Van siete intentos: oposición y Petro miden fuerzas en otro pulso por sacar a ministros
El Senado y la Cámara le pedirán cuentas a los ministros Iván Velásquez (Defensa) y Guillermo Jaramillo (Salud). Al primero por los problemas de seguridad y al segundo por una posible crisis en el sector. Ambos llegan confiados por los antecedentes de las mociones de censura, pero la oposición espera ponerlos contra las cuerdas.
Al nutrido grupo de ministros y funcionarios del gobierno Petro que se mueve por los pasillos y salones del Congreso, siempre al tanto del trámite de las reformas, se sumó en los últimos días el jefe de la cartera de Defensa, Iván Velásquez. En varias oportunidades se le ha visto cruzar saludos con algunos congresistas e incluso recibir a otros en las oficinas que tiene la Policía en el Capitolio. En un plan similar está su par en Salud, el ministro Guillermo Jaramillo, quien ya es visitante habitual por el trámite de la reforma que lidera su cartera.
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Al nutrido grupo de ministros y funcionarios del gobierno Petro que se mueve por los pasillos y salones del Congreso, siempre al tanto del trámite de las reformas, se sumó en los últimos días el jefe de la cartera de Defensa, Iván Velásquez. En varias oportunidades se le ha visto cruzar saludos con algunos congresistas e incluso recibir a otros en las oficinas que tiene la Policía en el Capitolio. En un plan similar está su par en Salud, el ministro Guillermo Jaramillo, quien ya es visitante habitual por el trámite de la reforma que lidera su cartera.
A diferencia de sus compañeros —como el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, o la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez— él no está al tanto de los votos, las ponencias y los artículos de cada proyecto. Su presencia tiene que ver, especialmente, con el debate de moción de censura al que fue citado por 14 senadores para este martes después de las 2:00 de la tarde.
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Varias fuentes coinciden en que Velásquez no está pidiendo votos, pero aseguran que lo han escuchado a él y a algunos de sus asesores preguntando por el ánimo de los congresistas antes de la sesión, pues está claro que varios llegarán con duros cuestionamientos, como el del aparente deterioro de la seguridad y el fortalecimiento de los grupos ilegales, que de acuerdo con los citantes se refleja en datos como el del incremento de los secuestros, que pasaron de 223 a 331 casos en el último año.
El ministro Jaramillo, por su parte, deberá enfrentar la moción de censura sobre las 10:00 de la mañana, en la Cámara de Representantes. En este caso, el llamado tiene que ver con las críticas a su gestión por casos como el de la escasez de medicamentos y lo que la oposición llama “persecución a las aseguradoras” en medio del debate de la reforma a la salud.
Uno de los temas que seguramente será centro de la discusión es el de los presupuestos máximos, ya que algunos congresistas insisten en que desde julio del año pasado se han presentado retrasos en los giros mensuales a las entidades promotoras de salud. “El Gobierno está asfixiando a IPS, gestoras farmacéuticas y EPS por igual”, dicen los citantes. La Procuraduría ya le puso la lupa al tema.
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Ambos ministros llegan con la confianza de un historial negativo para las mociones, pues ni en ésta ni otras administraciones el mecanismo ha tenido éxito. Sin embargo, el ministro de Defensa tendrá un panorama más adverso, en parte por la puja que le han planteado la oposición y los independientes al Gobierno en la plenaria del Senado, donde por esa razón están en vilo la reforma pensional y la de la salud.
Velásquez sabe lo que es enfrentarse a ese escenario, ya que en mayo de 2023 tuvo un debate igual en la Cámara, del que salió victorioso con apenas 17 votos a favor de la moción. Aún así, los citantes tienen preparado un arsenal de cifras y pruebas para intentar ponerlo contra las cuerdas. “Son muchos los temas que vamos a tocar. Por ejemplo, tenemos a unas disidencias de las Farc inaugurando obras, patrullando por las calles frente a la Policía, prestando servicios médicos y entregando kits escolares a los niños. Vamos a pedirle al ministro que nos rinda cuentas y abandone su cargo”, le dijo a este diario el senador “Jota Pe” Hernández, de la Alianza Verde.
Según David Luna, senador de Cambio Radical, uno de los propósitos de este debate es pedirle al Gobierno “desamarrar las manos y pies de la fuerza pública” y preguntarle al ministro si “tienen acuerdos por debajo de la mesa con los grupos armados para que se siga desarrollando el negocio del narcotráfico”.
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Otros congresistas se centrarán en las masacres (331 en 2023 con un total de 100 víctimas), el incremento de los secuestros (331 casos el año pasado) y la caída en la erradicación de cultivos de coca (que bajó de 68.000 hectáreas en 2022 a 20.000 en 2023). Incluso algunos preguntarán por la polémica de algunos helicópteros de origen ruso que permanecen en tierra por falta de repuestos.
La cuenta de los votos, al menos sobre la mesa, sigue favoreciendo al Gobierno, que en la plenaria, además del Pacto Histórico y los verdes, sumará el respaldo clave de los liberales y algunos senadores de La U. “Siento una profunda decepción, no veo a los senadores, en su gran mayoría, dispuestos a votar positivamente, pero mi tarea es hacer el control político”, reconoció el senador Hernández. Luna, por su parte, dijo que no es fácil verificar los votos, pero que “puede haber una sorpresa” porque en las regiones los ciudadanos le piden a sus congresistas medidas urgentes contra la inseguridad.
En el caso del ministro Jaramillo el panorama no cambia mucho, pues tanto en el trámite de las reformas como en otras mociones de censura el Gobierno ha demostrado control en esa plenaria. Por ejemplo, en diciembre de 2022 la entonces ministra de Energía, Irene Vélez, salió avante de su primera moción con 24 votos a favor y 132 en contra y en abril de 2023 el suspendido canciller Álvaro Leyva se salvó con 13 votos a favor y 108 en contra.
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La moción contra el ministro de Salud llega con el respaldo de cerca de 30 representantes, en su mayoría de Cambio Radical y el Centro Democrático, un número que se queda corto frente al bloque que conforman el Pacto, los liberales, las curules de paz y varios conservadores y de La U. En este punto es de resaltar que Jaramillo se mueve con mayor facilidad en el Congreso y específicamente en la Cámara, donde aprobó en sus primeros dos debates la reforma de su resorte.
Luego de los debates de este martes, los dos deberán enfrentarse a las votaciones en 10 días. Si bien las mociones de censura, según los mismos congresistas, parecen estar desgastadas, lo cierto es que la oposición las ha manejado como una herramienta de control político que impacta en el trámite de las reformas, ya sea por la contundencia de las críticas o porque se atraviesan en el camino de los debates. Con las de este martes van siete y contando para el gabinete de Petro, un número considerable si se tiene en cuenta que durante los cuatro años del gobierno de Iván Duque se llegó a un total de diez.
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