El oro podría ayudar en tratamientos contra el cáncer
Las nanopartículas de oro podrían aumentar la eficacia de los tratamientos contra el cáncer, como la quimioterapia, al actuar desde el interior de los tumores y así, hacer más efectivos los medicamentos.
Agencia SINC y Redacción Salud
Un estudio publicado en la revista Angewandte Chemie demostró la capacidad de las nanopartículas de oro para generar in situ potentes fármacos anticancerígenos a partir de moléculas inertes. El oro actuaría como un catalizador de las reacciones químicas de las medicinas usadas en la quimioterapia, es decir, que aceleraría los procesos químicos de los fármacos en el tumor, evitando que estos efectos lleguen a las células sanas del cuerpo. El oro resulta ideal para cumplir esta función aceleradora debido a su alta biocompatibilidad.
“El principal problema de los tratamientos quimioterápicos son los efectos secundarios en diversos órganos debido a la toxicidad de las moléculas que se usan para combatir el cáncer. Por ello, desde la nanotecnología se exploran rutas alternativas, por ejemplo, el transporte de fármacos hasta el tumor utilizando nanopartículas”, explicó uno de los autores de la investigación, Jesús Santamaría.
Las conclusiones de este trabajo plantean una vía distinta: el fármaco se suministraría al paciente en su forma inerte y solo se convertiría a la forma tóxica localmente, gracias a las nanopartículas de oro que un cirujano implantaría previamente en el tumor.
La forma cómo se implantarían las nanopartículas del oro en el tumor no es sencilla: hayq ue camuflarlas en una microcápsula de resina que, en el caso del experimento, se implantó en en el cerebro de un pez cebra. Allí, los científicos lograron que éstas catalizaran (es decir, acelararan) una reacción química generando compuestos fluorescentes. Así, el trabajo revela la posibilidad de llevar a cabo catálisis en organismos vivos utilizando partículas diminutas de oro.
“Hemos descubierto las nuevas propiedades de oro que hasta ahora no se habían explorado y el estudio muestra que el metal podría ser usado para liberar fármacos en el interior de los tumores de una forma muy segura. Todavía queda mucho por hacer antes de que se pueda usar en pacientes, pero es un importante paso adelante”, concluyó Asier Unciti-Broceta de la Universidad del Instituto de Consejo de Investigación Médico de Edimburgo de Medicina Genética y Molecular.
Estos resultados ofrecen nuevas esperanzas en la lucha contra el cáncer y han sido obtenidos gracias a la colaboración de científicos del Instituto de Nanociencia de Aragón (INA) de la Universidad de Zaragoza, Víctor Sebastián, Silvia Irusta y Jesús Santamaría, con investigadores del Centro de Investigación del Cáncer en la Universidad de Edimburgo, liderados por el doctor Unciti-Broceta.
Un estudio publicado en la revista Angewandte Chemie demostró la capacidad de las nanopartículas de oro para generar in situ potentes fármacos anticancerígenos a partir de moléculas inertes. El oro actuaría como un catalizador de las reacciones químicas de las medicinas usadas en la quimioterapia, es decir, que aceleraría los procesos químicos de los fármacos en el tumor, evitando que estos efectos lleguen a las células sanas del cuerpo. El oro resulta ideal para cumplir esta función aceleradora debido a su alta biocompatibilidad.
“El principal problema de los tratamientos quimioterápicos son los efectos secundarios en diversos órganos debido a la toxicidad de las moléculas que se usan para combatir el cáncer. Por ello, desde la nanotecnología se exploran rutas alternativas, por ejemplo, el transporte de fármacos hasta el tumor utilizando nanopartículas”, explicó uno de los autores de la investigación, Jesús Santamaría.
Las conclusiones de este trabajo plantean una vía distinta: el fármaco se suministraría al paciente en su forma inerte y solo se convertiría a la forma tóxica localmente, gracias a las nanopartículas de oro que un cirujano implantaría previamente en el tumor.
La forma cómo se implantarían las nanopartículas del oro en el tumor no es sencilla: hayq ue camuflarlas en una microcápsula de resina que, en el caso del experimento, se implantó en en el cerebro de un pez cebra. Allí, los científicos lograron que éstas catalizaran (es decir, acelararan) una reacción química generando compuestos fluorescentes. Así, el trabajo revela la posibilidad de llevar a cabo catálisis en organismos vivos utilizando partículas diminutas de oro.
“Hemos descubierto las nuevas propiedades de oro que hasta ahora no se habían explorado y el estudio muestra que el metal podría ser usado para liberar fármacos en el interior de los tumores de una forma muy segura. Todavía queda mucho por hacer antes de que se pueda usar en pacientes, pero es un importante paso adelante”, concluyó Asier Unciti-Broceta de la Universidad del Instituto de Consejo de Investigación Médico de Edimburgo de Medicina Genética y Molecular.
Estos resultados ofrecen nuevas esperanzas en la lucha contra el cáncer y han sido obtenidos gracias a la colaboración de científicos del Instituto de Nanociencia de Aragón (INA) de la Universidad de Zaragoza, Víctor Sebastián, Silvia Irusta y Jesús Santamaría, con investigadores del Centro de Investigación del Cáncer en la Universidad de Edimburgo, liderados por el doctor Unciti-Broceta.