En medio de una celebración de cumpleaños, Angie Quintero, de 29 años, sufrió quemaduras de primer y segundo grado. El accidente sucedió cuando una de sus amigas le regaló una torta con velas y globos, pero, al momento de encenderlas, los globos estallaron en su cara. “Resulta que no eran helio, sino hidrógeno artesanal, que uno nunca se imagina que puede ser tan peligroso”, dijo.
El caso de Quintero evidencia la alarma que hizo la Cámara de Gases Industriales y Medicinales de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI) este 25 de julio. Según la entidad, el aumento de ventas de globos con hidrógeno artesanal, en lugar de helio, genera preocupación por las quemaduras que podrían ocasionarle a la ciudadanía, pues, al entrar en contacto con el calor o el fuego, son altamente inflamables hasta el punto de provocar explosiones e incendios, como le ocurrió a Quintero.
De hecho, y según cifras del primer semestre de 2024, la compra de hidrógeno artesanal aumentó un 50 % en las tiendas de detalles y piñaterías. “Actualmente en nuestro país, el 80 % de los globos decorativos están siendo inflados de esa manera, a pesar de que los únicos gases autorizados con el aire y el helio, según la Resolución 53026 de 2015 de la Superintendencia de Industria y Comercio, que además prohíbe el uso de hidrógeno artesanal”, dijo Ingrid Marcela Reyes, Directora de la Cámara de Gases Industriales y Medicinales de la ANDI.
La entidad explica que esta situación podría presentarse ya que muchos comerciantes prefieren utilizar este gas porque es mucho más económico que el helio.
Departamentos como Cundinamarca, Antioquia, Santander y Meta son algunos en los que se encuentran establecimientos que venden globos inflados con hidrógeno. En Bogotá, por ejemplo, la situación es alarmante: de cada 10 cilindros que se utilizan, 8 son de hidrógeno y 2 de helio, según cifras de la Cámara de Gases Industriales.
¿Cómo identificar si los globos son de hidrógeno casero?
Reyes explicó que distinguir entre el helio y el hidrógeno suele ser complicado. Sin embargo, la ciudadanía puede seguir algunos pasos para hacer la distinción a la hora de comprar globos decortativos:
- Exigir el certificado del gas utilizado y el precio. “Sumas muy bajas indican que el gas usado es de fuente artesanal o informal y que el cilindro probablemente se encuentra sin mantenimiento o ha sido robado”, manifestó Reyes.
- Pedir la factura del producto. Quienes venden hidrógeno casero no pueden realizar la facturación, debido a que su comercialización no está permitida.
- Adquirir los globos en establecimientos de confianza, que brinden todo el soporte técnico de ser necesario.
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