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Sobre el medio día de este jueves 17 de agosto se registró un sismo de magnitud 6,1 en Colombia. Aunque el epicentro fue El Calvario, Meta, varios ciudadanos, principalmente en Bogotá y la zona Andina, alertaron del fuerte movimiento. (Lea: Se puede predecir un temblor y otros mitos aclarados por el director del S. Geológico)
Desde entonces, según ha informado el Servicio Geológico Colombiano (SGC) se reportaron 98 réplicas, la mayoría de ellas son imperceptibles. Después de algunas horas de que se registraran estos sucesos varios internautas aseguraron en redes sociales que habían quedado con una sensación de mareo.
Esta sensación ha sido llamada por los japoneses como jishin-yoi, que, según explicaron los investigadores Yasuyuki Nomura y Teru Toi en la revista científica Equilibrium Research, hace referencia al “síndrome de vértigo post-terremoto”.
Esto básicamente hace “referencia a una condición médica en la que las personas experimentan una sensación de movimiento, de mareo, balanceo, inestabilidad, como si se tratara de un terremoto, incluso si no lo hay”. Las más vulnerables, añadieron, son aquellas personas sensibles al movimiento o aquellas que tienen antecedentes de vértigo.
A esta conclusión llegaron los investigadores luego de estudiar a varios pacientes del terremoto que se reportó en Japón el 11 de marzo de 2011 y que tuvo una magnitud de 9. Reiteran que es un fenómeno frecuente por lo fuerte del movimiento de la Tierra y por las réplicas que se reportan después. (Puede leer: Cosas que debe y no debe hacer cuando tiembla)
En otro estudio, publicado en la revista Nature, los investigadores reunieron más pistas de esta condición. Señalaron que los sobrevivientes a estos fenómenos se pueden sentir mareados, principalmente cuando están sentados dentro de una casa o edificio.
Pero, ¿por qué da esta sensación? Los investigadores aseguraron que ocurre cuando el mecanismo oculto está relacionado con la estimulación del sistema vestibular en el oído. Este sistema, cabe recordar, es el que está relacionado con el equilibrio y el control del espacio.
En palabras más sencillas, explica en entrevista con Noticias Caracol Henry Martínez, otorrinolaringólogo, lo que pasa es que en esta zona se da “una estimulación de la parte interna del oído y esta hiperestimulación provoca estos síntomas de mareo constante, balanceo, como si se moviera literalmente el piso, así no esté pasando”.
Esto puede provocarse porque “se presentan trastornos emocionales como el trastorno de estrés postraumático (TEPT), así como la ansiedad y el estrés provocados por el desastre”, añadieron los investigadores.
En el estudio, advirtieron que el mareo generalmente se asocia con lesiones neurales en dos niveles diferentes, “que van desde el órgano sensorial distal del equilibrio hasta el centro cortical a través de los núcleos del tronco encefálico”. (Lea también: Réplicas de temblor: ¿qué son y por qué suceden?)
Martínez cuenta que entre las recomendaciones que se debe tener en cuenta están tratar de mantener la calma, manejar la respiración y guardar reposo, “pues es un síntoma que se va a resolver con el tiempo. Es normal tener unos tres a cinco días con la sensación”, anota. Pero, advierte, si persiste es mejor consultar a un especialista antes de automedicarse.
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