La Policía Comunitaria, una propuesta para generar confianza
Se trata de un modelo basado en la generación de confianza y legitimidad para fortalecer los lazos entre la institucionalidad y la comunidad, y reducir los factores de riesgo en los territorios.
“Esta iniciativa es muy bonita porque impactamos a la comunidad en general: niños, jóvenes y adultos. Ha sido muy bien recibida por la comunidad, nos hemos acercado a ellos”, aseguró Daniela Fandiño, jefa de Policía Comunitaria en el departamento del Huila y condecorada por la institución por su gestión comunitaria orientada a las personas en los territorios.
La Policía Comunitaria se enfoca en la confianza, la legitimidad y la creación de lazos entre la institucionalidad y la comunidad para reducir los factores de riesgo.
Esta entidad surge para atender la necesidad de crear un vínculo más fuerte y cercano entre los uniformados, otras autoridades y la comunidad en Colombia y, asimismo, mejorar la seguridad y convivencia dentro del territorio nacional.
Aunque la Policía Comunitaria fue creada en 1998, a lo largo de estos años la institución ha unido esfuerzos con organizaciones internacionales como la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). En esta colaboración se han centrado en fortalecer la cohesión social y la seguridad ciudadana.
Estos son dos componentes del programa Somos Comunidad, que tiene incidencia en 35 municipios pertenecientes a Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET). Es impulsado por USAID y la Fundación Panamericana para el Desarrollo (FUPAD). El programa se basa en la prevención, mitigación y reconstrucción de las comunidades sobre los efectos de la violencia y el conflicto armado.
“Nosotros venimos trabajando con Somos Comunidad desde el 2021 en el proceso de transformación de la policía, luego del estallido social donde la policía se desgastó y hubo unas situaciones muy críticas para el país”, comentó Joshua Mitrotti, director del Programa Somos Comunidad. FUPAD ha brindado asistencia técnica a la Policía Nacional de Colombia para apoyar su transición hacia una doctrina y prácticas orientadas a la cercanía con las comunidades y los territorios. Este proceso incluyó la organización de mesas de diálogo, encuentros comunitarios, diagnósticos participativos en los territorios, contratación de expertos y un aporte significativo al desarrollo de políticas públicas.
Por ello, el jueves 14 de noviembre se celebró el Primer Encuentro Nacional de Jefes de Policía Comunitaria, cuyo objetivo fue dar los lineamientos doctrinales necesarios para el despliegue de la gestión comunitaria, en el marco de modelo del servicio de policía orientado a las personas y los territorios.
En colaboración con la Policía Nacional, se lanzó el modelo de Policía Comunitaria y el libro Mediación policial, junto con un documento técnico sobre participación cívica y prevención del delito. Con estos elementos técnicos se busca fortalecer el servicio de policía, promoviendo la construcción de confianza y legitimidad institucional en los territorios.
Además, se impartieron capacitaciones en mediación policial, seguridad ciudadana y derechos humanos, entre otros temas claves diseñados para fomentar una escucha activa y cercana, con un enfoque más humano y centrado en las comunidades.
La policía lo ve como una “estrategia fundamental” que, según el brigadier general José Luis Ramírez Hinestroza, jefe nacional del Servicio de Policía y responsable de garantizar el despliegue de la Policía Comunitaria en todo el país, brinda la oportunidad de abordar riesgos sociales y gestionar la convivencia de forma colaborativa entre la comunidad y la institucionalidad.
Dichas estrategias toman forma en planes de seguridad, en los que participa la comunidad y funcionarios públicos, para lograr entornos más seguros y con mejor convivencia entre las personas.
Para organizaciones internacionales como FUPAD, la implementación de estas estrategias tiene la capacidad de transformar la convivencia y la seguridad ciudadana. Con el trabajo realizado, dice Roberto Obando, director general de FUPAD Colombia, “la Policía Comunitaria de Colombia tiene que verse como un referente para otras policías de América Latina y el Caribe por sus fortalezas, experiencia y trabajo”.
