La familia real británica siempre ha dado mucho de qué hablar. Uno de los temas más sonados a nivel mundial fue la relación de la reina Isabel II con Diana Spencer, quien fue la primera esposa del príncipe Carlos. Se dice que en un principio, la monarca de Inglaterra aprobó la relación de su hijo con Diana de Gales, pues tenía todas las características para convertirse en Princesa de Gales. Luego de que se casaron, comenzaron a surgir tensiones entre las dos tras varios escándalos en los que se vio envuelto su matrimonio.
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Sigue a la Revista Vea en WhatsAppEl príncipe Carlos estando aún casado con la princesa Diana de Gales, entabló una relación con Camila Parker, su actual esposa. Además de eso, Lady Di comenzó a sufrir de bulimia y, sumado a otros problemas, la relación de los esposos se fue a pique. Aunque la reina Isabel la apoyó y trató de ayudarla a recuperar su matrimonio, hubo ciertos comportamientos que la monarca no aprobaba en un integrante de la familia real británica y que poco a poco fueron dañando la relación entre suegra y nuera.
Lady Di y el príncipe Carlos: el cuento de hadas que terminó en divorcio y tragedia. 40 años después del enlace matrimonial
1. Al parecer, a Diana de Gales le gustaba hablar de ciertos temas privados con el personal de servicio como guardaespaldas, cocineros y mayordomos, cosa que disgustaba de sobremanera a la reina
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2. Debido a las infidelidades del príncipe Carlos y a sus comportamientos indiferentes, la princesa solía presentar cambios abruptos en su carácter y personalidad. Actitudes que la reina Isabel II no lograba comprender y, por el contrario, le producían molestias.
3. La reina Isabel no pudo perdonarle a Lady Di que, en 1995, cuando ya estaba separada del príncipe Carlos, confesó en una entrevista que sostuvo una relación sentimental con James Hewitt, un exoficial de la guardia real. Según la monarca, se trató de toda una indiscreción.
4. Por otro lado, en esa misma entrevista con la BBC, la princesa lanzó fuertes críticas sobre su exesposo, afirmando que no era apto para ser rey y que tampoco llegaría a serlo en ningún momento, comentario que por supuesto, no recibió bien la reina Isabel.
5. Otra actitud que la soberana no pudo tolerar de su exnuera fue que hubiera filtrado a la prensa los acuerdos económicos a los que habían llegado cuando se separó del príncipe Carlos.
Este año, se cumplen 25 años de la muerte de la princesa de Gales. Un accidente de tránsito le cobró su vida el 31 de agosto de 1997 cuando era perseguida por un grupo de paparazzi. Su deceso impactó al mundo, y su funeral fue visto por más de 2.000 millones de personas.
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