Así aprenden de robótica y mecatrónica las niñas del Chocó
A través de un semillero de investigación y becas de formación de la Fundación Nuevo Amanecer ESAL, niñas entre los 12 y 15 años aprenden de ciencia y tecnología. Buscan cerrar brechas con los territorios aislados y abrir nuevas oportunidades para sus futuros profesionales.
Haidy Sánchez Mattsson nació en Quibdó, se formó como psicóloga y en su corazón estaba el deseo de crear una fundación para cambiar la vida de las niñas de su territorio, abriendo nuevos caminos. Esto la llevó en 2022 a crear la Fundación Nuevo Amanecer ESAL, que trabaja por cerrar brechas de formación y educación para generar oportunidades laborales para los habitantes de la región Pacífico de Colombia.
Después de tocar muchas puertas, estar en cientos de reuniones exponiendo su fundación y buscando aliados para sacarla adelante, junto con la Universidad EAN y la Fundación Global, Arte, Ciencia y Tecnología, ha podido lanzar becas y programas de formación gratuitos para niñas del Chocó, principalmente.
Para este año, abrió dos nuevos grupos que se iniciaron hace tan solo unas semanas. El primero es un programa de formación en robótica educativa femenina, con duración de un año, donde siete niñas entre los 13 y 15 años aprenderán de robótica, simulación, creación de robots, empoderamiento y liderazgo femenino.
“Este grupo también tendrá un módulo de introducción a la investigación y participarán en torneos nacionales e internacionales en el primer semestre del 2025, donde se espera que aprendan estrategias para competir”, señaló Sánchez a El Espectador.
Esta no sería la primera vez que la fundación participa con un equipo femenino. En febrero del 2024, un equipo de seis niñas de la Fundación, conocidas como ‘Cybergirls’, fueron las ganadoras en la categoría ‘Girl Powered International’ de la competencia de robótica VEX IQ, que se realizó en la Universidad EIA en Medellín.
El otro grupo es un semillero de investigación en mecatrónica y STEM (ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) en alianza con la facultad de ingeniería de la Universidad EAN. Un equipo de ocho niñas, entre los 12 y 15 años, participará en actividades académicas hasta finales de este año.
“Este es realmente un gran reto y un paso adelante en la misión de acercar la academia y la tecnología a las niñas y adolescentes de zonas rurales y territorios de Chocó”, resaltó la fundadora.
La Fundación realiza sus jornadas académicas en espacios educativos como en las instalaciones de la Institución Educativa Integrado Carrasquilla Industrial de Quibdó y la Institución Educativa Femenina de Enseñanza Media (IEFEM). Su propósito es también articular a la planta docente en los procesos de investigación y dejar capacidad instalada en el sector educativo de la capital del Chocó.
Las jornadas de formación se dan cada sábado, en una duración de entre tres y cuatro horas, en las que aprenden teoría y realizan ejercicios prácticos. En algunas ocasiones, llegan a Quibdó docentes desde Medellín, de la Universidad EAN, a apoyar las clases.
Gabriela Areiza, coordinadora y docente de la Fundación Nuevo Amanecer, le dijo a esta redacción que las niñas que participan en los procesos de la Fundación se convierten en promotoras de conocimiento y actores activas para el cambio de sus territorios.
“Nuestras niñas son empoderadas, tienen conocimientos actualizados en temas como mecatrónica aplicados a cómo evitar la contaminación a través de la tecnología. Las estamos impulsando a ser referentes en sus colegios y comunidades afros e indígenas”, señaló Areiza.
La Fundación prioriza a la población femenina con la motivación de fortalecer estos conocimientos en las niñas, lo que, a su vez, generará una mayor participación en el sector. Según el informe “Igualdad de género en Colombia” de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de 2023, a partir de las pruebas Saber 11 y la prueba intencional PISA, se evidencia un menor rendimiento académico en las niñas en disciplinas STEM. Esto se traduce, según la OCDE, en que más adelante se dé un acceso limitado a la educación superior en estas disciplinas.
Desde de la Fundación Nuevo Amanecer, también entregan apoyo psicológico y emocional a las niñas, principalmente previo a las competencias, para mejorar el trabajo en equipo, la comunicación serbia y la resolución de problemas. “Estos entrenamientos en habilidad blandas son 1A en sus formaciones integrales”, afirma Sánchez.