Gracias al uso de estas herramientas, Daniela Fandiño, jefa de la Policía Comunitaria del Huila, asegura: “No hay mejor agradecimiento que la sonrisa de un niño”.
“Esta iniciativa es muy bonita porque impactamos a la comunidad en general: niños, jóvenes y adultos. Ha sido muy bien recibida por la comunidad, nos hemos acercado a ellos”, aseguró Daniela Fandiño, jefa de Policía Comunitaria en el departamento del Huila y condecorada por la institución por su gestión comunitaria orientada a las personas en los territorios.
La Policía Comunitaria se enfoca en la confianza, la legitimidad y la creación de lazos entre la institucionalidad y la comunidad para reducir los factores de riesgo.
Esta entidad surge para atender la necesidad de crear un vínculo más fuerte y cercano entre los uniformados, otras autoridades y la comunidad en Colombia y, asimismo, mejorar la seguridad y convivencia dentro del territorio nacional.
Aunque la Policía Comunitaria fue creada en 1998, a lo largo de estos años la institución ha unido esfuerzos con organizaciones internacionales como la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). En esta colaboración se han centrado en fortalecer la cohesión social y la seguridad ciudadana.
Estos son dos componentes del programa Somos Comunidad, que tiene incidencia en 35 municipios pertenecientes a Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET). Es impulsado por USAID y la Fundación Panamericana para el Desarrollo (FUPAD). El programa se basa en la prevención, mitigación y reconstrucción de las comunidades sobre los efectos de la violencia y el conflicto armado.
“Nosotros venimos trabajando con Somos Comunidad desde el 2021 en el proceso de transformación de la policía, luego del estallido social donde la policía se desgastó y hubo unas situaciones muy críticas para el país”, comentó Joshua Mitrotti, director del Programa Somos Comunidad. FUPAD ha brindado asistencia técnica a la Policía Nacional de Colombia para apoyar su transición hacia una doctrina y prácticas orientadas a la cercanía con las comunidades y los territorios. Este proceso incluyó la organización de mesas de diálogo, encuentros comunitarios, diagnósticos participativos en los territorios, contratación de expertos y un aporte significativo al desarrollo de políticas públicas.
Por ello, el jueves 14 de noviembre se celebró el Primer Encuentro Nacional de Jefes de Policía Comunitaria, cuyo objetivo fue dar los lineamientos doctrinales necesarios para el despliegue de la gestión comunitaria, en el marco de modelo del servicio de policía orientado a las personas y los territorios.
En colaboración con la Policía Nacional, se lanzó el modelo de Policía Comunitaria y el libro Mediación policial, junto con un documento técnico sobre participación cívica y prevención del delito. Con estos elementos técnicos se busca fortalecer el servicio de policía, promoviendo la construcción de confianza y legitimidad institucional en los territorios.
Además, se impartieron capacitaciones en mediación policial, seguridad ciudadana y derechos humanos, entre otros temas claves diseñados para fomentar una escucha activa y cercana, con un enfoque más humano y centrado en las comunidades.
La policía lo ve como una “estrategia fundamental” que, según el brigadier general José Luis Ramírez Hinestroza, jefe nacional del Servicio de Policía y responsable de garantizar el despliegue de la Policía Comunitaria en todo el país, brinda la oportunidad de abordar riesgos sociales y gestionar la convivencia de forma colaborativa entre la comunidad y la institucionalidad.
Dichas estrategias toman forma en planes de seguridad, en los que participa la comunidad y funcionarios públicos, para lograr entornos más seguros y con mejor convivencia entre las personas.
Para organizaciones internacionales como FUPAD, la implementación de estas estrategias tiene la capacidad de transformar la convivencia y la seguridad ciudadana. Con el trabajo realizado, dice Roberto Obando, director general de FUPAD Colombia, “la Policía Comunitaria de Colombia tiene que verse como un referente para otras policías de América Latina y el Caribe por sus fortalezas, experiencia y trabajo”.
Gracias al uso de estas herramientas, Daniela Fandiño, jefa de la Policía Comunitaria del Huila, asegura: “No hay mejor agradecimiento que la sonrisa de un niño”.