Lo bueno y lo malo del nuevo POS

El anuncio lo hizo con entusiasmo el propio presidente Juan Manuel Santos en diciembre pasado: el Plan Obligatorio de Salud (POS), que contiene todos los servicios y medicamentos a los que tienen derecho los colombianos gratuitamente, fue ampliado con 70 nuevos tratamientos de “gran importancia”. Luego de dos meses del anuncio, el Observatorio del Medicamento de la Federación Médica Colombiana revela un análisis detallado sobre lo bueno y lo malo del nuevo POS.

Por un lado, aplauden la inclusión de biofármacos para el tratamiento de la artritis reumatoide y señalan que es quizá la decisión “más interesante” que se tomó. El presidente Santos también había resaltado este hecho explicando que el nuevo POS “incluye medicamentos como el Adalimumab, que es uno de los más costosos y uno de los más requeridos por estos pacientes”.

Sin embargo, la Federación Médica hace también unas críticas muy puntuales sobre tratamientos que fueron incluidos en el POS y cuya implementación es muy limitada, debido a las mismas reglas del juego que plantea la nueva norma. Según ellos, existen indicaciones “innecesarias” y “drásticas” que están restringiendo el uso de algunos de los nuevos tratamientos, y que incluso esas indicaciones pueden ser “discriminatorias e ilegales”.

El ejemplo más claro de esto, según la Federación, es un medicamento llamado palivizumab utilizado para reducir en los niños el riesgo de infección por el virus sincitial respiratorio humano (VSR). La nueva norma establece que este fármaco sólo podrá utilizarse en “recién nacidos prematuros” pero la Federación Médica señala que también está indicado para menores de 2 años en condiciones especiales. En este caso, lo que se preguntan los expertos es: “¿Por qué y para qué exigir el prerrequisito de ‘recién nacido prematuro’ que convierte la norma en discriminatoria e incluso ilegal? ¿No resultaba más simple y correcto incluir el principio activo con sus indicaciones mundialmente reconocidas?

Otro ejemplo de esas indicaciones “innecesarias” o “drásticas” que plantea el Observatorio del Medicamento, son los fármacos aripiprazol y quetiapina, que fueron incluidos en el nuevo POS para tratar el “trastorno afectivo bipolar en terapia combinada con estabilizadores del ánimo”. El problema está en que, según la Federación, se dejó por fuera la indicación principal de este medicamento: la esquizofrenia. “Desde la perspectiva científica, excluye las indicaciones más importantes de los medicamentos incluidos. Desde la perspectiva de los derechos de los pacientes, genera exclusiones que son discriminatorias y desde la perspectiva operativa y económica, genera zonas grises y complejidades propicias para prácticas perversas en los recobros”, argumenta la Federación Médica.

Otro caso: se aplaude que se hayan incluido en el nuevo POS cuatro medicamentos oncológicos para tratar los tipos de cáncer que más impactan a los colombianos (mama, gástrico, próstata, colon), pero se critica que se haya limitado su uso sólo para estos males cuando las mismas autoridades sanitarias lo han autorizado para tratar otras enfermedades. “Son contradictorias e ilógicas las inclusiones tan restrictivas”, dice el informe de la Federación.

Y así, los ejemplos continúan. La conclusión del Observatorio del Medicamento es que la actualización del Plan Obligatorio de Salud utiliza una metodología “que es cuestionable y en los hechos genera exclusiones y ‘zonas grises’ que inducen prácticas perversas en los recobros al Fosyga”. Es decir, les deja puertas abiertas a las EPS que tienen que recobrarle al Gobierno (a través del Fosyga) los medicamentos y servicios que les prestaron a sus pacientes a pesar de no estar incluidos en el POS.

Lo que sí es cierto es que, como lo señaló el presidente Santos en su momento, este nuevo POS incluye “tratamientos importantes y procedimientos importantes que no estaban incluidos y que las EPS negaban a sus usuarios, que tenían que acudir a tutelas para obtenerlos”. Sin embargo, las nuevas normas no parecen estar tan claras según el informe de la Federación Médica que remata diciendo que “esta Actualización POS 2013 no puede considerarse ‘integral’”.

