“No caigamos en falsas divisiones entre izquierda y derecha”: Iván Duque
El presidente dio su discurso en la Cumbre de las Américas, en el que se refirió sobre el proceso electoral que vive el país y en el que prometió que habrá una transición democrática.
El esperado discurso del presidente Iván Duque en la Cumbre de las Américas estuvo marcado por la defensa de la democracia, las pullas contra Nicolás Maduro, el énfasis en la política migratoria y la apuesta en defensa del ambiente del Gobierno, así como una alusión corta al proceso electoral que vive el país.
Basándose en la Carta Interamericana y a la cláusula de Quebec, afirmó que estas promueven la no exclusión ideológica y la protección del orden democrático, por tanto, pidió no dividir y polarizar entre bandos.
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“No caigamos en las falsas divisiones. Nuestra región no se divide entre izquierda y derecha, ni entre progresistas y conservadores. Aquí hay una clara diferenciación entre quienes somos demócratas y quienes son autócratas. Aquí hay una clara diferencia entre quienes creemos que en democracia se ventilar las diferencias al sentir de las mayorías en las elecciones y no la imposición violenta y arbitraria de un querer de la población”, dijo Duque como preámbulo para irse en contra de Nicolás Maduro.
Para el primer mandatario, presidentes como Maduro son elegidos en democracia, pero estos “después, sutilmente, la convierten en dictrocracia hasta que la convierten en una dictadura (…) Los autócratas se han validado de las reelecciones indefinidamente en el continente y tienen que ser señalados y denunciados, porque el genocidio que se vive en Ucrania es producto de una autocracia”. Para ilustrar este tema, repitió la teoría de las 3P: populismo, polarización y posverdad.
En ese sentido, les pidió a sus homólogos no guardar silencio frente a lo que pasa en Venezuela, Nicaragua y Cuba. “Ser indiferente a esos fenómenos es ser indiferente al dolor de esos pueblos”.
Dicho esto, aprovechó a resaltar su gestión sobre los efectos del régimen en Venezuela, resaltando la recepción de 1.8 millones de migrantes de ese país y el estatuto temporal migratorio contemplado a 10 años y en el que se les reconoce todos los derechos, a excepción de los derechos políticos.
Más: Cumbre de las Américas: ¿qué se sabe de la declaración migratoria que se firmará?
“Se puede tener una política migratoria sólida incluyente sin caer en la xenofobia. Hoy queremos invitar el hemisferio a que esa política migratoria sea más uniforme y nunca dejar de denunciar esos fenómenos”, agregó.
Por otro lado, el presidente Duque habló del trabajo en materia ambiental y llamó a los países de la Organización de Estados Americanos a adoptar medidas para mitigar los efectos contra el Planeta. “No tenemos un planeta B y no podemos esperar que los mayores acusantes de la crisis respondan con toda su fuerza”, agregó.
El mandatario explicó que, aunque Colombia no aporta ni el 1% a las emisiones, sería uno de los países más afectados por sus efectos. “Es urgente herramientas multilaterales que respondan a estas necesidades”. Propuso la capitalización del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), sistemas de financiamiento a largo plazo y buenas tasas.
Por último, el mandatario prometió que el país tendrá una transición democrática en el marco de estas nuevas elecciones y que la democracia debe continuar siendo el lenguaje común de los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA). “Hoy más que nunca tenemos que mantener claros y firmes en nuestros principios, no mutarlos por ocasión de transición. Hemos defendido la carta interamericana, la cláusula de Quebec, debatamos nuestras diferencias en democracia, pero nunca estas cumbres serán territorio fértil para los dictadores”, concluyó.
El esperado discurso del presidente Iván Duque en la Cumbre de las Américas estuvo marcado por la defensa de la democracia, las pullas contra Nicolás Maduro, el énfasis en la política migratoria y la apuesta en defensa del ambiente del Gobierno, así como una alusión corta al proceso electoral que vive el país.
Basándose en la Carta Interamericana y a la cláusula de Quebec, afirmó que estas promueven la no exclusión ideológica y la protección del orden democrático, por tanto, pidió no dividir y polarizar entre bandos.
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“No caigamos en las falsas divisiones. Nuestra región no se divide entre izquierda y derecha, ni entre progresistas y conservadores. Aquí hay una clara diferenciación entre quienes somos demócratas y quienes son autócratas. Aquí hay una clara diferencia entre quienes creemos que en democracia se ventilar las diferencias al sentir de las mayorías en las elecciones y no la imposición violenta y arbitraria de un querer de la población”, dijo Duque como preámbulo para irse en contra de Nicolás Maduro.
Para el primer mandatario, presidentes como Maduro son elegidos en democracia, pero estos “después, sutilmente, la convierten en dictrocracia hasta que la convierten en una dictadura (…) Los autócratas se han validado de las reelecciones indefinidamente en el continente y tienen que ser señalados y denunciados, porque el genocidio que se vive en Ucrania es producto de una autocracia”. Para ilustrar este tema, repitió la teoría de las 3P: populismo, polarización y posverdad.
En ese sentido, les pidió a sus homólogos no guardar silencio frente a lo que pasa en Venezuela, Nicaragua y Cuba. “Ser indiferente a esos fenómenos es ser indiferente al dolor de esos pueblos”.
Dicho esto, aprovechó a resaltar su gestión sobre los efectos del régimen en Venezuela, resaltando la recepción de 1.8 millones de migrantes de ese país y el estatuto temporal migratorio contemplado a 10 años y en el que se les reconoce todos los derechos, a excepción de los derechos políticos.
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“Se puede tener una política migratoria sólida incluyente sin caer en la xenofobia. Hoy queremos invitar el hemisferio a que esa política migratoria sea más uniforme y nunca dejar de denunciar esos fenómenos”, agregó.
Por otro lado, el presidente Duque habló del trabajo en materia ambiental y llamó a los países de la Organización de Estados Americanos a adoptar medidas para mitigar los efectos contra el Planeta. “No tenemos un planeta B y no podemos esperar que los mayores acusantes de la crisis respondan con toda su fuerza”, agregó.
El mandatario explicó que, aunque Colombia no aporta ni el 1% a las emisiones, sería uno de los países más afectados por sus efectos. “Es urgente herramientas multilaterales que respondan a estas necesidades”. Propuso la capitalización del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), sistemas de financiamiento a largo plazo y buenas tasas.
Por último, el mandatario prometió que el país tendrá una transición democrática en el marco de estas nuevas elecciones y que la democracia debe continuar siendo el lenguaje común de los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA). “Hoy más que nunca tenemos que mantener claros y firmes en nuestros principios, no mutarlos por ocasión de transición. Hemos defendido la carta interamericana, la cláusula de Quebec, debatamos nuestras diferencias en democracia, pero nunca estas cumbres serán territorio fértil para los dictadores”, concluyó.