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Desde ayer viernes, un tuit del senador del Centro Democrático, Álvaro Uribe Vélez, ha sido el objeto de una fuerte discusión a la que se han sumado partidarios del expresidente, periodistas y otras figuras públicas. En su mensaje, Uribe llamó a Daniel Samper Ospina, columnista de la revista Semana, "violador de niños". (Lea: Flip sale en defensa de Daniel Samper Ospina)
Un mensaje de ese calibre no podía ser ignorado. El propio Samper anunció, también desde sus redes sociales, que acudiría a los mecanismos legales "para confrontar su capacidad de odio y de difamación". Samper refutó que Uribe lo había acusado de un "delito atroz y asqueroso como ninguno", y le envió además un mensaje claro: "No le tengo miedo".
Pero, ¿con base en qué hace el senador y expresidente de la República tremenda acusación? Para determinarlo, este diario revisó la línea de tiempo de Twitter de Uribe Vélez, pues finalmente ese fue el escenario que él escogió para expresarse contra Daniel Samper Ospina. Desde ayer que trinó por primera vez con respecto a este tema, a las 12:55 p.m., se ha referido al mismo varias veces. Y lo primero que hizo fue empezar a suavizar su posición: Samper ya no era un "violador de niños", sino de "los derechos de los niños".
La pelea de Uribe, él mismo ha dejado saber, nace también de un asunto regionalista. A Uribe le molestó terriblemente la columna "Decreto para condecorar a Maluma", publicada por Samper Ospina en abril de este año, en la cual se burlaba de hechos como que el gobernador de Antioquia, Luis Pérez, le hubiera dado la máxima distinción civil al cantante reggaetonero arguyendo que sus canciones son "poesía urbana".
Después, Uribe trajo a colación que, en 2011, el entonces procurador Alejandro Ordóñez -quien más de una vez peleó con Daniel Samper Ospina cuando él dirigía la revista Soho- le pidió a la Fiscalía y al ICBF que investigara si acaso Soho había incurrido en pornografía por publicar las fotos de unos niños desnudos. Pero la publicación tenía también un contexto: era un reportaje gráfico con el que se trataba de poner sobre la mesa el asunto de la pedofilia en la iglesia Católica.
En ese momento, Samper Ospina respondió el porqué de la publicación: "El arte también es denunciar. Estas fotos no incitan al deseo sexual por unos menores, sino al asco, al repudio de ver a un sacerdote que siente atracción por ellos. Las fotos denuncian una realidad. Los esfuerzos deberían consistir en modificar esa realidad y no al medio que la muestra". Al final, judicialmente hablando, con la solicitud de la Procuraduría no pasó más.
Luego, Uribe mostró la imagen de un correo electrónico que, se supone, envió Daniel Samper Ospina a un reconocido periodista colombiano, a quien llama "mentor" y le comenta sobre ciertas fotos que van a salir en la revista. Uribe no ha aclarado cómo terminó en su poder una comunicación privada y ajena, y ni siquiera se sabe si es un correo legítimo. Ese correo se conoció luego de que se denunciara que las cuentas de Samper Ospina habían sido hackeadas, caso por el cual fue detenido Johan Armando Cubillos Gutiérrez (ver: Capturan hacker que infiltró cuentas de Daniel Samper Ospina y Soho). Aun así, el senador Uribe lo anexa a su artillería: "El señor Samper O, desde la dirección de una revista irrespetó con sus comentarios a las mujeres que retrataba".
La pelea no se limitó a Samper Ospina: el presidente Santos también entró en la colada. El expresidente Uribe, retomando su indignación ante las sátiras de Samper Ospina sobre asuntos antioqueños, recordándole a Santos que él es su principal opositor y probablemente buscando hablarle a su base electoral más grande, Uribe escribió:
La línea de tiempo de Twitter del expresidente Uribe sigue creciendo en razones para atacar al columnista Daniel Samper. Como se puede ver, ninguno hasta ahora sostiene que pudiera llamarlo "violador de niños". El siguiente argumento fue Uribe rechazó que Samper se hubiera burlado del nombre que la senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia, escogió para su hija: Amapola.
Por último, el senador Uribe empezó a retuitear a otros usuarios de Twitter, quienes cuestionan la edad de ciertas modelos que han aparecido en Soho. Hace un par de horas, Uribe dejó el último mensaje al respecto, dando a entender que el asunto definitivamente no es que Samper Ospina sea un "violador de niños", como inicialmente aseguró, sino que él habría hecho pornogragía infantil. "Acaso se puede decir que la pornografía infantil es diferente y menos grave que la violación del niño!", dice Uribe, resolviendo así, más de 24 después de su primer trino, de qué es acusa a Samper Ospina.
El apoyo al columnista de Semana ha sido masivo. En Twitter, especialmente, han llovido los mensajes de apoyo a su trabajo. "Que expresidente y senador mienta sobre un periodista que lo critica, degrada el debate y aumenta el riesgo a la integridad del periodista", dijo la decana de derecho de la Universidad de Los Andes, Catalina Botero. "Mi solidaridad total con Daniel Samper Ospina", expresó el constitucionalista Rodrigo Uprimny. "Recuperar la justicia: Expresidente Uribe demuestra que Daniel Samper Ospina es violador de niños, o es condenado por injuria y calumnia", escribió Rodolfo Arango.
En el gremio de los periodistas, el ataque de Uribe a Samper Ospina tampoco pasó por alto. La Flip dijo que ese mensaje era para amedrentar a otros periodistas; y otros periodistas se pronunciaron: "Tengo profundas diferencias con @DanielSamperO pero hoy estoy de su lado y lo apoyo", dijo Hassan Nassar, director de La FM. "Cómo puede decir eso? Tiene pruebas de que @DanielSamperO viola niños? No más ataques con odios! Por favor debates con argumentos y altura!", reclamó Claudia Gurisatti, directora de Noticias RCN y NTN 24.
Por ahora, lo que se sabe es que el senador Uribe no ha mostrado las pruebas que tendría para afirmar que Daniel Samper es un "violador de niños", y que el columnista de Semana planea poner una denuncia penal en su contra. Si efectivamente Uribe no tiene cómo sostener en estrados judiciales sus palabras, es previsible que un juez le ordenará retractarse. No sería la primera vez: apenas hace dos meses, en mayo de este año, tuvo que hacerlo ante las madres de Soacha, quienes jurídicamente reclamaron que Uribe se hubiera referido a sus hijos, asesinados a sangre fría por el Ejército en 2008, en estas palabras que pasaron a la historia de la infamia: "No fueron a coger café, iban con propósitos delincuenciales".
Nota del editor: este artículo se actualizó para precisar que el correo que utiliza el expresidente Uribe para justificar su acusación fue obtenido por medios ilícitos.