Miles de alérgicos a la carne por la picadura de una garrapata
Hasta 450.000 personas en Estados Unidos padecerían el síndrome alfa-gal que se transmite por la picadura de una garrapata y que genera alergia a un azúcar que se encuentra en la carne de los mamíferos, así como en algunos productos elaborados a partir de estos animales.
Hace algunos días, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), —la agencia nacional de salud pública de los Estados Unidos—, publicó dos informes en los que alertan de un importante problema de salud que están enfrentando, pero que ha pasado desapercibido en medios de comunicación y, en general, en la sociedad estadounidense. (Puede leer: Casos de anemia están aumentando en mujeres y niños, pero disminuyen en los hombres)
En palabras de Ann Carpenter, epidemióloga y autora principal de uno de los estudios publicados por los CDC, se trata del síndrome alfa-gal que tendría “consecuencias potencialmente graves para la salud que pueden durar toda la vida para algunos pacientes”. Pero, ¿qué es el síndrome alfa-gal, cómo se contrae y qué genera?
Lo primero que aclaran los CDC es que el alfa gal es un azúcar que puede encontrarse en la carne de mamíferos como los cerdos, los terneros o los corderos, por mencionar algunos, así como en productos elaborados a partir de estos animales, como la gelatina, la leche de vaca y otros productos lácteos. (También puede leer: Los municipios donde han muerto más personas por mordeduras de serpientes en 2023)
En ese sentido, el síndrome alfa-gal (SGA, por sus siglas en inglés) es una “afección alérgica grave que algunas personas experimentan tras consumir alimentos o productos que contienen alfa-gal”, apunta la agencia de salud pública de EE. UU.
De acuerdo con los CDC, entre 2010 y 2022, más de 110.000 personas han contraído el SGA en ese país. Sin embargo, debido a que el diagnóstico requiere de una prueba y de un examen clínico, los Centros estiman que, en realidad, cerca de 450.000 personas padecerían del síndrome. (Puede interesarle: 40 años del VIH: surge una nueva esperanza pero aún hay retos)
Lo particular de este síndrome, como destacan los investigadores, es cómo se contrae. “Cada vez hay más pruebas que sugieren que el SGA se asocia principalmente a la picadura de la garrapata estrella solitaria en Estados Unidos, pero no se han descartado otros tipos de garrapatas”, señalan los CDC.
Las personas que contraen el SGA empiezan a padecer los síntomas entre 2 y 6 horas después de haber consumido los alimentos que contienen el azúcar. Entre estos, destacan desde la erupción cutánea con picor, náuseas y vómitos, ardor en el estómago, diarrea, hasta descenso de la tensión arterial, hinchazón de labios, garganta, lengua o párpados. (Puede leer: Siete de cada 10 personas están protegidas parcialmente contra el tabaco: OMS)
Sin embargo, los problemas con este síndrome no acaba con el contagio de las personas. Como reconoce otra investigación adelanta por expertos adscritos a los CDC, los médicos de ese país no conocen los síntomas del síndrome y un tercio de los 1500 profesionales de la salud encuestados reconoció que no estaban “muy seguros” de su capacidad para diagnosticar o manejar pacientes con SGA.
Otro de los retos que enfrenta Estados Unidos con este síndrome, tiene que ver con que hasta el momento no existe un tratamiento efectivo. Por eso, los CDC recomiendan evitar las picaduras de garrapata para prevenir las enfermedades transmitidas por estos pequeños animales.
Hace algunos días, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), —la agencia nacional de salud pública de los Estados Unidos—, publicó dos informes en los que alertan de un importante problema de salud que están enfrentando, pero que ha pasado desapercibido en medios de comunicación y, en general, en la sociedad estadounidense. (Puede leer: Casos de anemia están aumentando en mujeres y niños, pero disminuyen en los hombres)
En palabras de Ann Carpenter, epidemióloga y autora principal de uno de los estudios publicados por los CDC, se trata del síndrome alfa-gal que tendría “consecuencias potencialmente graves para la salud que pueden durar toda la vida para algunos pacientes”. Pero, ¿qué es el síndrome alfa-gal, cómo se contrae y qué genera?
Lo primero que aclaran los CDC es que el alfa gal es un azúcar que puede encontrarse en la carne de mamíferos como los cerdos, los terneros o los corderos, por mencionar algunos, así como en productos elaborados a partir de estos animales, como la gelatina, la leche de vaca y otros productos lácteos. (También puede leer: Los municipios donde han muerto más personas por mordeduras de serpientes en 2023)
En ese sentido, el síndrome alfa-gal (SGA, por sus siglas en inglés) es una “afección alérgica grave que algunas personas experimentan tras consumir alimentos o productos que contienen alfa-gal”, apunta la agencia de salud pública de EE. UU.
De acuerdo con los CDC, entre 2010 y 2022, más de 110.000 personas han contraído el SGA en ese país. Sin embargo, debido a que el diagnóstico requiere de una prueba y de un examen clínico, los Centros estiman que, en realidad, cerca de 450.000 personas padecerían del síndrome. (Puede interesarle: 40 años del VIH: surge una nueva esperanza pero aún hay retos)
Lo particular de este síndrome, como destacan los investigadores, es cómo se contrae. “Cada vez hay más pruebas que sugieren que el SGA se asocia principalmente a la picadura de la garrapata estrella solitaria en Estados Unidos, pero no se han descartado otros tipos de garrapatas”, señalan los CDC.
Las personas que contraen el SGA empiezan a padecer los síntomas entre 2 y 6 horas después de haber consumido los alimentos que contienen el azúcar. Entre estos, destacan desde la erupción cutánea con picor, náuseas y vómitos, ardor en el estómago, diarrea, hasta descenso de la tensión arterial, hinchazón de labios, garganta, lengua o párpados. (Puede leer: Siete de cada 10 personas están protegidas parcialmente contra el tabaco: OMS)
Sin embargo, los problemas con este síndrome no acaba con el contagio de las personas. Como reconoce otra investigación adelanta por expertos adscritos a los CDC, los médicos de ese país no conocen los síntomas del síndrome y un tercio de los 1500 profesionales de la salud encuestados reconoció que no estaban “muy seguros” de su capacidad para diagnosticar o manejar pacientes con SGA.
Otro de los retos que enfrenta Estados Unidos con este síndrome, tiene que ver con que hasta el momento no existe un tratamiento efectivo. Por eso, los CDC recomiendan evitar las picaduras de garrapata para prevenir las enfermedades transmitidas por estos pequeños animales.