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A pocos días del cierre de listas al Senado y la Cámara de Representantes, los diferentes partidos y coaliciones se siguen moviendo para conformar las mejores candidaturas y hacerse con las mayorías en el Congreso. Sin embargo, también en la vía contraria, varios candidatos han decidido bajarse a última hora de sus aspiraciones. Así ocurrió con Juana Afanador, quien este jueves anunció la renuncia a su candidatura a la Cámara de Representantes por el Polo Democrático, uno de los partidos que conforman el Pacto Histórico (PH) que agrupa a varias candidaturas y movimientos de centro-izquierda.
Las razones de Afanador para declinar su aspiración electoral fueron varias desavenencias con algunas prácticas al interior del PH. Eso sí, la socióloga y feminista aseguró que no renuncia “a un proyecto colectivo que puede materializar los anhelos de las mayorías desposeídas en Colombia”. La dimisión de su candidatura la dio a conocer en una carta en la que resaltó que, si bien el PH es un proyecto colectivo que calificó como “el más relevante en la historia reciente de Colombia”, no veía las garantías para competir por una curul.
Y es que, para Afanador, a pesar de que al interior del Pacto Histórico se tejieron alianzas con el fin de “derrotar la injusticia, la guerra, la desigualdad, la impunidad, el patriarcado, el racismo estructural y otros flagelos que han lacerado a nuestra Colombia”, algo por lo que manifestó su orgullo, también ha habido prácticas que llevaron a que sus expectativas fueran “languideciendo progresivamente”.
“Mis convicciones también me han llevado a ser enfática en el rechazo de algunas prácticas al interior del Pacto Histórico. He sido crítica de las alianzas con líderes contrarios a los derechos de las mujeres y la comunidad LGTBIQ+ y he rechazado abiertamente el ingreso de sectores ligados a la política tradicional uribista al Pacto”, dijo Afanador.
La ya excandidata a la Cámara también reiteró que sus desacuerdos radican en el mecanismo de listas cerradas en las elecciones al Congreso. “Sigo considerando que las listas abiertas son el mejor mecanismo para garantizar procedimientos democráticos y para mantener armonía en el seno de nuestra coalición”, agregó Afanador, quien hace unos días demostró parte de su molestia, cuando mencionó a este diario que su partido, el Polo Democrático, “necesita oxigenación”.
En ese momento, Afanador consideró un despropósito que no exista paridad de género en las cabezas del partido y criticó temas como la falta de protocolo respecto a la violencia de género y que no se reconozca el Polo Mujeres como instancia, así como el Polo Joven. “En realidad hay una lucha interna muy grande por la representación de nosotras”, dijo en su momento.
Y aunque Afanador no oculta las altas expectativas con las que se inscribió como precandidata a la Cámara de Representantes por Bogotá, con el objetivo de poner al servicio del Pacto Histórico “sus conocimientos, trayectoria y habilidades” que ha recopilado como investigadora y en su compromiso con varias luchas sociales, dijo que temas como las listas cerradas hicieron que esos ánimos decayeran progresivamente.
“Se convirtió en privilegio de fidelidades, promoción de delfinazgos y estímulo a mecanismos propios de la vieja política que, se supone, debemos superar. A unos días del plazo para tener listas definitivas, crecen las dudas, los debates, la incertidumbre y la poca claridad frente a los criterios de definición del orden de la lista”, dijo la socióloga sobre las listas cerradas que tendrá el PH.