“Si los clientes se van a pique, se llevan por delante al sistema financiero”: David Barguil
El senador cree que los bancos han sido poco solidarios en medio de la pandemia del nuevo coronavirus. “Si todos quedamos en la olla, esa recuperación será muy compleja”, dice.
Germán Gómez Polo - Twitter: @TresEnMil - ggomezp@elespectador.com
Si bien los han anunciado algunas medidas para disminuir el impacto que la crisis del nuevo coronavirus pueda tener en sus clientes, varios sectores en el Congreso consideran que el sistema financiero en general ha sido muy poco solidario con los colombianos en medio de la pandemia.
El senador David Barguil, del Partido Conservador, considera que los bancos se han quedado cortos en sus ayudas y propone algunas alternativas para proteger a los ciudadanos para que no se “vayan a pique”, pues, en últimas, son quienes sostienen el sistema financiero.
Los bancos retiraron la demanda contra el artículo de la sobretasa al impuesto de renta, contenido en la Ley de Crecimiento, ¿cómo leer esa decisión en medio de la pandemia?
Esa es una buena noticia, porque este artículo, que lideramos nosotros, no en esta Ley de Financiamiento sino en la de hace dos años, para que se cobrara una sobretasa de cuatro puntos en 2020 y de tres en 2021 y 2022. Es algo transitorio, que permitirá un recaudo estimado de $2 billones y este año será de un poco más de $700 mil millones, y ese es un dinero que necesita el país para enfrentar la crisis.
Usted dijo que esa demanda demostraba que los bancos estaban siendo muy poco solidarios con el país en la crisis. Con la decisión de retirarla, ¿cambian su posición frente a esta situación?
El 19 de marzo, cuando el país ya estaba metido en toda esa crisis y Bogotá estaba ad portas de comenzar el aislamiento voluntario, vimos que los bancos, por su lado, lo que hicieron fue irse a la Corte Constitucional a demandar la sobretasa, a querer pagar menos impuestos en medio de la crisis. Se han ganado billones, en 2019 ganaron un poco más de $13 billones, pero pareciera que no entendían lo que vivía el país. Fue una decisión muy miope.
¿Cómo califica el papel que han cumplido los bancos en estos momentos, en alivios para los clientes, créditos e intereses?
No me considero un enemigo de la banca. Cumple un papel fundamental para esta y cualquier economía en el mundo. Capta el ahorro de la gente, de las empresas y del Estado, y luego pone ese ahorro en el mercado para que las personas tengan créditos para comprar vivienda, consuma o monte un negocio. Soy enemigo es de los abusos que se cometen en el sistema financiero, por eso llevamos seis leyes para intentar frenarlos. Hoy, en esta crisis, siento que han ido empujados por la crítica ciudadana, por las denuncias y el Estado.
¿Qué hizo el Gobierno con ese asunto?
Lo que hizo el Gobierno fue prohibir la capitalización de intereses, y así estos se sigan causando, ya no podrán ser capitalizados.
Lea también: David Barguil arremete contra medidas de bancos para aliviar crisis por coronavirus
Muchos bancos han tomado medidas iguales para no afectar tanto a sus clientes, ¿cree que se han quedado cortos? ¿Pueden hacer un poco más?
Me hago unas preguntas: ¿De qué le puede servir a la banca que sus clientes, en unos cuantos meses, estén quebrados y no puedan pagar los créditos? ¿De qué les sirve que los usuarios del sistema no tengan cómo pagar las cuotas de sus tarjetas de crédito o la capacidad financiera para solicitar un nuevo crédito? Entonces, ellos van a sufrir en carne propia esa situación de la economía real que se trasladará al sistema financiero. Eso hay que impedirlo y todos debemos aportar para que eso no suceda, y los primeros interesados en eso deben ser los bancos, porque si los clientes se van a pique, se van a terminar llevando por delante al sistema financiero.
El presidente Duque dijo recientemente que cuando hubo crisis, a finales de los 90 y hasta 2001, fueron los clientes los que salvaron al sector financiero. ¿Los bancos están en deuda con los ciudadanos por ese hecho?
Sin lugar a dudas. Recordemos que, para salvar al sistema financiero en esa crisis, se creó el 2x1.000, que en ese momento se destinó para salvar al sistema. Y reitero: lo peor que nos puede ocurrir es que el sistema financiero se vaya a pique, ahí están los ahorros de los ciudadanos. Lo que necesitamos es tener un sistema sólido, y el país ya demostró esa solidaridad en los 90. ¿Por qué los bancos no devuelven un poco de esa solidaridad que han recibido?
Hay casos puntuales: empresarios que quieren créditos, pero los bancos siguen con las condiciones habituales, incluso, exigiendo presencia física en las sucursales. ¿Qué hacer?
Aquí tiene que haber un esfuerzo compartido entre el sistema financiero y el Gobierno Nacional. El Gobierno ya ha hecho un esfuerzo para emitir unas garantías a través del Fondo Nacional de Garantías, para que el riesgo frente a los nuevos créditos se asuma o se comparta entre el sistema financiero y el Estado, porque si ese riesgo queda solo en el sistema financiero, no se va a llegar a donde queremos.
Mucho se ha hablado de prioridades en esta crisis, una de ellas es la economía, ¿cuál es su posición?
