Mientras varios países de Latinoamérica celebran Halloween, México festeja el Día de Muertos, una tradición del país centroamericano, que el primero y dos de noviembre rinden homenaje a sus seres queridos fallecidos. El próximo 12 de diciembre se cumplirá un año de la muerte de ‘El charro de Huentitán’, Vicente Fernández. Sus seres queridos le rinden homenaje.
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Sigue a la Revista Vea en WhatsAppAsí luce el primer ‘altar de muertos’ de Vicente Fernández
La viuda de ‘Chente’ contó detalles de la elaboración del altar y habló sobre la manera en que vive la partida de quien fue su esposo durante casi 58 años.
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La viuda del cantante, María del Refugio Abarca Villaseñor, más conocida como ‘doña Cuquita’, invitó a la prensa mexicana a su rancho ‘Los tres potrillos’. Allí, los periodistas pudieron ver el primer altar, que, en honor a su esposo, crearon más de 20 artesanos de Michoacán. En el altar de Día de Muertos del ídolo mexicano, aparecen sus fotos y hasta trajes del charro. Llaman poderosamente la atención las 72 mil flores Cempasúchil que se utilizaron en su elaboración. Esta es una flor típica, de color naranja, que solo se cultiva en México durante esta época y se usa para crear la ofrenda. No pueden faltar el tequila y el chocolate.
@alexisbarriga_ Hicimos el primer #AltarDeMuertos para Vicente Fernández, hecho por manos artesanas de #michoacán #CapCut #coco #vicentefernandez @Vicente Fernández
♬ El Latido de mi Corazón - Luis Ángel Gómez Jaramillo
Doña María del Refugio habló también sobre la manera en que vive la partida de quien fue su esposo durante casi 58 años. “Yo pienso mejor que anda trabajando, que va a regresar, pero no me pongo a llorar porque se fue, no”, confesó. La viuda de ´Chente´ también habló sobre los rumores que siempre rondaron su matrimonio con el artista, por los que recibió muchas críticas. “A don Vicente le gustaba todo, desde muchachas hasta paletas. De las puertas del rancho para acá era mi marido, aunque me critican y me criticaron, no me interesa porque yo no iba a cuidar a un señorón, a andarlo cuidando y andar tras él. Él sabía dónde estaba yo, qué lugar tenía yo y lo supo siempre porque nunca se fue. Siempre hizo lo que él quiso y muy bien hecho”, dijo.