular a alguien más. Pero la cuestión era por qué íbamos a poner al que ellos les guste.
Cuando Alexánder López les dice al final y les lee el artículo 18, que determina que partidos no pueden repetir la segunda vicepresidencia, salvo sea común acuerdo, expresa que Polo, MAIS, UP, Decentes, Comunes “no queremos otro candidato, sino a Gustavo Bolívar y nos retiramos”, a partir de ahí queda viciado.
¿Hay algún vacío en el Estatuto ante esta eventualidad que se presentó?
No, es muy claro. El único vacío es que esa elección no debería mezclarse con partidos de gobierno e independientes. Debería haber una plancha única para la vicepresidencia, que la elijamos nosotros. Creo que es el único vacío susceptible de mejora, porque es un puesto nuestro y los que vengan en el futuro, incluso de ellos mismos cuando sean oposición.
Nosotros veremos a quién ponemos ahí, no tiene que ser alguien que le guste o no a la mayoría. Lo que hicieron es no votar por mí porque les doy muy duro y pusieron a Name que es hijo de un cacique electoral. Esto no lo puede permitir el Consejo de Estado y ya procederemos con los respectivos recursos. Se va a caer toda la elección y lo que se legisle en estos días se va a caer porque es una mesa directiva viciada.
Tan planeada estaba la jugada que nunca había papleletas en blanco, cuando uno quería votar en blanco tenía que arrancar un pedazo de papel y poner blanco. Hoy venían impresas, decían voto en blanco. Eso lo planearon hace rato.
¿Se rompieron las relaciones con los verdes?
Sí, totalmente, demostraron que están más del lado del uribismo que la oposición.
¿Fue una jugada con miras a las elecciones de 2022?
Una jugada tonta, ese puesto no determina nada. Si yo era segundo vicepresidente, eso no asegura que Gustavo Petro vaya a ganar, es un puesto inocuo, el segundo vicepresidente casi nunca dirige. Por ahí una vez en seis meses, cuando el presidente se va al baño. Es un puesto simbólico porque está representada la oposición, pero ellos fueron muy torpes en esa ambición de ocupar la segunda vicepresidencia porque no representa de nada a la elección, lo que representa es un duro golpe a su imagen, quedaron en evidencia que son traidores de los movimientos alternativos.
Lo que se construyó durante los últimos tres años de una oposición que operó y funcionó a modo de bancada, pese a estar conformada por más de cinco partidos y movimientos políticos, se disolvió este 20 de julio. La primera muestra del deterioro de las relaciones interpartidistas se evidenció cuando se dividieron los 20 minutos para el discurso de réplica al presidente Iván Duque durante la instalación de la última legislatura de este Congreso. La Alianza Verde sostiene que esta ocasión era su turno de tomar la palabra, como lo hicieron Jorge Robledo en 2018 en nombre del Polo Democrático –organización a la que ya no pertenece– y Aída Avella en 2019 en representación de la Lista de los Decentes.
Lea: Las razones de la oposición sobre sus réplicas por separado este 20 de julio.
Voces dentro de la oposición pidieron que en esta ocasión fueran los Comunes los que hablaran, pues consideran que los verdes han protagonizado y liderado otros espacios de oposición. Ante la ausencia de un consenso, por derecho propio, optaron dividir los 20 minutos entre los verdes, MAIS y Comunes. Olvidado este capítulo, lo que transcurrió en la plenaria del Senado mientras la elección de la Mesa Directiva ahondó más las grandes diferencias entre la Alianza Verde y el resto de senadores de la oposición.
De acuerdo con el artículo 18 de la Ley 1909 de 2018, la oposición tiene derecho a tener representación en la Mesa Directiva del Senado, ocupando año a año la segunda vicepresidencia. De acuerdo con la normativa, se debe cumplir el principio de alternancia en género (un año una mujer, al otro un hombre, de nuevo una mujer, etc.) y cada partido puede ejercer el cargo una vez, a menos de que haya consenso de que algún integrante repita la segunda vicepresidencia.
También: Oposición no se pone de acuerdo y le responde al presidente por separado)
La oposición para este año postuló a Gustavo Bolívar, quien estaba previsto que fuera segundo vicepresidente el año pasado, pero por la obligatoriedad de la alternancia cedió su puesto a Sandra Ramírez, de Comunes, bajo el compromiso de que este año sería su turno junto al de la Lista de los Decentes. El problema es que Bolívar no sacó los votos suficientes para posesionarse en el cargo, pues el voto en blanco logró 66 votos. Aunque el Polo, Unión Patriótica, Comunes, MAIS y Decentes insistieron en la postulación de Bolívar, al considerar que era su derecho y que era inadmisible que las mayorías impongan a su representante, la Alianza Verde postuló a Iván Name, pese a que para el período 2018 I - 2019 II Angélica Lozano se desempeñó como segunda vicepresidenta a nombre de toda la oposición.
