Murió Kirstie Alley de ‘Mira quién habla’ y ‘Cheers’. Este fue el motivo

Kirstie Alley se hizo famosa gracias a su papel como Rebecca Howe, en la serie Cheers de NBC. Hace unos minutos, a través de las redes sociales, se confirmó su muerte.

“Nos entristece informarles que nuestra increíble, feroz y amorosa madre falleció después de una batalla contra el cáncer, recientemente descubierto. Estaba rodeada de su familia más cercana y luchó con gran fuerza, dejándonos con la certeza de su interminable alegría de vivir y de las aventuras que se avecinaban. Tan icónica como fue en la pantalla, fue una madre y una abuela aún más increíble”, escribieron en Twitter True y Lillie Parker, hijos de la actriz.

La actriz nacida en Kansas tenía 71 años. Es recordada por protagonizar también la comedia Mira quién habla junto a John Travolta. La estadounidense fue considerada una de las actrices más grandes de Hollywood. A lo largo de su carrera, obtuvo importantes reconocimientos, entre ellos, un Globo de Oro y dos Emmy.

Sus seguidores y amigos han reaccionado a la lamentable noticia. John Travolta escribió: “Kirstie fue una de las relaciones más especiales que he tenido. Te amo Kirstie”.

Sus familiares le agradecieron a todo el cuerpo médico que la atendió en todo el proceso de su lucha contra el cáncer que, al parecer, era de colon. “El entusiasmo y pasión por la vida de nuestra madre, sus hijos, nietos y sus muchos animales, sin mencionar su alegría eterna de crear, no tenían igual y nos dejaron inspirados para vivir la vida al máximo tal como ella lo hizo”.

Kirstie Alley y sus complicaciones de salud

Durante los últimos años, la reconocida actriz tuvo un drástico cambio de apariencia, adelgazó y engordó más de 40 kilos. En el 2007 anunció que perdió más de la mitad de su peso, pero tres años después, recuperó 38 kilos. En una oportunidad, reveló que había comido “compulsivamente” y como “un camionero”. Tiempo después, su salud se comenzó a ver afectada. En 1992 fue diagnosticada con menopausia temprana. Para recuperar su figura, Alley comenzó a entrenar fuertemente. “Cuando me subí a la báscula por primera vez en 15 meses empecé a gritar. Ponía 228 libras [103.4 kilos], que es mi peso más alto. ¡Era mucho más repugnante de lo que pensaba!”.