“Hay que cambiar la narrativa del sobrepeso y la obesidad en Colombia”: Unicef
Lina Zapata Vélez, oficial de salud y nutrición de UNICEF en Colombia, analiza la magnitud del problema del sobrepeso y la obesidad en el país y la necesidad de un enfoque de derechos para abordar este desafío de salud pública. Según Zapata Vélez, “La nutrición adecuada es un asunto de derechos, no solamente de visión del consumidor”, y es esencial para garantizar un futuro saludable para la niñez colombiana.
La Corte Constitucional respaldó ayer el impuestos a las bebidas azucaradas, con una votación unánime de 8-0, permitiendo que la medida entre en vigencia a partir del próximo 1 de noviembre A pesar de las objeciones presentadas por abogados y críticos que argumentaban que la medida era “irrazonable”, el tribunal concluyó que esta imposición fiscal era razonable y proporcionada para proteger el interés público al desincentivar el consumo de productos que podrían afectar la salud de la población. Este impuesto es una de las medidas que Colombia ha desarrollado en los últimos años, junto al etiquetado de los alimentos, para combatir algo que la OMS ha llamado “el mayor problema de salud pública de la humanidad”: la obesidad y el sobrepeso.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
La Corte Constitucional respaldó ayer el impuestos a las bebidas azucaradas, con una votación unánime de 8-0, permitiendo que la medida entre en vigencia a partir del próximo 1 de noviembre A pesar de las objeciones presentadas por abogados y críticos que argumentaban que la medida era “irrazonable”, el tribunal concluyó que esta imposición fiscal era razonable y proporcionada para proteger el interés público al desincentivar el consumo de productos que podrían afectar la salud de la población. Este impuesto es una de las medidas que Colombia ha desarrollado en los últimos años, junto al etiquetado de los alimentos, para combatir algo que la OMS ha llamado “el mayor problema de salud pública de la humanidad”: la obesidad y el sobrepeso.
Hace unos días, de hecho, la UNICEF (la agencia de la ONU para la niñez y la adolescencia) presentó dos estudios relevantes sobre el impacto de la obesidad en Colombia. La primera de esas investigaciones reveló que, entre 2015 y 2020, el sobrepeso y la obesidad generaron una pérdida significativa de años de vida saludable en niños, niñas y adolescentes, así como en mujeres gestantes. Esto se tradujo en un costo anual promedio de aproximadamente $ 2.4 billones de pesos. Además, se destacó que las familias asumen una carga económica sustancial en el tratamiento de estas condiciones o de las enfermedades que provocan.
Puede ver: Así funcionará el impuesto a las bebidas azucaradas (y qué tiene que ver con la salud)
El segundo estudio, realizado en colaboración con la Universidad EAFIT, puso de manifiesto la influencia de la publicidad de alimentos no saludables en la población joven. A pesar de regulaciones existentes en Colombia, se encontraron mensajes persuasivos en entornos escolares y lugares de compra, así como en medios digitales y redes sociales, que a menudo utilizaban elementos emocionales para conectar con los niños, niñas y adolescentes. En medio de este complejo panorama y de la necesidad imperiosa de tomar medidas para cambiarlo, Lina Zapata Vélez, oficial de salud y nutrición de UNICEF en Colombia, respondió algunas preguntas sobre el tema, en una entrevista realizada antes de que se conociera la decisión de la Corte.
¿Cuál es la magnitud del problema de la obesidad y sobrepeso infantil en Colombia?
El sobrepeso infantil y adolescente y de mujeres gestantes es un asunto de salud pública. Nos concierne a todos. Es de salud pública porque implica costos y cargas no solamente para el sistema de salud, sino también para la sociedad y las familias. Es importante empezar a identificar desde el inicio de la vida la importancia de una nutrición adecuada, que sea rica en nutrientes, que prevenga esas enfermedades crónicas no transmisibles, las cuales, por lo general, están asociadas a la alimentación y son una de las principales causas de muerte, no solo en Colombia, sino en el mundo.
Es importante que el sobrepeso y la obesidad en el país baje su curva de crecimiento y que no sea una tendencia imparable La última encuesta de situación nutricional en Colombia nos señala que en promedio el 25% de niñas y niñas entre 5 y 12 años tienen sobrepeso u obesidad y el 18% de adolescentes entre 12 y 17 años. Esto implica en el curso de vida que vamos a identificar jóvenes y jóvenes adultos con enfermedades crónicas donde se les resta años de vida saludable.
Hay una discusión en Colombia muy vigente sobre la promoción y la prevención de la salud. ¿Cómo el sistema de salud puede evitar el sobrepeso y la obesidad?
