Despertarse a las tres o cuatro de la mañana puede ser frustrante, pero es un fenómeno común. Según la organización Sleep Foundation, el 35.5 % de los estadounidenses se despierta en medio de la noche en repetidas ocasiones por semana. En Europa, una de cada tres personas pasa por lo mismo.
De hecho, la revista Healthline, especializada en temas de salud, señala que la mayoría de la gente se despierta múltiples veces en la noche sin darse cuenta porque se vuelve a dormir rápidamente y la interrupción del sueño dura solo un par de segundos. Sin embargo, hay a quienes les cuesta recuperarlo.
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Esto puede suceder por diferentes razones. Una de ellas es el estrés y es la más probable si la situación es algo nuevo. Preocupaciones o cambios en torno a las relaciones interpersonales, la vida profesional y/o financiera son solo algunos de los factores que pueden afectar nuestra salud de tal manera.
“Cuando te sientes estresado, tu cuerpo activa tu sistema nervioso simpático y puedes despertarte sobresaltado en mitad de la noche”, sugiere Healthline. Así, es posible experimentar un aumento en la frecuencia cardiaca y en la presión arterial, lo cual dificulta aún más volver a dormir.
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Greg Murray, Director del Centro de Salud Mental de la Universidad de Tecnología en Swinburne, Australia, explica en su artículo para The Conversation que el estrés también genera que las personas sean más conscientes de que se despertaron, cosa que no sucede con tanta frecuencia al tener un sueño sin preocupaciones. Pero, ¿por qué pasa específicamente a las 3 a.m. o 4 a.m.?
El experto afirma que es más común que esto ocurra en la segunda mitad de la noche. Por su parte, Aneesa Das, directora adjunta del Programa de Medicina del Sueño del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio, explica que si las personas suelen acostarse a la misma hora, alcanzarán en cierto punto un sueño más ligero y serán más susceptibles a despertarse en ese momento. Por ejemplo, si alguien se duerme hacia las 11 p.m. y se despierta alrededor de las 7 a.m., las horas de la madrugada supondrán, precisamente, la mitad de su descanso.
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Entre las otras causas de este fenómeno se encuentran “problemas de salud subyacentes o incluso factores ambientales. Estos últimos pueden incluir el ruido del camión que recoge la basura o la mascota que salta sobre la cama para jugar o salir”, sugiere Healthline.
En cualquier caso, para intentar darle solución al problema, la revista hace algunas recomendaciones: ejercitarse durante el día, evitar beber café en horas de la tarde, desconectarse de las pantallas antes de dormir y cenar con varias horas de anticipación. También sugiere tener suficiente sueño al acostarse y no esperar 20 minutos o más para conciliarlo.