Magistrado del CNE pide excluir el voto en blanco del tarjetón a segunda vuelta

Basándose en artículos de la Constitución Nacional y en la reforma política de 2011, el magistrado del Consejo Nacional Electoral, Armando Novoa, pidió a las máximas autoridades electorales, como lo son el Registrador Nacional, Juan Carlos Galindo, y Yolima Carrillo, presidenta del CNE, no incluir la casilla de voto en blanco en la elección presidencial de segunda vuelta, que se realizará el próximo 17 de junio.

(Lea más sobre el voto en blanco aquí)

Novoa sostiene que le solicitó a la sala plena, en su reunión del pasado lunes, que examinara dicha solicitud, pues, a juicio del abogado, el ordenamiento jurídico vigente define que el voto en blanco tiene alcances políticos sólo en la primera vuelta presidencial. “Debido a la proximidad de la elección, y ante la dificultad de que el tema se examine en la corporación, en la condición de miembros del CNE me permito solicitar que se excluya de la tarjeta electoral la casilla del voto en blanco”, dice Novoa en su carta.

Acto seguido cita los artículos 258 y 190 de la Constitución Política, y el 38 de la llamada reforma política de 2011 en los que, palabras más palabreas menos, se define el alcance del voto en blanco como un mecanismo de protesta ciudadana que tiene efectos electorales exclusivamente para la primera vuelta presidencial. Incluso reseña un pronunciamiento de la Corte en el que señala: “El voto en blanco es una forma de participar en política y expresar inconformismo frente a las candidaturas de una determinada contienda electoral. Se ejerce al escoger la opción, “voto en blanco”, en las elecciones para alcaldes, gobernadores, miembros de una corporación pública o primera vuelta presidencial”.

A la luz de estas normas, Novoa interpreta que, dado que el voto en blanco recibe el mismo tratamiento y garantías que las demás candidaturas, al no haber conseguido la mayoría en la elección presidencial en primera vuelta, “no puede aparecer en el tarjetón de segunda vuelta”, explica el magistrado, quien sugiere que los ciudadanos que estén inconformes con las opciones políticas a elegir, depositen las tarjetas electorales sin marcarlas.

La posición de Novoa de seguro será polémica pues el mismo domingo, tras la publicación de los resultados de la elección, seguidores del exgobernador Sergio Fajardo convocaron a votar en blanco el próximo 17 de junio. Ahora, la posibilidad de que excluya la casilla del voto en blanco está en manos de las autoridades electorales, que tendrán que definirlo lo antes posible, pues muy pronto se iniciará la impresión de los tarjetones para la elección presidencial.

Basándose en artículos de la Constitución Nacional y en la reforma política de 2011, el magistrado del Consejo Nacional Electoral, Armando Novoa, pidió a las máximas autoridades electorales, como lo son el Registrador Nacional, Juan Carlos Galindo, y Yolima Carrillo, presidenta del CNE, no incluir la casilla de voto en blanco en la elección presidencial de segunda vuelta, que se realizará el próximo 17 de junio.

(Lea más sobre el voto en blanco aquí)

Novoa sostiene que le solicitó a la sala plena, en su reunión del pasado lunes, que examinara dicha solicitud, pues, a juicio del abogado, el ordenamiento jurídico vigente define que el voto en blanco tiene alcances políticos sólo en la primera vuelta presidencial. “Debido a la proximidad de la elección, y ante la dificultad de que el tema se examine en la corporación, en la condición de miembros del CNE me permito solicitar que se excluya de la tarjeta electoral la casilla del voto en blanco”, dice Novoa en su carta.

Acto seguido cita los artículos 258 y 190 de la Constitución Política, y el 38 de la llamada reforma política de 2011 en los que, palabras más palabreas menos, se define el alcance del voto en blanco como un mecanismo de protesta ciudadana que tiene efectos electorales exclusivamente para la primera vuelta presidencial. Incluso reseña un pronunciamiento de la Corte en el que señala: “El voto en blanco es una forma de participar en política y expresar inconformismo frente a las candidaturas de una determinada contienda electoral. Se ejerce al escoger la opción, “voto en blanco”, en las elecciones para alcaldes, gobernadores, miembros de una corporación pública o primera vuelta presidencial”.

A la luz de estas normas, Novoa interpreta que, dado que el voto en blanco recibe el mismo tratamiento y garantías que las demás candidaturas, al no haber conseguido la mayoría en la elección presidencial en primera vuelta, “no puede aparecer en el tarjetón de segunda vuelta”, explica el magistrado, quien sugiere que los ciudadanos que estén inconformes con las opciones políticas a elegir, depositen las tarjetas electorales sin marcarlas.

La posición de Novoa de seguro será polémica pues el mismo domingo, tras la publicación de los resultados de la elección, seguidores del exgobernador Sergio Fajardo convocaron a votar en blanco el próximo 17 de junio. Ahora, la posibilidad de que excluya la casilla del voto en blanco está en manos de las autoridades electorales, que tendrán que definirlo lo antes posible, pues muy pronto se iniciará la impresión de los tarjetones para la elección presidencial.