El trabajo de las mujeres en la salud y los cuidados sigue siendo infravalorado: OMS
Un nuevo estudia señala que las mujeres dedican entre dos y diez veces más tiempo a cuidados no remunerados que los hombres.
Las desigualdades de género en el trabajo en el sector de la salud y asistencial están afectando negativamente a las mujeres, los sistemas de salud y los resultados de este sector. Esa fue la conclusión a la que llegó un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el que destacan que la falta de inversión en los sistemas de salud provoca un círculo vicioso de trabajo no remunerado en este ámbito, lo que reduce la participación de las mujeres en los mercados de trabajo remunerados, perjudica el empoderamiento económico de estas y supone un obstáculo para la igualdad de género.
El informe titulado Fair share for health and care: gender and the undervaluation of health and care work destaca, entre otras cosas, que las mujeres representan el 67 % de los trabajadores de la salud y asistenciales remunerados en todo el mundo. Además de esta labor retribuida, se estima que llevan a cabo aproximadamente el 76 % de todas las actividades asistenciales no remuneradas. Las tareas que recaen principalmente en las mujeres están, por lo general, peor retribuidas y se llevan a cabo en malas condiciones. (Lea: Lo que viene para la reforma a la salud esta semana)
Por ejemplo, en la India, las mujeres dedican alrededor del 73 % de su tiempo de trabajo diario total en el trabajo no remunerado, en comparación con los hombres que dedican alrededor de sólo el 11 % de su tiempo de trabajo diario al trabajo no remunerado. A nivel mundial, se ha estimado que ellas dedican entre dos y diez veces más tiempo a cuidados no remunerados que los hombres.
Otro dato relacionado, es que antes de la pandemia, se estima que las mujeres realizaban aproximadamente el 76 % del trabajo de cuidados no remunerado, lo que representaba un total de 16.400 millones de horas por día.
El informe además recalca que el sector de la salud y asistencial se caracteriza por unos salarios bajos y unas condiciones de trabajo exigentes. La devaluación de los cuidados, un trabajo que efectúan principalmente mujeres, incide negativamente en los salarios, las condiciones de trabajo, la productividad y la huella económica del sector.
Un análisis de desigualdades salariales de género en este mismo sector, publicado también por la OMS y Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 2022, señaló que las mujeres ganan un 24 % menos que sus compañeros varones. (Lea: Norma Hurtado denuncia “intimidaciones” por firmar archivo de reforma a la salud)
“El informe Fair share pone de relieve de qué manera unas inversiones equitativas desde el punto de vista del género en el sector de la salud y asistencial restablecerían el valor del trabajo en la esfera de la salud y asistencial e impulsarían unas economías más justas e inclusivas”, señaló Jim Campbell, director del Departamento de Personal de Salud de la OMS.
¿Qué se puede hacer?
- El informe enumera una serie de estrategias políticas para poder valorar mejor el trabajo en el ámbito de la salud y asistencial:
- Mejorar las condiciones de trabajo de todas las formas de trabajo en el sector de la salud y asistencial, especialmente en el caso de las ocupaciones con una elevada presencia de mujeres
- Incluir a las mujeres de una manera más equitativa en el personal remunerado
- Mejorar las condiciones de trabajo y los salarios de los trabajadores de la salud y asistenciales y garantizar la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor
- Abordar la brecha de género en el trabajo asistencial, promover una labor asistencial de calidad y defender los derechos y el bienestar de los cuidadores
- Garantizar que las estadísticas nacionales tengan en cuenta, midan y valoren todo el trabajo en el sector de la salud y asistencial
- Invertir en unos sistemas de salud pública sólidos para reducir la carga del trabajo asistencial no remunerado y mejorar la calidad de los servicios de atención de la salud.
Las desigualdades de género en el trabajo en el sector de la salud y asistencial están afectando negativamente a las mujeres, los sistemas de salud y los resultados de este sector. Esa fue la conclusión a la que llegó un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el que destacan que la falta de inversión en los sistemas de salud provoca un círculo vicioso de trabajo no remunerado en este ámbito, lo que reduce la participación de las mujeres en los mercados de trabajo remunerados, perjudica el empoderamiento económico de estas y supone un obstáculo para la igualdad de género.
El informe titulado Fair share for health and care: gender and the undervaluation of health and care work destaca, entre otras cosas, que las mujeres representan el 67 % de los trabajadores de la salud y asistenciales remunerados en todo el mundo. Además de esta labor retribuida, se estima que llevan a cabo aproximadamente el 76 % de todas las actividades asistenciales no remuneradas. Las tareas que recaen principalmente en las mujeres están, por lo general, peor retribuidas y se llevan a cabo en malas condiciones. (Lea: Lo que viene para la reforma a la salud esta semana)
Por ejemplo, en la India, las mujeres dedican alrededor del 73 % de su tiempo de trabajo diario total en el trabajo no remunerado, en comparación con los hombres que dedican alrededor de sólo el 11 % de su tiempo de trabajo diario al trabajo no remunerado. A nivel mundial, se ha estimado que ellas dedican entre dos y diez veces más tiempo a cuidados no remunerados que los hombres.
Otro dato relacionado, es que antes de la pandemia, se estima que las mujeres realizaban aproximadamente el 76 % del trabajo de cuidados no remunerado, lo que representaba un total de 16.400 millones de horas por día.
El informe además recalca que el sector de la salud y asistencial se caracteriza por unos salarios bajos y unas condiciones de trabajo exigentes. La devaluación de los cuidados, un trabajo que efectúan principalmente mujeres, incide negativamente en los salarios, las condiciones de trabajo, la productividad y la huella económica del sector.
Un análisis de desigualdades salariales de género en este mismo sector, publicado también por la OMS y Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 2022, señaló que las mujeres ganan un 24 % menos que sus compañeros varones. (Lea: Norma Hurtado denuncia “intimidaciones” por firmar archivo de reforma a la salud)
“El informe Fair share pone de relieve de qué manera unas inversiones equitativas desde el punto de vista del género en el sector de la salud y asistencial restablecerían el valor del trabajo en la esfera de la salud y asistencial e impulsarían unas economías más justas e inclusivas”, señaló Jim Campbell, director del Departamento de Personal de Salud de la OMS.
¿Qué se puede hacer?
- El informe enumera una serie de estrategias políticas para poder valorar mejor el trabajo en el ámbito de la salud y asistencial:
- Mejorar las condiciones de trabajo de todas las formas de trabajo en el sector de la salud y asistencial, especialmente en el caso de las ocupaciones con una elevada presencia de mujeres
- Incluir a las mujeres de una manera más equitativa en el personal remunerado
- Mejorar las condiciones de trabajo y los salarios de los trabajadores de la salud y asistenciales y garantizar la igualdad de remuneración por trabajo de igual valor
- Abordar la brecha de género en el trabajo asistencial, promover una labor asistencial de calidad y defender los derechos y el bienestar de los cuidadores
- Garantizar que las estadísticas nacionales tengan en cuenta, midan y valoren todo el trabajo en el sector de la salud y asistencial
- Invertir en unos sistemas de salud pública sólidos para reducir la carga del trabajo asistencial no remunerado y mejorar la calidad de los servicios de atención de la salud.