A los tres viceministros de Defensa les fue solicitada la renuncia protocolaria directamente por el presidente Gustavo Petro. Así se lo confirmaron a este diario desde esa cartera.
Quienes recibieron el pedido de renuncia fueron Alberto Lara, viceministro para las Políticas de Defensa y Seguridad; el mayor general (r) Ricardo Díaz, viceministro para Estrategia y Planeación; y Elsa Piedad Morales, viceministra de Veteranos y del Grupo Social Empresarial del sector Defensa. Los dos primeros se habían posesionado en septiembre de 2022 y la segunda lo había hecho en octubre de ese mismo año.
Lea: Remezón en el gabinete Petro: estos son los ministros que se van del Gobierno
Por el momento, no se conocen las razones detrás de la decisión del presidente Petro. Hace menos de dos semanas, el mandatario confirmó a Iván Velásquez como ministro de Defensa, quien ha estado allí desde el inicio del Gobierno.
Este martes, tanto el presidente como el MinDefensa asistieron a la ceremonia de posesión del general William Salamanca como director general de la Policía Nacional. El alto oficial recibió el mando del general Henry Sanabria.
Precisamente en esa ceremonia el presidente intervino y, sin referirse concretamente a las renuncias que pidió, habló de la más reciente instrucción que le dio a su gabinete: “les pedí el máximo de la audacia. Esa palabra quiero que la introduzcamos en nuestro lenguaje. Quienes participan del Estado - y yo obviamente participio del Estado -, quienes están allí en la lógica del funcionario público (...) adquirimos una rutina de los días, un permanente repetir, que nos va quitando las posibilidades de la innovación, del cambio, las posibilidades de afrontar un mundo y una realidad que precisamente se está moviendo es en medio de las crisis”.
E insistió: “Le pedí al gabinete que el sinónimo de su acción sea, de ahora en adelante, la audacia para cumplir los objetivos. Por ejemplo, el dejar que los presupuestos se manejen por las mismas personas, todos los años, independientemente de los cambios del gobierno y de sus políticas hace que cada vez bajen más los niveles de ejecución”.
Sobre ese tema del presupuesto enfatizó en que con una crisis económica como la que se anuncia desde Estados Unidos, Europa o China, “lo peor que puede hacer un gobierno es dejarse llevar por la rutina y no gastar el dinero en los objetivos que se propuso”. Y concluyó: “la sociedad colombiana demanda de este gobierno audacia; y eso tiene sus expresiones dependiendo de los sectores de la sociedad, pero en la fuerza publica también tiene que tenerlo.”