Estudio en ratones da nuevas pistas para tratar la disfunción eréctil

Un grupo de investigadores encontró los dos tipos de células en el pene que juegan un rol fundamental en generar y mantener una erección. Este fue el hallazgo de un estudio realizado en ratones y descrito en la revista Science. (Lea: Denuncian escasez de misoprostol, pero Profamilia dice que tiene unidades disponibles)

El profesor Ji-Kan Ryu, investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad de Inha y autor del estudio, explicó que estos resultados pueden ser importantes para comprender la disfunción eréctil en hombres de edad avanzada. Se debe a que “los mecanismos de la erección del pene son similares en ratones y humanos”.

Para esta investigación, los científicos se centraron en estudiar los fibroblastos, que son las células que se encargan de producir tejido conectivo y que son las más abundantes en los cuerpos cavernosos, que son las columnas de tejido esponjoso que atraviesa el eje del pene.

En el caso de los ratones, que estaban genéticamente modificados, los científicos identificaron dos grupos de fibroblastos que están al lado de los vasos sanguíneos en los cuerpos cavernosos. En este caso, alteraron la actividad de estos fibroblastos y así podían entender cómo se producían los cambios en el flujo sanguíneo hasta el pene. (Puede leer: Preocupación de Brasil por aumento de casos de dengue: van más de 140.000 en 2024)

Las pruebas revelaron que estas células son las encargadas de desencadenar erecciones y lo hacen al absorber una hormona que mantiene el pene flácido. Se trata de la norepinefrina. “Cuando esta se almacena, las células ayudan a que los vasos sanguíneos relevantes se dilaten”, reseñan en el documento.

También encontraron que la capacidad que tenían estas células de realizar esta función podría cambiar de acuerdo a la concentración en el tejido del pene. Por ejemplo, entre más fibroblastos haya, pues, mucho más sólido será el resultado.

“En comparación con los ratones jóvenes, los ratones viejos tenían menos fibroblastos. Lo que sugiere que el envejecimiento puede contribuir a la disfunción eréctil al reducir la cantidad de estas células con el tiempo”, aclararon los investigadores.

Asimismo, encontraron que había un interruptor molecular dentro de los fibroblastos, el cual se conoce como “vía de señalización Notch”. “Activar estos interruptores en los fibroblastos podría abrir nuevas alternativas terapéuticas para el tratamiento de la disfunción eréctil”, añadieron.

En la actualidad, el viagra es el medicamento más común para tratar la disfunción eréctil. Sin embargo, únicamente funciona hasta en un 30% de los pacientes y no la pueden usar aquellas personas que usen cierto tipo de medicinas o que tengan alguna condición médica específica. (Le puede interesar: Quieren que los cigarrillos desaparezcan de Instagram, Netflix y Facebook)

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Para esta investigación, los científicos se centraron en estudiar los fibroblastos, que son las células que se encargan de producir tejido conectivo y que son las más abundantes en los cuerpos cavernosos, que son las columnas de tejido esponjoso que atraviesa el eje del pene.

En el caso de los ratones, que estaban genéticamente modificados, los científicos identificaron dos grupos de fibroblastos que están al lado de los vasos sanguíneos en los cuerpos cavernosos. En este caso, alteraron la actividad de estos fibroblastos y así podían entender cómo se producían los cambios en el flujo sanguíneo hasta el pene. (Puede leer: Preocupación de Brasil por aumento de casos de dengue: van más de 140.000 en 2024)

Las pruebas revelaron que estas células son las encargadas de desencadenar erecciones y lo hacen al absorber una hormona que mantiene el pene flácido. Se trata de la norepinefrina. “Cuando esta se almacena, las células ayudan a que los vasos sanguíneos relevantes se dilaten”, reseñan en el documento.

También encontraron que la capacidad que tenían estas células de realizar esta función podría cambiar de acuerdo a la concentración en el tejido del pene. Por ejemplo, entre más fibroblastos haya, pues, mucho más sólido será el resultado.

“En comparación con los ratones jóvenes, los ratones viejos tenían menos fibroblastos. Lo que sugiere que el envejecimiento puede contribuir a la disfunción eréctil al reducir la cantidad de estas células con el tiempo”, aclararon los investigadores.

Asimismo, encontraron que había un interruptor molecular dentro de los fibroblastos, el cual se conoce como “vía de señalización Notch”. “Activar estos interruptores en los fibroblastos podría abrir nuevas alternativas terapéuticas para el tratamiento de la disfunción eréctil”, añadieron.

En la actualidad, el viagra es el medicamento más común para tratar la disfunción eréctil. Sin embargo, únicamente funciona hasta en un 30% de los pacientes y no la pueden usar aquellas personas que usen cierto tipo de medicinas o que tengan alguna condición médica específica. (Le puede interesar: Quieren que los cigarrillos desaparezcan de Instagram, Netflix y Facebook)

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