Siempre hay que desarrollar acciones de promoción y actuar de la manera más temprana posible en el curso de vida. No solamente compete al sistema de salud, porque no es solamente se trata de un diagnóstico de enfermedad, sino que implica la calidad de vida, la participación social, la productividad, nos implica a todos como sociedad. Desde esa visión, las acciones de prevención deben ser efectivas y basadas en la evidencia. Hay unos marcos y unas regulaciones internacionales que ya han mostrado ser muy efectivos en la lucha de sobrepeso y la obesidad infantil y adolescente, y por fortuna en Colombia estamos yendo hacia allá. Uno es el etiquetado frontal de comestibles ultraprocesados, otro es el impuesto a las bebidas azucaradas.
Puede ver: Preguntas sobre la llegada a Colombia de “nuevas” vacunas para el covid-19
También se deben desarrollar intervenciones en los entornos donde sucede la vida, que es la familia la comunidad, la escuela, con desarrollos metodológicos acordes al grupo poblacional. Entre todos y todas tenemos una tarea importantísima para que la promoción de un estilo de vida saludable y la prevención de sobrepeso y obesidad empiece a revertir la curva que tenemos tanto de carga, como de costos por esta situación. Las enfermedades por la alimentación son altamente prevenibles y es una tarea entre todos y todas de lograrlo: sector privado, las industrias, la sociedad civil, el gobierno, padres, madres, cuidadores, la cooperación internacional, todos, debemos crear alianzas y coaliciones para poder desarrollar acciones que transformen esos entornos obesogénicos.
¿Qué retos tiene la aplicación de este tipo de estrategias de forma eficaz en lugares rurales en comparación con la ciudad?
Toda intervención en salud pública debe tener sensibilidad territorial y un enfoque poblacional. No pueden ser camisas de fuerza o medidas estándar para todas las poblaciones, porque las características y los determinantes de los entornos en San Andrés, por ejemplo, o en las comunidades indígenas o rurales dispersas, se diferencian de unas dinámicas mucho más urbanas. Se trata de analizar esas situaciones y empezar a identificar cuáles son los factores causantes, cuáles son esos determinantes más estructurales para lograr afectarlos en un enfoque sistémico
Casi siempre se vincula sobrepeso y obesidad al individuo. Nuestra invitación es que se aborde desde una narrativa de derechos y una narrativa sistémica donde todos y todas tenemos responsabilidad para que garanticemos a niños y niñas una nutrición saludable.
¿Cómo debe darse el diálogo con la industria y sus conflictos de interés, para trabajar con ellos?
Es importante tener espacios de conversación con las contrapartes, de construcción conjunta, previo a las regulaciones. Hay que sensibilizar desde la evidencia, por ejemplo, con la presentación de estos resultados de estudios de UNICEF. Hay que dimensionar el impacto que tiene este problema en las dinámicas de cada uno de los sectores, para permitir una sinergia que movilice una agenda que no solo venga del sector público, sino también que parta de una conciencia general, de una ética y una necesidad de garantizar derechos. Lo que hay que tener claro es que este es un tema de derechos. Hay que tener diálogos intersectoriales donde los derechos de los niños sean el centro de la discusión, y no el interés de cada una de las partes.
Para UNICEF una adecuada nutrición empieza desde el inicio de la vida. Para nosotros es fundamental las características y la calidad de la alimentación que reciben las mujeres gestantes, pero también apoyamos y promocionamos la práctica de la lactancia materna como un factor decisivo en la prevención de la malnutrición. Lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses y de manera complementaria hasta los 2 años o más. Apoyamos al Gobierno Nacional en la creación de estrategias orientadas al entorno laboral, la creación de salas amigas de la lactancia materna y también generamos campañas de comunicación y sensibilización sobre este tema. Para nutrición en primera infancia también es fundamental las intervenciones desde los espacios de educación inicial con estrategias de estilos de vida saludables.
Puede ver: El Invima tiene otro director encargado y ya completa más de un año sin director fijo
Apoyamos políticas y normativas que logren implementarse en pro de los derechos de la niñez, como la política de regulación del etiquetado frontal de productos ultraprocesados, y disponemos de espacios para crear hojas de rutas intersectoriales con evidencia para esta toma de decisiones
¿Qué hace falta para que en Colombia podamos ofrecerles a los niños entornos más saludables?
Cambiar la narrativa del sobrepeso y la obesidad, hoy muy asociada al individuo, y vincularla con un enfoque de sistema. Hay que analizar los sistemas alimentarios en los cuales crecen, desarrollan y se socializan nuestros niños y niñas y adolescentes, porque allí hay muchos actores, sectores y dinámicas, en donde cada uno tiene su interés y en donde hay que volver a poner a la niñez en el centro. La nutrición adecuada es un asunto de derechos, no solamente de visión del consumidor.