Por qué el impuesto a las bebidas azucaradas en Inglaterra es mejor que el resto

En dos semanas, el impuesto a las bebidas azucaradas entra en vigencia en Inglaterra, sin embargo, hay quienes ya le auguran un rotundo éxito.

Redacción VIVIR
22 de marzo de 2018 - 01:43 a. m.
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¿Qué tiene de distinto este programa de impuestos al resto? Sin haber empezado, algunos fabricantes de soda ya empezaron a hacer reducciones de azúcar. Gigantes como Coca Cola le cambiaron la receta a la gaseosa Fanta (que antes tenía 14.4 gramos de azúcar y ahora tiene 10.9) y la soda San Pellegrino tienen 40% menos de azúcar (según anunciaron hace unas semanas). Incluso, cadenas de restaurantes como Pizza Hut y TGI Fridays están limitando la oferta de algunas bebidas para evadir pagar el impuesto.

Según reporta el diario Washington Post, la reducción ha sido tan dramática que el departamento de Tesorería de Inglaterra ha recortado su previsión de ingresos para el 2019 casi a la mitad solo para reflejar la disminución de la venta del número de refrescos. 

De acuerdo con la analista de salud pública Caitlin Dewy, la diferencia de este impuesto con respecto a los que tiene México, Sudáfrica, algunas ciudades de Estados Unidos como Berkley, en California, es que allá encarece el precio del producto final, tal como el tabaco. En Inglaterra, el impuesto fue diseñado para impulsar a los fabricantes a cortar el azúcar de sus productos porque cobra dos tarifas distintas basados en el contenido total de azúcar.  

La tarifa más baja aplica para las bebidas con 12 a 19 gramos de azúcar por onza y cobra unos 6 centavos de dólar. La tasa alta cobra 8 centavos de dólares por latas con más de 19 gramos de azúcar.

Algo está cambiando. Sin embargo, hay comentarios en contra del impuesto. Según la Unión de Asociaciones Europeas de Refrescos, el conteo de calorías del refresco promedio cayó un 12 por ciento entre 2000 y 2015, debido a la acción voluntaria de la industria. Es decir, que el impuesto no era necesario, cuenta el Post.

A la par, una serie de estudios científicos está empezando a surgir a medida que los impuestos al azúcar se popularizan en el mundo para medir sus impactos y hacer urgentes reformas de salud pública. En Chile por ejemplo, un estudio de la Universidad de Chile demostró que, desde que se impuso el impuesto del 5% a bebidas no alcohólicas endulzadas con azúcar, la obesidad ha disminuido entre el 0,99% y el 2,4% entre los chilenos. Cuando pasaron el proyecto de ley para aprobar esta reforma fiscal, se prometía en este periodo de tiempo una disminución entre el 36% y 60%, es decir, que no está funcionando como esperaban. 

En México es similar, aunque el desfase en las cifras no es tan drástico. Los investigadores usaron datos de 2012 a 2014, en 53 ciudades con más de 50.000 habitantes. La compra de bebidas azucaradas decreció un 6% en 2013, y un 12% en 2014, y las personas de bajos recursos fueron el grueso de esa cifra.

En 2017, un equipo de investigadores británicos modeló lo que sucedería si la industria de la soda redujese los azúcares entre un 15 y un 30%. Descubrieron que el número de personas obesas en Gran Bretaña se reduciría en 144,000, y el país vería 19,000 menos casos anuales de diabetes, según un artículo publicado en la revista Lancet Public Health.

Los impuestos al azúcar han avanzado dramáticamente en los últimos cinco años, y para bien o para mal, funcionan. Sin embargo, aún se enfrentan en las cortes de estados como California o Philadelphia, en Estados Unidos. Pero aunque hay evidencia de que estas medidas reducen el consumo de soda, los economistas dicen que hay una manera muy simple de reducir más efectivamente la ingesta de azúcar y edulcorantes. En pocas palabras, no cobres más por el refresco: cóbrale más duro all azúcar que contiene.

En 2016, en Colombia, la Cámara de la Industria de Bebidas de la ANDI estableció la restricción de venta de bebidas gaseosas en los colegios, donde sus estudiantes de Primaria sólo encontrarán en sus cafeterías bebidas naturales como agua y jugos. El pacto fue firmado por algunas de las empresas de bebidas más importantes del país como: Postobón, Pepsico, Coca Cola, Coca Cola FEMSA, Bavaria, RedBull, AJE y Monster Energy.

Por Redacción VIVIR

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