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Entre los médicos es bien sabido que ser residente es uno de los momentos más pesados de la carrera. Ahora, un estudio realizado por investigadores del Johns Hopkins Medicine y publicado en la revista científica JAMA parece corroborarlo, pues a las difíciles condiciones económicas y laborales durante la residencia se suma el “matoneo” generalizado. Especialmente para aquellos que son extranjeros y viven en Estados Unidos. (Acá: Ministerio de Salud reglamenta Ley de Residentes médicos)
Con el fin de ampliar un tema del que se habla poco, un equipo de investigadores liderados por el doctor Scott Wright, catedrático de medicina y director general del departamento de medicina interna en el Centro Médico Bayview de Johns Hopkins, analizaron la situación de más de 24.000 residentes, la mayoría inscritos en programas de Estados Unidos. A todos se les pidió responder una encuesta de cinco preguntas sobre el acoso, así como compartir los resultados del examen que la American College of Physicians le proporciona para evaluar su progreso personal (el IM-ITE). En la encuesta se les preguntó si habían sufrido acoso durante la residencia; cuál había sido el tipo de acoso; si habían solicitado ayuda, y si dicho acoso había afectado su salud.
De los 21,212 médicos que llenaron la encuesta, un total de 2,876 residentes informaron haber sido víctimas de acoso desde el inicio de su formación, lo que equivaldría a una tasa del 13,6 %. Sin embargo, en mujeres fue mayor, ya que alcanzó un 14.4% cuando se separaba del acoso hacia los hombres (12.9%).
Pero uno de los datos más curiosos que encontró la encuesta, según los propios investigadores, es que “más del 40 % de los residentes que dieron cuenta de haber sufrido intimidación no eran hablantes nativos del inglés”. Además, “los resultados revelaron que, en comparación con los programas para residentes de medicina interna en Estados Unidos, la probabilidad de sufrir acoso aumentaba en un 60%para aquellos residentes inscritos en programas internacionales”. (Lea: Es justo pagarles a los médicos residentes )
Otro punto importante que quiso averiguar la encuesta era qué tanto podía afectar el matoneo el desempeño de los residentes, para lo que usaron el IM-ITE. Así encontraron que “la tasa de acoso de los residentes que obtuvieron los mejores puntajes se estimó en un 12,3 %, mientras que los que quedaron en los tercios medio e inferior señalaron haber sufrido más acoso, con tasas que se estimaron en un 13,8 por ciento y un 14,4 por ciento, respectivamente”.
Las formas en las que el matoneo terminó afectando a los residentes encuestados fue la siguiente: el 57 % indicó que había sentido “desmotivación (o desgaste)”; 39% señaló haberse “desempeñado insuficientemente” y el 27%, haber padecido “depresión”. Los residentes también describieron otros efectos como alteración del peso, consumo de alcohol o drogas ilícitas y aumento del rendimiento.
Además, alrededor de 62 médicos residentes señalaron haberse salido de su programa como resultado de la intimidación. (Le sugerimos: Los médicos residentes tienen más estrés y ansiedad)