Las recientes acusaciones legales contra Sean John Combs, conocido artísticamente como Puff Daddy, por tráfico sexual y abuso, le han dado la vuelta al mundo.
El artista, nacido en Harlem, Nueva York, se encuentra detenido desde mediados de septiembre por las más de 120 denuncias en su contra. Entre las víctimas se encuentran 25 menores de edad. Figuras de la élite de Hollywood se han visto involucradas en el escándalo que ha mostrado la oscura vida del magnate musical.
Sigue a la Revista Vea en WhatsAppLos múltiples cargos que enfrenta lo podrían tener el resto de su vida en la cárcel. Algunos de los abogados de las víctimas han revelado que, en menos de 10 días, recibieron más de 3.000 llamadas de personas que aseguran haber sido víctimas del productor estadounidense, descrito por algunos como un “depredador” y quien se habría aprovechado de su poder en la industria musical para abusar de quienes querían crecer en el mundo del espectáculo, obligándolos a guardar silencio.
Sean 'Diddy' Combs. EFE/Justin Lane
Pese a que contó con un grupo de colaboradores y trabajadores que tendrían conocimiento de sus abusos y quienes lo encubrieron durante décadas, finalmente todo salió a la luz. A los famosos eventos denominados freak-offs, donde al parecer se realizaban orgías de varios días organizadas por él, entre otras polémicas actividades, asistieron celebridades como Leonardo DiCaprio, Justin Bieber, Beyoncé, entre otros.
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¿Qué vio el exreportero infiltrado en fiesta de P. Diddy?
En medio del escándalo, una nueva versión sobre las fiestas del productor se hizo pública. Chris Harris, un reconocido reportero, quien trabajó en East Hampton Star, reveló que en 1999 asistió a una fiesta, pero no precisamente como uno de los invitados especiales de Puff Daddy.
De acuerdo con lo que contó, para ingresar tuvo que hacerse pasar como otra persona de las que estaban en la lista. Una joven se habría acercado a él y le habría sugerido utilizar el nombre de “Tem Ammon”, uno de los invitados.
Aunque se creyó que el plan no tendría éxito, el reportero logró su objetivo y se infiltró en la fiesta que se realizó en la mansión de P. Diddy. Allí estuvo rodeado de famosos como Ivanna Trump, hija de Donald Trump, Beyoncé, entre otros grandes de la industria.
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En una entrevista con New York Post reveló cómo era el ambiente dentro del lugar: “el aire olía como el autobús de gira de Willie Nelson. Había mujeres desnudas y en topless por toda la piscina, y las modelos repartían champán”. El periodista resaltó que, pese a la cantidad de gente que había, la comida era buena: “La fila para comer era atrozmente lenta, pero valió la pena: sigo sin encontrar un hot dog más sabroso”.
Contó también que en un momento se cruzó con Diddy, a quien no dudó en agradecerle por el éxito de la fiesta. El magnate musical le habría contestado: “sí, qué bien”.
Contrario a las denuncias que se han hecho públicas, el periodista reveló que no observó en ningún momento elementos como lubricantes, ni juguetes sexuales, ni mucho menos sustancias alucinógenas. Sin embargo, Jason Lee, editor de entretenimiento, aseguró que una cosa era asistir a las fiestas y otra muy diferente hacer parte de las posfiestas, que, al parecer, eran mucho más oscuras.
