Rediseño del E-14: ¿será suficiente para generar confianza en las regionales de 2023?
A poco más de un año de las elecciones legislativas de 2022, en las que el preconteo fue motivo de críticas, el registrador presenta una nueva propuesta del formulario E-14.
El formulario E-14 ha sido uno de los mayores dolores de cabeza para la Registraduría de Alexander Vega, pues fue motivo de críticas por su presunta manipulación en las elecciones legislativas y las consultas presidenciales de 2022. Fue uno de los hechos que terminó de desatar la desconfianza en la organización electoral, pues a pocas horas del cierre de las urnas, el 13 de marzo de 2022, y tras la publicación de los formularios, partidos y candidatos denunciaron posibles irregularidades, debido a que en varias mesas no aparecían los votos, así como tachones y la digitación errónea de algunas cifras.
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El formulario E-14 ha sido uno de los mayores dolores de cabeza para la Registraduría de Alexander Vega, pues fue motivo de críticas por su presunta manipulación en las elecciones legislativas y las consultas presidenciales de 2022. Fue uno de los hechos que terminó de desatar la desconfianza en la organización electoral, pues a pocas horas del cierre de las urnas, el 13 de marzo de 2022, y tras la publicación de los formularios, partidos y candidatos denunciaron posibles irregularidades, debido a que en varias mesas no aparecían los votos, así como tachones y la digitación errónea de algunas cifras.
Los errores despertaron sospechas en la opinión pública y en sectores políticos sobre un posible fraude electoral, por lo que candidatos y movimientos les pidieron a sus votantes revisar el formulario E-14 para verificar si aparecía su voto, tras las posibles inconsistencias entre el preconteo y los escrutinios. Hay que decir que el formulario es de pública consulta en la página web de la Registraduría, en donde se puede revisar cómo fue la votación en cada mesa de votación por cada una de las listas o candidatos.
Las primeras dudas surgieron en el Pacto Histórico, que habían sacado más de 2,5 millones de votos en las legislativas, pero que vieron con suspicacia que, si habían sido una de las fuerzas más votadas del país en Cámara y Senado, en el preconteo no tuvieran votos en casi el 25 % de las mesas del país. Finalmente, la Registraduría sí encontró fallas en 5.109 mesas de votación, al parecer relacionadas con el diseño de los formularios y la capacitación de los jurados de votación, y al movimiento liderado por el actual presidente Gustavo Petro se le sumaron 390 mil votos adicionales y alcanzaron tres nuevas curules en el Congreso.
Posteriormente, para las elecciones presidenciales, en mayo de 2022, se colocó sobre la mesa designar un registrador ad hoc tras lo ocurrido. Por otro lado, se puso en tela de juicio si el Estado estaba preparado para entregar resultados confiables. “Este diseño es extremadamente complejo y muy propenso a que se produzcan errores, contribuyó a que los resultados de estos partidos en un buen número de mesas no fueran transmitidos en la noche del domingo y, por tanto, no se plasmaran en el preconteo”, señaló en ese entonces la MOE sobre el formulario E-14.
El registrador propone un rediseño
A poco más de un año desde las elecciones legislativas, la Registraduría de Alexander Vega presentó una propuesta sobre el nuevo diseño del formulario E-14, que sería aplicado en las elecciones de autoridades locales (alcaldes, gobernadores, corporaciones públicas) del próximo 29 de octubre de 2023. Ante representantes de partidos políticos, observadores locales y autoridades presentó el que sería el nuevo formulario. “Nosotros hemos probado que, con ese diseño de formulario, la persona puede escribir y tendrá una marca de agua, para que diligencie el dato sin rayas”, explicó Vega.
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El nuevo formulario ahora tendría círculos que deberán ser rellenados en caso de que la casilla en la que se diligencia el número de votos deba quedar vacía, para evitar que el jurado de votación marque asteriscos o rayas, con los que según la experiencia del 2022, presuntamente fueron manipulados los resultados. De acuerdo con el registrador, estos modelos tienen el propósito de evitar tachaduras, con la “marca de agua y casillas circulares más grandes como las que se implementan en los exámenes del Instituto Colombiano para la Evaluación de la Educación (Icfes)”.
👀Vea acá el nuevo modelo:
Esta es la segunda modificación que se hará al formulario luego de las legislativas. El 18 de abril de 2022, Vega también había presentado un diseño que incluía casillas más grandes y las fotografías de los candidatos a color. Ese primer cambio fue aplicado en las elecciones presidenciales de 2022, cuando también los jurados de votación marcaron asteriscos en vez de rayas en los espacios en blanco.
¿Qué se necesita para que funcione el formulario?
Según la Misión de Observación Electoral (MOE), el rediseño va de la mano con la confianza que pueda brindar la organización electoral en cuanto al diligenciamiento del formulario, es decir, sea cual sea el diseño, lo más importante es que la registraduría pueda generar confianza en los votantes y en candidatos.
“Va a depender mucho de la confianza que perciba la ciudadanía, para que los jurados no desataquen la instrucción de la Registraduría (...) también el compromiso ciudadano para llenar los formularios de la mejor manera posible y se pueda reducir el riesgo”, señala Danilo Sepúlveda, subcoordinador de justicia electoral de la MOE.
Sepúlveda agrega que también será clave la capacitación sobre cómo llenar el formulario y “la capacitación de los capacitadores” para que no haya confusión. No obstante, la MOE sí asegura que el modelo de los círculos puede funcionar: “es una buena práctica, pues observamos que los asteriscos y las rayas dificultaban la lectura para pasar los resultados. Este mecanismo puede evitar el riesgo que se dio en las elecciones pasadas”, dijo a El Espectador.
Adicionalmente, proponen que sea solo un formulario E-14 el que se llene por los jurados -actualmente son tres: uno se va para la comisión escrutadora, que es el vinculante jurídicamente; otro es el que se entrega a la Registraduría para publicar la página web y el que se consulta en los puestos de votación-. “Para que no haya discrepancia, podría usarse un mecanismo como el papel carboncillo y obtener el número de formularios necesarios”.
De acuerdo con la Registraduría, el próximo lunes, 10 de julio, se realizará una mesa técnica a la que están convocados los partidos políticos para revisar el nuevo modelo del formulario y de las tarjetas electorales que se implementarán en las elecciones del próximo 29 de octubre, en donde se definirá cómo será el rediseño definitivo. “La idea es que el modelo se pueda definir de la mano con las organizaciones políticas y que hagan observaciones a lo que se está proponiendo”, dice Sepúlveda.
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