Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El precandidato presidencial y senador David Barguil, del Partido Conservador, publicó en su Twitter una desatinada campaña con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres. Según dijo, su intención era llamar la atención sobre la problemática social que afecta al género femenino, sin embargo, se equivocó en el uso de imágenes pues no solo son victimizantes, sino que además no pidió consentimiento para su uso a las políticas que aparecen en ellas. Su error se conoce en el día en que miles de colombianas salen a marchar por las 225 mujeres que fueron víctima de la violencia feminicida y que ya no están, y las muchas otras que continúan desaparecidas.
(Lea: Mujeres y no violencias: ¿Por qué un día internacional?)
Este diario decidió no reproducir las imágenes en cuestión para no incurrir en el mismo error del senador, pero con la ayuda de algunas políticas se puede explicar por qué es una campaña completamente equivocada.
Primero que todo, vale la pena hacer una breve descripción de la campaña: el congresista utilizó las imágenes de seis mujeres que tienen cargos públicos o que ejercen un trabajo con el que ostentan poder en el Estado. Las fotos corresponden a las congresistas del Centro Democrático María Fernanda Cabal y Paloma Valencia. También incluyó a Claudia López, alcaldesa de Bogotá, Elsa Noguera, gobernadora del Atlántico, María Paula Correa, jefa del gabinete presidencial, y finalmente a la vicepresidenta y canciller, Marta Lucía Ramírez.
(Lea también: “Quieren mantener una visión ideologizada en la Fuerza Pública”: Juanita Goebertus)
En sus fotografías, hizo un montaje para que las caras de las implicadas aparecieran con moretones y heridas, propias de la violencia que día a día se ejercen los hombres contra las mujeres. Los morados los situó, en su mayoría, en los ojos y en las comisuras de la bocas.
Dicha estética la acompañó con el siguiente mensaje: “Cuando entendamos que al maltratar a una, maltratan a todas, entenderemos la gravedad del problema y sólo en ese momento, la situación empezará a cambiar. Cada mujer golpeada puede ser tu hija, tu mamá, tu hermana”. Asimismo, incluyó los hashtags #PorUnPaísMásJusto, y la frase “si golpean a una, golpean a todas”.
(Conozca: María Fernanda Cabal pide que revelen resultados de encuestas en las que perdió)
La situación molestó tanto que la canciller, que hace parte del conservatismo, pidió pública y explícitamente al precandidato que no utilizara su imagen pues este ni siquiera pidió permiso para usarla. “Entiendo y comparto el sentido del mensaje en contra de la violencia hacia las mujeres, pero rechazo el uso de mi imagen sin autorización por parte de un candidato. Solicito retirar inmediatamente mi imagen de esta campaña”, señaló Marta Lucía Ramírez.
Más que molestar, las imágenes que utilizó Barguil son erradas porque victimizan a las mujeres al hacerlas aparecer en redes sociales con moretones y exponerlas desde esa visión a cientos de usuarios. En Colombia, un poco más de tres millones de personas utilizan Twitter, la red en la que difundió el contenido. Las políticas que se pronunciaron al respecto, concuerdan en que la equivocación es propia de alguien que no ha trabajado el tema de las violencias, en las que cabe, por supuesto, la violencia política.
(Más: Mujeres víctimas de violencia de género tendrán prioridad para acceder a vivienda)
Dora Saldarriaga, concejala feminista por Estamos Listas, manifestó sus reflexiones sobre dicha campaña. “Me parece inconcebible que un partido que tradicionalmente ha sido antiderechos, que no tiene una apuesta clara por la erradicación de las violencias contra las mujeres, hoy haga un show mediático comercial para evidenciar algo que no tienen en su agenda”, indicó la política paisa.
Agregó que fue problemático el uso de las imágenes: “Es una instrumentalización de las fotografías de las mujeres políticas y es un irrespeto y una violación al derecho constitucional pues toma sin autorización estas imágenes. Eso hace parte de la violencia simbólica contra las mujeres que se supone es lo que él quiere combatir. Finalmente, me parece inconcebible que los medios de comunicación centren la discusión en un hombre sabiendo que hoy hay tanta agenda sobre este tema”, explicó.
(Le puede interesar: Opinión: ¡Pongamos fin a la violencia contra las mujeres YA!)
También se expresó Ángela María Robledo, representante a la Cámara por la oposición. “Lo que hizo hoy Barguil, con el ánimo de sumarse a la conmemoración sobre la erradicación de la violencia contra las mujeres, es la mejor muestra de lo que pasa cuando un hombre que nunca ha trabajado el tema tiene malos asesores y se mete donde no debe”. Robledo habló también en clave electoral pues esta campaña se da en el marco de la precandidatura del conservador: “Es una afrenta, no solo a quienes aparecen en sus fotos, sino también a las mujeres colombianas. Así no es, David Barguil, así no se consiguen los votos de mujeres conscientes de lo que son las distintas formas de violencias contra ellas”.
Por su lado, Juanita Goebertus, representante de la Alianza Verde, lamentó que el senador replicara este tipo de contenidos y todos los errores que componen sus trinos. “Lamento mucho la decisión del senador Barguil de poner en marcha una campaña que no solo es el plagio de una campaña italiana, sino que usa de manera inconsulta la imagen de mujeres políticas colombianas, mostrándolas golpeadas. Es un acto que revictimiza, que no entiende la gravedad de lo que hay detrás de la violencia contra las mujeres. Creo que haría mucho más preguntándose por el tipo de acciones que los hombres deberían tomar y la transformación que debería estar detrás de la masculinidad, en vez de hacer uso de imágenes de mujeres políticas que tienen suficiente con el tipo de violencia verbal que sufren diariamente”, dijo.
Tras las críticas que ha recibido, Barguil explicó más a profundidad su punto de vista. Esta es la respuesta textual que dio a medios: “En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer quisimos sumarnos a la causa evidenciado que la sociedad debe entender que cuando se golpea a una mujer se está golpeando a todas. En ese sentido elegimos mujeres prominentes para mostrar las huellas de golpes que posiblemente no recibirían ellas, pero que seguramente están recibiendo otras mujeres menos visibles, en lugares más apartados, con menos incidencia, rodeadas de invisibilidad y silencio. La estética y el mensaje busca llamar la atención sobre esa problemática que nos afecta a todos. Cuando golpean a una están generando una dinámica que las pone en riesgo a todas, no importa si es nuestra madre, nuestra hija, nuestra esposa, nuestra amiga, nuestra alcaldesa, nuestra vicepresidenta, nuestra gobernadora o nuestra senadora”.