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Seis meses después de desatarse la pandemia por el virus SARS-CoV-2, por fin las buenas noticias comienzan a emerger en medio de las olas de casos confirmados y muertes que día tras día se reportan de un rincón del planeta al otro. Al lado de los prometedores avances de vacunas que se han mostrado seguras y entraron en la fase III para probar su efectividad, los ensayos clínicos sobre medicamentos también están avivando la esperanza de médicos y pacientes graves.
Entre los cientos de artículos publicados hasta ahora alrededor del mundo sobre posibles tratamientos para contener la faceta más grave del Covid-19, uno publicado en la revista New England Journal of Medicine está llamando la atención de los médicos. Se trata de una investigación bajo la sombrilla del programa Recovery, una iniciativa global para evaluar posibles tratamientos disponibles para Covid-19 en la mortalidad a los 28 días, en la que participaron más de 6.000 pacientes y se evaluó la utilidad de la dexametasona.
Para averiguar qué tan útil resultaba la dexametasona, un potente glucocorticoide que actúa como antiinflamatorio e inmunosupresor, un total de 2014 pacientes recibieron dexametasona mientras a 4.321 se les trató con los protocolos habituales.
“Nuestros resultados preliminares muestran que entre los pacientes hospitalizados con Covid-19, el uso de dexametasona por hasta 10 días resultó en una mortalidad a los 28 días más baja que la atención habitual en pacientes que recibían ventilación mecánica invasiva al azar y aquellos que estaban recibiendo oxígeno sin ventilación mecánica invasiva”, concluyeron los autores y colaboradores del trabajo afiliados a 176 instituciones de salud del Reino Unido.
En el grupo de pacientes que recibieron ventilación mecánica más dexametasona la incidencia de muerte fue 29,3% frente a 41,4% entre los que recibieron los tratamientos habituales. Esa diferencia fue mucho menor entre los que recibieron oxígeno y dexametanosa (23.3%) frente a los del tratamiento usual (26.2%).
El infectólogo colombiano Carlos Álvarez, designado como coordinador nacional sobre estudios covid-19 de la Organización Mundial de la Salud, considera que esta es una de las mejores noticias en cuestión de tratamientos que han tenido hasta ahora: “es la única intervención que demuestra de forma contundente en un estudio bien diseñado la disminución de la mortalidad en pacientes con Covid-19 que requieren soporte de oxígeno, incluso siendo más en el grupo que está en ventilación mecánica. No es fácil encontrar intervenciones que disminuyan la mortalidad en este grupo de pacientes”.
Para los coordinadores del proyecto DIME, que agrupa expertos en farmacología de ocho países de Latinoamérica, la dexametasona representa una importante alternativa para el tratamiento de pacientes Covid-19: “dada la confirmación de este efecto, en pacientes hospitalizados con COVID-19 en estado crítico, la dexametasona se incorporó en las guías y recomendaciones para el manejo clínico de la enfermedad, por lo que se debe garantizar su disponibilidad en todos los escenarios en donde se necesite”.
Gracias a que en el mercado colombiano existen siete empresas distribuidoras de este fármaco, incluyendo productoras nacionales, el Observatorio de Medicamentos de la Federación Médica Colombiana (OBERVAMED) y el Centro de Pensamiento “Medicamentos, Información y Poder” consideran que no deberían existir mayores barreras de acceso para los pacientes. Una evaluación de precios en 17 países les mostró que Perú y Colombia presentan los menores precios.
Frente al remdesivir, un medicamento que también mostró algunos efectos en el tratamiento de pacientes críticos, el grupo de expertos recomienda darle prioridad a la dexametasona por ser mucho más barata e incluso mostrar un mejor efecto.
Otra aclaración muy importante por parte de los autores del trabajo publicado en el New England Journal of Medicine, es que “no hubo evidencia de que la dexametasona proporcionara algún beneficio entre los pacientes que no recibían asistencia respiratoria al azar, y los resultados fueron consistentes con posibles daños en este subgrupo. Lamentablemente cada vez que se menciona algún medicamento relacionado con el Covid-19, la desinformación lleva a personas a la automedicación desconociendo los riesgos y las indicaciones precisas para su uso. (Lea: Dexametasona, no olvide leer la letra pequeña).