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A una semana de la elecciones presidenciales en Colombia, el mandatario Juan Manuel Santos y el opositor Óscar Iván Zuluaga cerraron este domingo sus campañas para el reñido balotaje del 15 del junio, que tiene a la paz con la guerrilla como eje principal.
Con actos públicos en distintos puntos del país, últimos permitidos antes de los comicios, ambos postulantes buscaron conquistar votantes ante un escenario de empate técnico según los sondeos.
De las cinco encuestas divulgadas estos días, tres dan ganador a Santos y dos a Zuluaga, un economista de derecha de 55 años apadrinado por el expresidente y senador electo Álvaro Uribe, que en la primera vuelta del 25 de mayo venció al mandatario, también economista, de 62 años y a la cabeza de una coalición de centroderecha.
El candidato uribista pasó al balotaje con 29,3% de los votos, frente al 25,7% obtenido por Santos, en un primer turno con una abstención del 60%.
El debate electoral, marcado por acusaciones mutuas de quienes fueron en el pasado ministros de Uribe, y salpicado de escándalos de espionaje y corrupción, estuvo centrado en los diálogos de paz que el gobierno impulsa desde noviembre de 2012 en La Habana con las Farc.
Santos busca la reelección para sellar el fin de esta guerrilla de cinco décadas, la más antigua de América Latina, con 8.000 combatientes según el Ejército. "Ahora estamos dedicados a contarles a los colombianos por qué con paz haremos más", dijo Santos en una entrevista publicada este domingo en el diario El Tiempo.
Tras recorridas por Bogotá y Boyacá (centro), donde el mandatario destacó la "injusticia" de que "sean los pobres del país los que ponen los muertos, los sacrificados de esta guerra", Santos terminó su periplo proselitista en Rionegro, Antioquia (noroeste), bastión de Uribe, donde lo esperaban centenares de simpatizantes y unos 20 seguidores de Zuluaga al grito de "¡Mentiroso!", constató la AFP.
- El peso del campo -
En Boyacá, epicentro de las protestas del sector agrario el año pasado, ambos candidatos coincidieron en la importancia del medio rural para Colombia. "Mi compromiso con el campo es total", dijo Santos, en tanto Zuluaga enfatizó: "La paz del país depende del campo".
Desde Pasto (suroeste), donde cerró su gira, Zuluaga, inicialmente opuesto a las pláticas en Cuba pero que tras la primera vuelta matizó su postura, reiteró su compromiso en la búsqueda de una paz negociada pero a condición de que las Farc acaben con toda hostilidad.
Antes, en un encuentro con campesinos en Tunja (centro), Zuluaga criticó el reconocimiento de las víctimas del conflicto de medio siglo, anunciado la víspera desde La Habana.
"Este acuerdo no tiene nada nuevo. Si las FARC realmente quieren respetar a las víctimas deben acoger mi propuesta de un cese de toda acción criminal", dijo a la AFP.
Vestido con un poncho de oveja blanco obsequiado por los campesinos, el candidato dijo que la guerrilla debe utilizar el dinero recibido por el tráfico de drogas para reparar a las víctimas.
Hasta ahora, el gobierno y las Farc, que el sábado anunciaron un alto el fuego unilateral por las elecciones, lograron compromisos iniciales sobre el problema agrario -origen del enfrentamiento-, la participación política de la guerrilla, y el tema de las drogas ilícitas.
Resta cerrar los capítulos de la reparación de las víctimas y del abandono de las armas, además de establecer el mecanismo de refrendación de un eventual acuerdo de paz.
Pero este domingo en el diario El Tiempo, Zuluaga negó estar comprometido con los puntos acordados con las Farc y anunció que, de ser electo, los examinará. "Lo que voy a hacer es: gano el 15 de junio, debo entrar a revisar los textos con todo detalle y qué es realmente lo que se ha avanzado".
Aunque las negociaciones de paz han dominado la campaña, las encuestas indican que los colombianos están más preocupados por el desempleo, la delincuencia, la deficitaria atención de salud y la mala calidad de la educación, en un país que crece a un ritmo de más de 4% anual, pero donde un tercio de sus 47 millones de habitantes es pobre.
"Cada escenario es importante, sobre todo en los debates que se van a llevar a cabo la próxima semana. Finalmente son unos cuantos temas los que van a marcar la diferencia porque básicamente Santos y Zuluaga coinciden en el modelo económico y político", dijo a la AFP la politóloga Marcela Prieto, del Instituto de Ciencia Política Hernán Echavarría.