El Espectador habló con Gustavo Bolívar sobre este hecho inédito que abre una discusión interesante sobre el Estatuto de la Oposición que no contempla la eventualidad de que gane el voto en blanco y que termina dándole poder a las mayorías de decidir sobre quién de la oposición llega a ese puesto.
¿Qué pasó con los acuerdos para el discurso de réplica?
Yo nunca me he metido en eso, porque yo nunca he hablado, nunca he querido pelearme con ese espacio que de pronto tienen menos vitrina que yo. Pero lo que le peleé es que le tocara a Comunes porque ellos nunca han hablado, son 10 congresistas y nunca les han dado un espacio. A Comunes les hacen el asco, los sacan a un lado, les burlan los acuerdos y ellos nunca han hablado. Entonces yo metí la mano en esto por los Comunes. Eso fue todo lo que dije ahí. Lo que es cierto es que la Alianza Verde ha hablado más veces que los demás partidos.
A partir de ahí, ¿cree que hubo una división o una fisura en toda la oposición?
No, son dos cosas muy distintas. La elección de la Mesa Directiva es un cargo que nos otorgó a nosotros el Estatuto de Oposición. No nos lo da el Congreso, ni el Gobierno, ni lo deciden las mayorías del Congreso. Y ahí es donde nace la indignación de todos los grupos alternativos al final de la jornada porque lo que quiere el uribismo, así como impuso contralor, magistrados, procuradora, defensor, también quieren imponer el candidato de la oposición en la Mesa Directiva. Eso no lo aceptamos, por eso la gente se paró y se fue. Obviamente eso va a tener consecuencias porque el Estatuto es claro en cuanto a que los únicos que pueden decidir quién es el candidato de la oposición somos nosotros y no el uribismo, que lo que hizo fue interferir para ellos decir: este no me gusta, pongan a otro. Claro, pusieron a Name que es de la clase política tradicional, de toda la vida, que sí les gusta. Y el Partido Verde se prestó para eso.
Más : Senado bloqueó la elección de Gustavo Bolívar para segunda vicepresidencia)
Yo esperaba esa jugada desde ayer, nos habían pasado información de que ellos iban a promover esto. Es más, dijimos que fuéramos a la elección, no importaba que perdiéramos, pero nunca contamos con que el Partido Verde iba a traicionar el acuerdo. Nosotros sí cumplimos el acuerdo cuando Angélica Lozano fue candidata y votamos por ella.
Ella va a decir que votaron por mí, pero lo correcto hoy era que todos los partidos alternativos nos levantáramos y dijéramos que el uribismo no puede decir quién le cae bien y cae mal, quién es cómodo para él, porque obviamente ahí estaría interfiriendo en un Estatuto de la Oposición y eso es lo que vamos a demandar.
Los verdes cuando pasó su elección y postularon a Iván Name y dijeron que los que los traicionaron fueron los conservadores y el uribismo porque, supuestamente, ustedes acordaron votar por Juan Diego Gómez para asegurar sus votos. ¿Es verdad?
Eso es mentira. La candidatura de Antonio Sanguino salió faltando cinco minutos y salió de la nada solo para justificar lo que pasó. Esa candidatura no existía. Faltando menos de cinco minutos dijeron que iban a lanzar a Sanguino. Lo hicieron para curarse en salud, porque ellos sabían que yo no iba a ganar y ahí meter a Name. A mí me habían advertido que él se iba a lanzar. Eso no apareció de la nada. Pero ellos desconocieron que el Estatuto dice en el artículo 18 que ningún partido, que ya ocupó la segunda vicepresidencia, puede volverlo a ocupar hasta que todos los partidos de la oposición no hayan ocupado esa posición. Y los verdes ya habían ocupado esa posición, como también el Polo con Alexánder López y Sandra Ramírez de Comunes. Faltaba la coalición Decentes. Y el candidato de ellos fui yo. Y los demás lo aceptaron. Ellos no podían volver a postular a alguien del partido, porque eso viciaba toda la elección de la mesa directiva.
Si el Partido Verde ya tenía todo esto planeado, ¿por qué ustedes terminaron por votar a Juan Diego Gómez y no por alguien de la oposición?
Le comparto lo que dijo Jorge Eduardo Londoño Ulloa, senador de los verdes: “El día de hoy me aparté de la decisión mayoritaria de la bancada de mi partido y me retiré de la sesión. El Estatuto de la Oposición debe respetarse y es claro en establecer que el Partido Verde no podía ocupar nuevamente la segunda vicepresidencia sin el consenso”. Ahí lo dice todo.
También: Senado eligió al conservador Juan Diego Gómez como su nuevo presidente.
¿Por qué votaron al fin por Gómez y no Sanguino?
