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El laboratorio estadounidense Moderna realizó recientemente pruebas de su efectividad contra la variante Ómicron. Los resultados arrojaron que el ciclo de dos dosis de la vacuna genera anticuerpos neutralizantes bajos contra esta variante, pero una tercera dosis de refuerzo de 50 µg (microgramos) aumenta 37 veces los anticuerpos neutralizantes. Y una dosis de refuerzo más alta de 100 µg eleva más de 80 veces los niveles de anticuerpos.
Por ahora, la vacuna de refuerzo de esta farmacéutica autorizada en Estados Unidos es de 50 µg, en donde el 32% de las personas que han recibido el cuadro completo de vacunación ya tuvieron su dosis de refuerzo. Por su parte, la farmacéutica insiste en que la dosis de 100 µg es segura aunque puede generar reacciones adversas más frecuentes. (Lea: La OMS avala combinar vacunas frente al COVID-19)
Estos análisis se midieron contra un pseudovirus diseñado similar a la variante, en sangre de personas que recibieron la vacuna. Los datos se basan en los sueros de veinte receptores, cuyos niveles de anticuerpos se midieron el día 29 después de la aplicación de la dosis de refuerzo.
Además, Moderna comparó la efectividad de su vacuna contra otras variantes obteniendo resultados similares y aseguró que para 2022 desarrollará una vacuna específica contra Ómicron. Ante esto, Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos y asesor médico de Biden, afirmó que no es necesario crear una dosis específica para la variante, atendiendo que las dosis de refuerzo ayudan a mejorar la protección contra la misma e insistió en la continuidad de la vacunación. (Lea: Colombia recibió una nueva donación de vacunas contra el COVID-19)