Por supuesto, la prioridad es la salud y la vida de la gente, y todos los esfuerzos debemos apoyarlos, pero también hay que entender que la defensa de la economía del país, de los ciudadanos y de las familias colombianas es una prioridad. Se necesita unidad, empujar hacia el mismo frente en medio de la peor crisis de la economía de nuestra historia reciente, porque salvar esa economía también es salvar la vida de los colombianos.
Si bien los han anunciado algunas medidas para disminuir el impacto que la crisis del nuevo coronavirus pueda tener en sus clientes, varios sectores en el Congreso consideran que el sistema financiero en general ha sido muy poco solidario con los colombianos en medio de la pandemia.
El senador David Barguil, del Partido Conservador, considera que los bancos se han quedado cortos en sus ayudas y propone algunas alternativas para proteger a los ciudadanos para que no se “vayan a pique”, pues, en últimas, son quienes sostienen el sistema financiero.
Los bancos retiraron la demanda contra el artículo de la sobretasa al impuesto de renta, contenido en la Ley de Crecimiento, ¿cómo leer esa decisión en medio de la pandemia?
Esa es una buena noticia, porque este artículo, que lideramos nosotros, no en esta Ley de Financiamiento sino en la de hace dos años, para que se cobrara una sobretasa de cuatro puntos en 2020 y de tres en 2021 y 2022. Es algo transitorio, que permitirá un recaudo estimado de $2 billones y este año será de un poco más de $700 mil millones, y ese es un dinero que necesita el país para enfrentar la crisis.
Usted dijo que esa demanda demostraba que los bancos estaban siendo muy poco solidarios con el país en la crisis. Con la decisión de retirarla, ¿cambian su posición frente a esta situación?
El 19 de marzo, cuando el país ya estaba metido en toda esa crisis y Bogotá estaba ad portas de comenzar el aislamiento voluntario, vimos que los bancos, por su lado, lo que hicieron fue irse a la Corte Constitucional a demandar la sobretasa, a querer pagar menos impuestos en medio de la crisis. Se han ganado billones, en 2019 ganaron un poco más de $13 billones, pero pareciera que no entendían lo que vivía el país. Fue una decisión muy miope.
¿Cómo califica el papel que han cumplido los bancos en estos momentos, en alivios para los clientes, créditos e intereses?
No me considero un enemigo de la banca. Cumple un papel fundamental para esta y cualquier economía en el mundo. Capta el ahorro de la gente, de las empresas y del Estado, y luego pone ese ahorro en el mercado para que las personas tengan créditos para comprar vivienda, consuma o monte un negocio. Soy enemigo es de los abusos que se cometen en el sistema financiero, por eso llevamos seis leyes para intentar frenarlos. Hoy, en esta crisis, siento que han ido empujados por la crítica ciudadana, por las denuncias y el Estado.
¿Qué hizo el Gobierno con ese asunto?
Lo que hizo el Gobierno fue prohibir la capitalización de intereses, y así estos se sigan causando, ya no podrán ser capitalizados.
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Muchos bancos han tomado medidas iguales para no afectar tanto a sus clientes, ¿cree que se han quedado cortos? ¿Pueden hacer un poco más?
Me hago unas preguntas: ¿De qué le puede servir a la banca que sus clientes, en unos cuantos meses, estén quebrados y no puedan pagar los créditos? ¿De qué les sirve que los usuarios del sistema no tengan cómo pagar las cuotas de sus tarjetas de crédito o la capacidad financiera para solicitar un nuevo crédito? Entonces, ellos van a sufrir en carne propia esa situación de la economía real que se trasladará al sistema financiero. Eso hay que impedirlo y todos debemos aportar para que eso no suceda, y los primeros interesados en eso deben ser los bancos, porque si los clientes se van a pique, se van a terminar llevando por delante al sistema financiero.
El presidente Duque dijo recientemente que cuando hubo crisis, a finales de los 90 y hasta 2001, fueron los clientes los que salvaron al sector financiero. ¿Los bancos están en deuda con los ciudadanos por ese hecho?
Sin lugar a dudas. Recordemos que, para salvar al sistema financiero en esa crisis, se creó el 2x1.000, que en ese momento se destinó para salvar al sistema. Y reitero: lo peor que nos puede ocurrir es que el sistema financiero se vaya a pique, ahí están los ahorros de los ciudadanos. Lo que necesitamos es tener un sistema sólido, y el país ya demostró esa solidaridad en los 90. ¿Por qué los bancos no devuelven un poco de esa solidaridad que han recibido?
Hay casos puntuales: empresarios que quieren créditos, pero los bancos siguen con las condiciones habituales, incluso, exigiendo presencia física en las sucursales. ¿Qué hacer?
Aquí tiene que haber un esfuerzo compartido entre el sistema financiero y el Gobierno Nacional. El Gobierno ya ha hecho un esfuerzo para emitir unas garantías a través del Fondo Nacional de Garantías, para que el riesgo frente a los nuevos créditos se asuma o se comparta entre el sistema financiero y el Estado, porque si ese riesgo queda solo en el sistema financiero, no se va a llegar a donde queremos.
Mucho se ha hablado de prioridades en esta crisis, una de ellas es la economía, ¿cuál es su posición?
Por supuesto, la prioridad es la salud y la vida de la gente, y todos los esfuerzos debemos apoyarlos, pero también hay que entender que la defensa de la economía del país, de los ciudadanos y de las familias colombianas es una prioridad. Se necesita unidad, empujar hacia el mismo frente en medio de la peor crisis de la economía de nuestra historia reciente, porque salvar esa economía también es salvar la vida de los colombianos.