Para Haidy Sánchez Mattsson en su departamento hay muchos talentos, potencial y ganas de salir adelante, pero se carece de oportunidades y recursos económicos para ello. Por eso, en los próximos meses continuará tocando puertas y buscando alianzas para continuar entregando becas a estudiantes de las zonas rurales y urbanas de Quibdó.
Haidy Sánchez Mattsson nació en Quibdó, se formó como psicóloga y en su corazón estaba el deseo de crear una fundación para cambiar la vida de las niñas de su territorio, abriendo nuevos caminos. Esto la llevó en 2022 a crear la Fundación Nuevo Amanecer ESAL, que trabaja por cerrar brechas de formación y educación para generar oportunidades laborales para los habitantes de la región Pacífico de Colombia.
Después de tocar muchas puertas, estar en cientos de reuniones exponiendo su fundación y buscando aliados para sacarla adelante, junto con la Universidad EAN y la Fundación Global, Arte, Ciencia y Tecnología, ha podido lanzar becas y programas de formación gratuitos para niñas del Chocó, principalmente.
Para este año, abrió dos nuevos grupos que se iniciaron hace tan solo unas semanas. El primero es un programa de formación en robótica educativa femenina, con duración de un año, donde siete niñas entre los 13 y 15 años aprenderán de robótica, simulación, creación de robots, empoderamiento y liderazgo femenino.
“Este grupo también tendrá un módulo de introducción a la investigación y participarán en torneos nacionales e internacionales en el primer semestre del 2025, donde se espera que aprendan estrategias para competir”, señaló Sánchez a El Espectador.
Esta no sería la primera vez que la fundación participa con un equipo femenino. En febrero del 2024, un equipo de seis niñas de la Fundación, conocidas como ‘Cybergirls’, fueron las ganadoras en la categoría ‘Girl Powered International’ de la competencia de robótica VEX IQ, que se realizó en la Universidad EIA en Medellín.
El otro grupo es un semillero de investigación en mecatrónica y STEM (ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) en alianza con la facultad de ingeniería de la Universidad EAN. Un equipo de ocho niñas, entre los 12 y 15 años, participará en actividades académicas hasta finales de este año.
“Este es realmente un gran reto y un paso adelante en la misión de acercar la academia y la tecnología a las niñas y adolescentes de zonas rurales y territorios de Chocó”, resaltó la fundadora.
La Fundación realiza sus jornadas académicas en espacios educativos como en las instalaciones de la Institución Educativa Integrado Carrasquilla Industrial de Quibdó y la Institución Educativa Femenina de Enseñanza Media (IEFEM). Su propósito es también articular a la planta docente en los procesos de investigación y dejar capacidad instalada en el sector educativo de la capital del Chocó.
Las jornadas de formación se dan cada sábado, en una duración de entre tres y cuatro horas, en las que aprenden teoría y realizan ejercicios prácticos. En algunas ocasiones, llegan a Quibdó docentes desde Medellín, de la Universidad EAN, a apoyar las clases.
Gabriela Areiza, coordinadora y docente de la Fundación Nuevo Amanecer, le dijo a esta redacción que las niñas que participan en los procesos de la Fundación se convierten en promotoras de conocimiento y actores activas para el cambio de sus territorios.
“Nuestras niñas son empoderadas, tienen conocimientos actualizados en temas como mecatrónica aplicados a cómo evitar la contaminación a través de la tecnología. Las estamos impulsando a ser referentes en sus colegios y comunidades afros e indígenas”, señaló Areiza.
La Fundación prioriza a la población femenina con la motivación de fortalecer estos conocimientos en las niñas, lo que, a su vez, generará una mayor participación en el sector. Según el informe “Igualdad de género en Colombia” de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de 2023, a partir de las pruebas Saber 11 y la prueba intencional PISA, se evidencia un menor rendimiento académico en las niñas en disciplinas STEM. Esto se traduce, según la OCDE, en que más adelante se dé un acceso limitado a la educación superior en estas disciplinas.
Desde de la Fundación Nuevo Amanecer, también entregan apoyo psicológico y emocional a las niñas, principalmente previo a las competencias, para mejorar el trabajo en equipo, la comunicación serbia y la resolución de problemas. “Estos entrenamientos en habilidad blandas son 1A en sus formaciones integrales”, afirma Sánchez.
Para Haidy Sánchez Mattsson en su departamento hay muchos talentos, potencial y ganas de salir adelante, pero se carece de oportunidades y recursos económicos para ello. Por eso, en los próximos meses continuará tocando puertas y buscando alianzas para continuar entregando becas a estudiantes de las zonas rurales y urbanas de Quibdó.