Las olas de covid-19 en China podrían volver cada seis meses
De aquí hasta el final de junio, el país asiático podría registrar hasta 65 millones de personas infectadas por covid-19 cada semana, a causa de un nuevo brote causado por una subvariante altamente infecciosa de ómicron.
En China, hasta 65 millones de personas podrían infectarse con covid-19 semanalmente hasta que acabe junio. Así lo anunció Nanshan Zhong, un destacado neumólogo chino, tras el inicio de un nuevo brote de contagios en el país asiático.
Desde abril, China ha estado enfrentando un repunte en el número de casos de la enfermedad, principalmente impulsados por una subvariante altamente infecciosa de ómicron, identificada por primera vez en India en agosto de 2022. Esta se llama XBB.1.5, también conocida en algunos círculos como variante ‘Kraken’.
Aunque en mayo los modelos de Zhong habían estimado que la variante causaría hasta 40 millones de infecciones semanales durante ese mes, ese número subió a 65 millones para junio. Las cifras van en contra de la predicción de autoridades chinas, quienes habían indicado que el pico de este brote se alcanzaría el mes pasado. (También puede leer: Es valioso tener mejores hospitales y EPS, pero su salud también depende de su barrio)
A pesar de que hace más o menos un mes la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el fin de la emergencia sanitaria internacional por covid-19, expertos indicaron que, en China, se puede esperar que tengan lugar brotes frecuentes.
Ali Mokdad, epidemiólogo del Instituto de Métricas y Evaluación Sanitarias de la Universidad de Washington en Seattle, indicó al portal especializado Nature que: “Por desgracia, una nueva realidad con este virus es que tendremos infecciones repetidas. El temor es que este virus produzca una nueva variante que pueda competir con las actuales y sea más grave”.
Investigadores estiman que lo brotes se pueden presentar cada seis meses, ahora que China levantó todas sus medidas contra el covid-19 y variantes más infecciosas, como la XBB.1.5, circulan ampliamente. El último ciclo de infecciones en el país asiático se presentó hacia finales del año pasado, justo después de que el país le diera fin a la estrategia de covid cero.
Esta se basó en ordenar pruebas masivas, cerrar ciudades como Shanghái durante meses o evitar aglomeraciones. La idea era eliminar el virus, más que controlarlo. Por eso, una vez se levantaron las restricciones, más personas se infectaron, pues no habían adquirido inmunidad. (Le puede interesar: El Princesa de Asturias de Investigación premió estudios en bacterias resistentes)
Ese brote en diciembre infectó al menos al 85 % de la población, según Zhong, lo que habría otorgado inmunidad, sumada a la de las vacunas, aplicadas al 90 % de la población de China. Pero ahora, que la inmunidad está disminuyendo, la subvariante de ómicron puede resultar especialmente infecciosa.
Mokdad explicó a Nature que un brote como el de China se podría ver en varios países, con la misma subvariante, pero que el tamaño del país asiático le da otras dimensiones a la situación actual. Por ejemplo, afirmó que, aunque la XBB no ha causado un aumento importante de hospitalizaciones y muertes, la cifra de infecciones podría ejercer presión sobre el sistema sanitario chino.
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En China, hasta 65 millones de personas podrían infectarse con covid-19 semanalmente hasta que acabe junio. Así lo anunció Nanshan Zhong, un destacado neumólogo chino, tras el inicio de un nuevo brote de contagios en el país asiático.
Desde abril, China ha estado enfrentando un repunte en el número de casos de la enfermedad, principalmente impulsados por una subvariante altamente infecciosa de ómicron, identificada por primera vez en India en agosto de 2022. Esta se llama XBB.1.5, también conocida en algunos círculos como variante ‘Kraken’.
Aunque en mayo los modelos de Zhong habían estimado que la variante causaría hasta 40 millones de infecciones semanales durante ese mes, ese número subió a 65 millones para junio. Las cifras van en contra de la predicción de autoridades chinas, quienes habían indicado que el pico de este brote se alcanzaría el mes pasado. (También puede leer: Es valioso tener mejores hospitales y EPS, pero su salud también depende de su barrio)
A pesar de que hace más o menos un mes la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el fin de la emergencia sanitaria internacional por covid-19, expertos indicaron que, en China, se puede esperar que tengan lugar brotes frecuentes.
Ali Mokdad, epidemiólogo del Instituto de Métricas y Evaluación Sanitarias de la Universidad de Washington en Seattle, indicó al portal especializado Nature que: “Por desgracia, una nueva realidad con este virus es que tendremos infecciones repetidas. El temor es que este virus produzca una nueva variante que pueda competir con las actuales y sea más grave”.
Investigadores estiman que lo brotes se pueden presentar cada seis meses, ahora que China levantó todas sus medidas contra el covid-19 y variantes más infecciosas, como la XBB.1.5, circulan ampliamente. El último ciclo de infecciones en el país asiático se presentó hacia finales del año pasado, justo después de que el país le diera fin a la estrategia de covid cero.
Esta se basó en ordenar pruebas masivas, cerrar ciudades como Shanghái durante meses o evitar aglomeraciones. La idea era eliminar el virus, más que controlarlo. Por eso, una vez se levantaron las restricciones, más personas se infectaron, pues no habían adquirido inmunidad. (Le puede interesar: El Princesa de Asturias de Investigación premió estudios en bacterias resistentes)
Ese brote en diciembre infectó al menos al 85 % de la población, según Zhong, lo que habría otorgado inmunidad, sumada a la de las vacunas, aplicadas al 90 % de la población de China. Pero ahora, que la inmunidad está disminuyendo, la subvariante de ómicron puede resultar especialmente infecciosa.
Mokdad explicó a Nature que un brote como el de China se podría ver en varios países, con la misma subvariante, pero que el tamaño del país asiático le da otras dimensiones a la situación actual. Por ejemplo, afirmó que, aunque la XBB no ha causado un aumento importante de hospitalizaciones y muertes, la cifra de infecciones podría ejercer presión sobre el sistema sanitario chino.
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