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Colombia ha sido el mayor receptor de la migración proveniente de Venezuela durante los últimos años, con casi tres millones de personas del vecino país radicadas con vocación de permanencia. Ha sido una diáspora que ha ayudado a formar nuevas comunidades y familias, aportando a la diversidad cultural, el conocimiento y la mano de obra de las empresas e incluso en impuestos, pues se calcula que anualmente tributan al menos US$500 millones. Sin embargo, los prejuicios, la estigmatización y la xenofobia han dificultado su plena integración a la sociedad colombiana, lo que, a su vez, ha obstaculizado la obtención de todos beneficios que este país podría recibir de una acogida efectiva.
Una de las áreas en las que la integración efectiva de la población migrante puede ser beneficiosa para el país y el ambiente, al tiempo que se asegura la generación de ingresos para las comunidades, es la del aprovechamiento de los residuos sólidos y el reciclaje. Para hacerse una idea del potencial, Colombia produce al menos más de 30.000 toneladas diarias de residuos sólidos, de las cuales menos del 20 % es reciclado, según datos citados por el Ministerio de Ambiente. Salta a la vista que en este frente queda mucho por hacer.
“Una labor con valor”, la más reciente campaña del programa Integrando Horizontes Sostenibles, apoyada por la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de los Estados Unidos (PRM) y ejecutado por la Fundación Panamericana para el Desarrollo (PADF-FUPAD en Colombia), busca precisamente dignificar el trabajo por el cuidado del ambiente que realizan la población migrante y las comunidades de acogida en nuestro país.
El programa reconoce y destaca la contribución de esta labor para la generación de empleo, ingresos y sostenibilidad. Promover la integración de la población migrante y las comunidades de acogida por medio de esta actividad de la economía circular busca, además, abrir caminos para mejores condiciones sociales y económicas para todas las partes. En total, de 744 recicladores que forman parte del programa, 478 son migrantes venezolanos.
Durante la implementación del programa, que tiene un total de tres años, el programa ha trabajado por la integración socioeconómica de la población migrante venezolana y las comunidades de acogida en los departamentos de La Guajira y Valle del Cauca. Lo ha hecho con una aproximación integral, fomentando el acceso a derechos básicos para las personas involucradas; la generación de empleo y el emprendimiento local en el ámbito de la economía circular y, en simultáneo, el fortalecimiento del tejido social.
“La población sujeto de atención del programa incluye a población migrante venezolana en situación de alta vulnerabilidad y a comunidades de acogida que se dedican principalmente al oficio del reciclaje y que participan en actividades relacionadas con la economía circular en Maicao, Riohacha y Cali”, señala la organización.
Según Fupad, en este primer año, más 1.450 familias han recibido acompañamiento integral, cerca de 2.350 personas han obtenido asesoría legal, al tiempo que 1.000 familias han resultado beneficiadas con asistencia multipropósito. Además, 1.000 personas han sido capacitadas en habilidades para la economía circular, la misma cantidad que recibió asistencia para mejorar sus medios de vida. En total, ocho asociaciones de reciclaje han sido fortalecidas empresarialmente; se ha formado a 20 funcionarios gubernamentales en temas clave y más de 150.000 personas fueron alcanzadas con campañas de sensibilización sobre cuidado ambiental y el reciclaje.
En total, de 744 recicladores que forman parte de la iniciativa, 478 son migrantes provenientes de Venezuela que han logrado generar ingresos, aportar a sus comunidades y cuidar el ambiente.
Un evento para visibilizar “Una labor con valor”
Visibilizar las buenas prácticas de la población migrante venezolana y colombiana que trabaja en el reciclaje, al tiempo que se fomenta el diálogo sobre la economía circular y el desarrollo sostenible en Colombia, será el objetivo del evento “El reciclaje: una labor con labor”, que se llevará a cabo mañana en la ciudad de Cali, anfitriona de la cumbre de biodiversidad más importante del planeta, la COP16, el próximo mes de octubre.
En la antesala de esta cita global, se “busca compartir experiencias innovadoras, y mostrar los resultados del programa ‘Integrando Horizontes Sostenibles’, que conecta los esfuerzos humanitarios con el desarrollo sostenible”, destaca Fupad, que cuenta con El Espectador como medio aliado.
El evento tendrá la participación de representantes de las comunidades beneficiadas e influyentes tomadores de decisiones.
Habrá un panel dedicado a hablar del potencial de conjugar la migración con el reciclaje, con las aproximaciones de representantes de la Asociación de Recicladores de Maicao; la Embajada de Estados Unidos en Bogotá y la agencia de desarrollo USAID; las entidades gubernamentales colombianas iNNpulsa y Migración Colombia, y la Organización Internacional del Trabajo.
Un segundo panel abordará la economía circular como una oportunidad para el desarrollo, con la participación de importantes empresas del sector, como Swisscontact, Carvajal, Enka y Empacor, y la Secretaría Distrital de Ambiente de Bogotá.
Invitamos a seguir el evento en vivo a través de www.elespectador.com, el miércoles 25 de septiembre, a partir de las 9 a. m.
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