Nada que hacer, a pesar de que ni Jennifer López ni Ben Affleck han confirmado que el divorcio es el siguiente paso en su relación, ese parece ser el camino inevitable.
La pareja que ha estado rodeada por semanas de rumores de una crisis matrimonial, estaría firmando su separación antes de que culmine este año. De nada han valido las sesiones de terapia y que ella cancelara su gira de conciertos por Estados Unidos y Canadá, pues el matrimonio está roto, dijeron hace unos días fuentes cercanas a los artistas en información que fue rápidamente reproducida por varios medios.
Sigue a la Revista Vea en WhatsAppAunque Jennifer acudió a los actos de clausura de año escolar de dos de los hijos de Ben Affleck, uno de ellos de graduación, y se les vio caminar juntos, en realidad, no se han vuelto a ver felices. En algunos momentos, los dos portan sus anillos de casados, pero en varias ocasiones los han dejado en casa, alimentando las informaciones sobre la crisis.
También te puede interesar: Jennifer López no luchará más por su matrimonio con Ben Affleck
Esta semana Jennifer se fue de vacaciones con unos amigos a Italia, mientras que él se quedó en Los Ángeles trabajando y disfrutando de salidas con Violet, Seraphine y Samuel, los hijos que tuvo con Jennifer Garner. Incluso el día del padre lo pasó con ellos y su ex, pese a que López lo felicitó. Un mes antes, en la festividad de la madre, Affleck también dejó sola a su todavía esposa. Se especula que fue un día muy triste para López, a pesar de que junto a ella estaban sus gemelos Max y Emme, fruto de su matrimonio con Marc Anthony.
Ben aprovechó vacaciones de Jlo para sacar sus cosas de la casa matrimonial
Volviendo a los días de vacaciones de López en Europa, donde no portó su argolla de casada, los medios estadounidenses han confirmado que en esos días, Ben sacó todas sus pertenencias de la mansión de 60 millones que compraron hace un año y las llevó a la casa ubicada en Brentwood, donde está viviendo hace casi dos meses.
“Se le ve bien. Va a la oficina todos los días y parece estar muy concentrado en su trabajo. También está pasando mucho tiempo con sus hijos”, mencionó una fuente sobre el actor que tiene fama de estar de mal humor siempre que es fotografiado por los reporteros.
Esta misma semana JLo llegó a Los Ángeles y por supuesto ha sido perseguida por los reporteros que la vieron tensa y malhumorada. Se dice que fue hasta la oficina de Ben y podrían estar resolviendo el paso a seguir o cómo darán a conocer que su matrimonio ha terminado.
Una persona con información privilegiada confió al Daily Mail: “Jenny ha tenido suficiente, y realmente lo ha intentado, pero no puede más”, dijo la fuente. El matrimonio, según este diario, “no está mejorando; está peor”.