Venezuela y Colombia lanzan un nuevo plan contra el contrabando fronterizo
La canciller María Ángela Holguín sostuvo que no se puede "seguir permitiendo" que productos venezolanos se vendan de manera ilegal en el territorio colombiano.
EFE
Los Gobiernos de Venezuela y Colombia comenzaron un encuentro para activar un nuevo plan contra el contrabando a lo largo de la frontera, un problema que afecta a la industria colombiana y contribuye a profundizar el desabastecimiento del lado venezolano.
El encuentro, celebrado en el estado fronterizo venezolano de Zulia, es encabezado por el canciller venezolano, Elías Jaua, y por su par colombiana, María Ángela Holguín, siguiendo un compromiso asumido la semana pasada por los presidentes de ambos países para "triturar" el contrabando fronterizo.
"Es una reunión que tiene la intención de agendar decisiones de aplicación inmediata mientras seguimos trabajando en los temas estructurales que generan un fenómeno como el contrabando en dos países como Colombia y Venezuela", dijo Jaua en una breve declaración televisada al inicio del encuentro binacional.
El canciller confió en que el encuentro permita acordar un "plan operativo" para "comenzar a impactar positivamente en la reducción de este flagelo" y agradeció el apoyo del Gobierno colombiano.
"Sabemos que contamos con todo el interés y la voluntad del Gobierno colombiano (...) para emprender de manera inmediata acciones que tranquilicen a las poblaciones honestas de la frontera y reducir el impacto negativo, que en el caso de Venezuela se traduce en desabastecimiento, especulación e inflación", afirmó.
En sintonía con Jaua, Holguín expresó que el objetivo del encuentro es elaborar un "plan de choque" y aumentar la coordinación entre ambos Gobiernos para luchar contra el contrabando.
"Es algo en que tenemos que demostrar que los dos países podemos luchar contra estas mafias que están desangrando los dos países y que no lo podemos permitir. Venimos con el convencimiento de que logremos coordinar para poder luchar de una manera rápida y contundente", señaló.
La canciller sostuvo que su Gobierno no puede "seguir permitiendo" que productos venezolanos se vendan de manera ilegal en el territorio colombiano, un fenómeno que consideró "absurdo" y que hace que la industria de su país se vea "tremendamente afectada".
Por el lado de Colombia, en el encuentro participan también el ministro de Minas y Energía, Amilkar Acosta, y el viceministro de Defensa, Jorge Enrique Bedoya, mientras que por el lado venezolano asisten el vicepresidente económico, Rafael Ramírez, y los gobernadores de los estados fronterizos de Zulia, Táchira y Apure.
La reunión fue anunciada el pasado 29 de enero por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, tras reunirse con su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, en La Habana, donde ambos participaron en la segunda cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
Según cifras del Gobierno venezolano, entre el 30 % y el 40 % de los alimentos que importa el país son llevados a Colombia por la vía del contrabando.
Venezuela y Colombia comparten una amplia y porosa frontera que suele ser eje de una intensa actividad ilegal, sobre todo de alimentos y combustible, producto del diferencial cambiario.
La semana pasada, el Gobierno venezolano cambió a 43 altos mandos militares del estado Zulia, en el marco de su nueva ofensiva contra el contrabando.
Los Gobiernos de Venezuela y Colombia comenzaron un encuentro para activar un nuevo plan contra el contrabando a lo largo de la frontera, un problema que afecta a la industria colombiana y contribuye a profundizar el desabastecimiento del lado venezolano.
El encuentro, celebrado en el estado fronterizo venezolano de Zulia, es encabezado por el canciller venezolano, Elías Jaua, y por su par colombiana, María Ángela Holguín, siguiendo un compromiso asumido la semana pasada por los presidentes de ambos países para "triturar" el contrabando fronterizo.
"Es una reunión que tiene la intención de agendar decisiones de aplicación inmediata mientras seguimos trabajando en los temas estructurales que generan un fenómeno como el contrabando en dos países como Colombia y Venezuela", dijo Jaua en una breve declaración televisada al inicio del encuentro binacional.
El canciller confió en que el encuentro permita acordar un "plan operativo" para "comenzar a impactar positivamente en la reducción de este flagelo" y agradeció el apoyo del Gobierno colombiano.
"Sabemos que contamos con todo el interés y la voluntad del Gobierno colombiano (...) para emprender de manera inmediata acciones que tranquilicen a las poblaciones honestas de la frontera y reducir el impacto negativo, que en el caso de Venezuela se traduce en desabastecimiento, especulación e inflación", afirmó.
En sintonía con Jaua, Holguín expresó que el objetivo del encuentro es elaborar un "plan de choque" y aumentar la coordinación entre ambos Gobiernos para luchar contra el contrabando.
"Es algo en que tenemos que demostrar que los dos países podemos luchar contra estas mafias que están desangrando los dos países y que no lo podemos permitir. Venimos con el convencimiento de que logremos coordinar para poder luchar de una manera rápida y contundente", señaló.
La canciller sostuvo que su Gobierno no puede "seguir permitiendo" que productos venezolanos se vendan de manera ilegal en el territorio colombiano, un fenómeno que consideró "absurdo" y que hace que la industria de su país se vea "tremendamente afectada".
Por el lado de Colombia, en el encuentro participan también el ministro de Minas y Energía, Amilkar Acosta, y el viceministro de Defensa, Jorge Enrique Bedoya, mientras que por el lado venezolano asisten el vicepresidente económico, Rafael Ramírez, y los gobernadores de los estados fronterizos de Zulia, Táchira y Apure.
La reunión fue anunciada el pasado 29 de enero por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, tras reunirse con su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, en La Habana, donde ambos participaron en la segunda cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
Según cifras del Gobierno venezolano, entre el 30 % y el 40 % de los alimentos que importa el país son llevados a Colombia por la vía del contrabando.
Venezuela y Colombia comparten una amplia y porosa frontera que suele ser eje de una intensa actividad ilegal, sobre todo de alimentos y combustible, producto del diferencial cambiario.
La semana pasada, el Gobierno venezolano cambió a 43 altos mandos militares del estado Zulia, en el marco de su nueva ofensiva contra el contrabando.