Ellos hicieron una sola plancha. Ellos se salieron de la plancha, donde estaba Juan Diego Gómez, Maritza Martínez y yo. Nosotros los votamos y ellos nos traicionaron. El Partido Conservador nos traicionó, nosotros sí cumplimos con el acuerdo. En Cámara, por ejemplo, se votaron por los tres al tiempo, que es como se hace siempre. Estaba tan premeditada la jugada que hicieron las votaciones por separado. Ponen primero Presidencia, para que nosotros caigamos y votamos cumpliendo los acuerdos. Igual con la primera vicepresidenta y después ponen de última la nuestra y ahí hacen el conejo. El Partido Conservador nos hicieron el conejo, está bien, yo me lo esperaba, pero no del Verde.
Esperábamos que toda la oposición le dijera al uribismo que no nos impusiera el candidato a la oposición y nos retiráramos. Para dejar el vacío y limbo. Pero muy vivos, postulan a Name para ganarse los votos y con eso la embarraron porque se igualaron al uribismo. Por eso dije que había nacido una nueva alianza del verde uribismo.
Usted dio a entender que no habían hecho acuerdo con conservadores...
No había más candidatos cuando se presentó la plancha, cuando hay una sola plancha la gente vota por esa plancha.
Ustedes tenían la potestad de votar por Sanguino y no lo hicieron...
Esa candidatura no existía, la inventaron para justificar esto. Y ustedes están cayendo en esta trampa. Miren las papeletas de Antonio Sanguino. No existían. Nosotros no sabíamos que lo iban a postular, nosotros ya habíamos dicho que íbamos en una plancha única de todo el Senado. Cuando aparecen con esa candidatura nos dejan sorprendidos porque ya habíamos dicho que íbamos en la plancha única. No se trata de quien apoyamos y quien no, sino de apoyar a una sola plancha y nosotros aceptamos.
Hace un año también los verdes postularon a uno de los suyos, Iván Marulanda, ¿cuál es el problema ahora?
Esa postulación sí fue consensuada con nosotros y con antelación y nosotros votamos por él. Esta se presenta cuando ya hemos dicho que sí a una plancha única con Juan Diego, Martiza y mi nombre.
¿Cree que esto podría ser una estrategia de los verdes por viciar la elección y que se elija de nuevo una mesa directiva?
Ya está viciada porque es claro el Estatuto. El puesto es la oposición, no lo puede manipular el uribismo, que fue lo que hizo hoy, no votamos por este que nos incomoda, votamos por este que es de los míos. No se pueden en lo nuestro. Por eso no quisimos postular a alguien más, porque según el reglamento había que postular a alguien más. Pero la cuestión era por qué íbamos a poner al que ellos les guste.
Cuando Alexánder López les dice al final y les lee el artículo 18, que determina que partidos no pueden repetir la segunda vicepresidencia, salvo sea común acuerdo, expresa que Polo, MAIS, UP, Decentes, Comunes “no queremos otro candidato, sino a Gustavo Bolívar y nos retiramos”, a partir de ahí queda viciado.
¿Hay algún vacío en el Estatuto ante esta eventualidad que se presentó?
No, es muy claro. El único vacío es que esa elección no debería mezclarse con partidos de gobierno e independientes. Debería haber una plancha única para la vicepresidencia, que la elijamos nosotros. Creo que es el único vacío susceptible de mejora, porque es un puesto nuestro y los que vengan en el futuro, incluso de ellos mismos cuando sean oposición.
Nosotros veremos a quién ponemos ahí, no tiene que ser alguien que le guste o no a la mayoría. Lo que hicieron es no votar por mí porque les doy muy duro y pusieron a Name que es hijo de un cacique electoral. Esto no lo puede permitir el Consejo de Estado y ya procederemos con los respectivos recursos. Se va a caer toda la elección y lo que se legisle en estos días se va a caer porque es una mesa directiva viciada.
Tan planeada estaba la jugada que nunca había papleletas en blanco, cuando uno quería votar en blanco tenía que arrancar un pedazo de papel y poner blanco. Hoy venían impresas, decían voto en blanco. Eso lo planearon hace rato.
¿Se rompieron las relaciones con los verdes?
Sí, totalmente, demostraron que están más del lado del uribismo que la oposición.
¿Fue una jugada con miras a las elecciones de 2022?
Una jugada tonta, ese puesto no determina nada. Si yo era segundo vicepresidente, eso no asegura que Gustavo Petro vaya a ganar, es un puesto inocuo, el segundo vicepresidente casi nunca dirige. Por ahí una vez en seis meses, cuando el presidente se va al baño. Es un puesto simbólico porque está representada la oposición, pero ellos fueron muy torpes en esa ambición de ocupar la segunda vicepresidencia porque no representa de nada a la elección, lo que representa es un duro golpe a su imagen, quedaron en evidencia que son traidores de los movimientos alternativos.