ONIC confirma el primer fallecimiento de un indígena por COVID-19 en Colombia
La Organización Nacional Indígena de Colombia confirmó este jueves, en su último boletín, el fallecimiento de un indígena del pueblo Yanakuna por coronavirus. Se trata de el primer caso confirmado y se presentó en San José de Isnos, Huila.
- Redacción Vivir
Desde hace varias semanas, la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) ha realizado un seguimiento especial a la situación de los Pueblos indígenas del país frente a la pandemia. Según sus reportes, actualmente hay 249.673 familias indígenas en alto riesgo de contagio, debido a la cercanía a centros poblados con casos confirmados. (Le recomendamos: Indígenas, una población vulnerable que también lucha contra el coronavirus)
En el reporte de este jueves se confirmó el primer fallecimiento de un indígena por coronavirus en el territorio colombiano. Se trata de un integrante del pueblo Yanakuna, cuyo resguardo se encuentra ubicad en San José de Isnos, en Huila.
También aseguraron que la preocupación se extiende en los territorios campesinos e indígenas de dicho sector, ya que “no hubo protocolos de protección ni de aislamiento adecuados antes, durante, ni después del deceso de la víctima; temen porque al sepelio asistieron comunidades indígenas habitantes de la zona”. Al cierre de este último boletín, indicaron, la Secretaría de Salud estableció el cerco epidemiológico y practicó las pruebas a las personas que tuvieron contacto con el indígena que falleció.
Entre otros casos confirmados en comunidades indígenas se encuentran los de 2 yukpas, un zenu, 3 pastos y 1 yanakuna. Además, explicaron que se sigue haciendo un seguimiento especial a 90 indígenas del pueblo Embera Dóbida, del resguardo de Peñas Blancas en Riosucio, Chocó, donde se está a la espera el informe de la brigada de salud.
“Continuamos exigiendo que se realicen pruebas masivas territorializadas y que se apoye a las autoridades indígenas en el monitoreo y las brigadas de salud propias que se están implementando en algunas comunidades y que se necesitan realizar en todas, para la detección temprana de personas contagiadas sintomáticas y asintomáticas y poder contener la expansión del virus”, aseguran, resaltando también que a la pandemia se le suman otros factores como el recrudecimiento del conflicto armado y la falta de garantías alimentarias, de bioseguridad y agua potable.
Desde hace varias semanas, la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) ha realizado un seguimiento especial a la situación de los Pueblos indígenas del país frente a la pandemia. Según sus reportes, actualmente hay 249.673 familias indígenas en alto riesgo de contagio, debido a la cercanía a centros poblados con casos confirmados. (Le recomendamos: Indígenas, una población vulnerable que también lucha contra el coronavirus)
En el reporte de este jueves se confirmó el primer fallecimiento de un indígena por coronavirus en el territorio colombiano. Se trata de un integrante del pueblo Yanakuna, cuyo resguardo se encuentra ubicad en San José de Isnos, en Huila.
También aseguraron que la preocupación se extiende en los territorios campesinos e indígenas de dicho sector, ya que “no hubo protocolos de protección ni de aislamiento adecuados antes, durante, ni después del deceso de la víctima; temen porque al sepelio asistieron comunidades indígenas habitantes de la zona”. Al cierre de este último boletín, indicaron, la Secretaría de Salud estableció el cerco epidemiológico y practicó las pruebas a las personas que tuvieron contacto con el indígena que falleció.
Entre otros casos confirmados en comunidades indígenas se encuentran los de 2 yukpas, un zenu, 3 pastos y 1 yanakuna. Además, explicaron que se sigue haciendo un seguimiento especial a 90 indígenas del pueblo Embera Dóbida, del resguardo de Peñas Blancas en Riosucio, Chocó, donde se está a la espera el informe de la brigada de salud.
“Continuamos exigiendo que se realicen pruebas masivas territorializadas y que se apoye a las autoridades indígenas en el monitoreo y las brigadas de salud propias que se están implementando en algunas comunidades y que se necesitan realizar en todas, para la detección temprana de personas contagiadas sintomáticas y asintomáticas y poder contener la expansión del virus”, aseguran, resaltando también que a la pandemia se le suman otros factores como el recrudecimiento del conflicto armado y la falta de garantías alimentarias, de bioseguridad y agua potable.