El anuncio lo hizo con entusiasmo el propio presidente Juan Manuel Santos en diciembre pasado: el Plan Obligatorio de Salud (POS), que contiene todos los servicios y medicamentos a los que tienen derecho los colombianos gratuitamente, fue ampliado con 70 nuevos tratamientos de “gran importancia”. Luego de dos meses del anuncio, el Observatorio del Medicamento de la Federación Médica Colombiana revela un análisis detallado sobre lo bueno y lo malo del nuevo POS.

Por un lado, aplauden la inclusión de biofármacos para el tratamiento de la artritis reumatoide y señalan que es quizá la decisión “más interesante” que se tomó. El presidente Santos también había resaltado este hecho explicando que el nuevo POS “incluye medicamentos como el Adalimumab, que es uno de los más costosos y uno de los más requeridos por estos pacientes”.

Sin embargo, la Federación Médica hace también unas críticas muy puntuales sobre tratamientos que fueron incluidos en el POS y cuya implementación es muy limitada, debido a las mismas reglas del juego que plantea la nueva norma. Según ellos, existen indicaciones “innecesarias” y “drásticas” que están restringiendo el uso de algunos de los nuevos tratamientos, y que incluso esas indicaciones pueden ser “discriminatorias e ilegales”.

El ejemplo más claro de esto, según la Federación, es un medicamento llamado palivizumab utilizado para reducir en los niños el riesgo de infección por el virus sincitial respiratorio humano (VSR). La nueva norma establece que este fármaco sólo podrá utilizarse en “recién nacidos prematuros” pero la Federación Médica señala que también está indicado para menores de 2 años en condiciones especiales. En este caso, lo que se preguntan los expertos es: “¿Por qué y para qué exigir el prerrequisito de ‘recién nacido prematuro’ que convierte la norma en discriminatoria e incluso ilegal? ¿No resultaba más simple y correcto incluir el principio activo con sus indicaciones mundialmente reconocidas?

Otro ejemplo de esas indicaciones “innecesarias” o “drásticas” que plantea el Observatorio del Medicamento, son los fármacos aripiprazol y quetiapina, que fueron incluidos en el nuevo POS para tratar el “trastorno afectivo bipolar en terapia combinada con estabilizadores del ánimo”. El problema está en que, según la Federación, se dejó por fuera la indicación principal de este medicamento: la esquizofrenia. “Desde la perspectiva científica, excluye las indicaciones más importantes de los medicamentos incluidos. Desde la perspectiva de los derechos de los pacientes, genera exclusiones que son discriminatorias y desde la perspectiva operativa y económica, genera zonas grises y complejidades propicias para prácticas perversas en los recobros”, argumenta la Federación Médica.

Otro caso: se aplaude que se hayan incluido en el nuevo POS cuatro medicamentos oncológicos para tratar los tipos de cáncer que más impactan a los colombianos (mama, gástrico, próstata, colon), pero se critica que se haya limitado su uso sólo para estos males cuando las mismas autoridades sanitarias lo han autorizado para tratar otras enfermedades. “Son contradictorias e ilógicas las inclusiones tan restrictivas”, dice el informe de la Federación.

Y así, los ejemplos continúan. La conclusión del Observatorio del Medicamento es que la actualización del Plan Obligatorio de Salud utiliza una metodología “que es cuestionable y en los hechos genera exclusiones y ‘zonas grises’ que inducen prácticas perversas en los recobros al Fosyga”. Es decir, les deja puertas abiertas a las EPS que tienen que recobrarle al Gobierno (a través del Fosyga) los medicamentos y servicios que les prestaron a sus pacientes a pesar de no estar incluidos en el POS.

Lo que sí es cierto es que, como lo señaló el presidente Santos en su momento, este nuevo POS incluye “tratamientos importantes y procedimientos importantes que no estaban incluidos y que las EPS negaban a sus usuarios, que tenían que acudir a tutelas para obtenerlos”. Sin embargo, las nuevas normas no parecen estar tan claras según el informe de la Federación Médica que remata diciendo que “esta Actualización POS 2013 no puede considerarse ‘integral’”.