La Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió el pasado 1 de agosto una alerta epidemiológica ante el comportamiento del virus Oropuche en las Américas. Según reporta el organismo, hasta finales de julio se habían confirmado 8.078 casos, distribuidos mayormente en Brasil, con 7.284 de ellos, donde murieron dos personas. Hay casos en Bolivia (356 casos), Cuba (74 casos) y Perú (290 casos). Colombia también tiene.
Pero, ¿qué es el Oropuche? Según la OPS, es un arbovirus de la familia Peribunyaviridae, que se detectó por primera vez en 1955 “cerca del río Oropouche, en Trinidad, seguido de varios brotes en Brasil hacia fines del siglo pasado”. Esta enfermedad se transmite por medio de la picadura del mosquito conocido como jején o maruim (Culicoides paraensis). El insecto Culex quinquefasciatus también puede influir en su propagación. Los síntomas pueden durar de cinco a siete días hábiles y varían desde aparición repentina de fiebre, rigidez en las articulaciones, dolor de cabeza y posiblemente fotofobia, visión doble, náuseas y vómitos.
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“En raras ocasiones, pueden presentarse casos graves con meningitis aséptica. La recuperación completa puede tardar varias semanas”, agrega el organismo de salud regional. Además, la comunidad científica se encuentra investigando la posible transmisión de Oropuche de mujeres embarazadas al feto. Brasil ha sido el único país que ha reportado estos casos potenciales, que se encuentran todavía bajo análisis. En Colombia, según el INS, se han identificado dos gestantes infectadas con el virus, cuyos recién nacidos, sin embargo, no presentaron la enfermedad.
“La única observación similar previa reportada en la literatura científica fue durante un brote de Oropouche en Manaus, Brasil, entre 1980 y 1981, donde se observó infección por OROV en nueve mujeres embarazadas, dos de las cuales sufrieron abortos espontáneos”, explica la organización en su plataforma web. De hecho, es precisamente por estos casos que el organismo está preocupado, dado el antecedente del zika, entre 2016 y 2018, en donde se observó la transmisión de madre a hijo, lo que provocó malformaciones congénitas.
Actualmente, no existe prueba rápida, tratamiento específico o vacuna contra el Oropuche. En caso de presentar síntomas, la OPS recomienda que se consulte a un profesional de la salud para obtener una evaluación médica cuanto antes. En la alerta epidemiológica, el organismo pide a los países que refuercen la vigilancia epidemiológica y el diagnóstico de laboratorio, en particular para identificar casos fatales y severos, y posibles casos de transmisión vertical. Además, insta a ampliar las campañas de prevención y fortalecer las acciones de vigilancia entomológica y de control para reducir las poblaciones de mosquitos y jejenes.
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La situación en Colombia
En Colombia, la OPS reporta 74 casos confirmados de Oropouche en tres departamentos del país: Amazonas (70), Caquetá (1), y Meta (1). Sin embargo, en cifras más recientes, el Instituto Nacional de Salud confirmó que en lo corrido de este año, ha procesado 1.279 muestras, de las cuales 87 muestras con PCR fueron positivas para oropouche. A la fecha, solo dos casos requirieron manejo hospitalario por enfermedades de base, con evolución satisfactoria. Ninguno de los casos presentó complicaciones asociadas al virus.
“Esta alerta, les recuerda a los países de la región la importancia de fortalecer la vigilancia del dengue. Algo que Colombia viene haciendo, especialmente para las zonas donde se ha detectado oropouche, como el Amazonas, en donde se han notificado el 94 % de los casos identificados en el país, que ocurrieron en el primer trimestre del año, en el momento más intenso de la epidemia en América del Sur”, dice la entidad.
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El director general del INS, Giovanny Rubiano García, explicó que “las medidas para la prevención y el control de la infección causada por el virus de oropouche se mantienen activas y están vinculadas a la vigilancia y acciones de prevención que usamos actualmente para el control del dengue y otros arbovirus”.
“Colombia mantiene una vigilancia de los casos que han sido confirmados por laboratorio para oropouche, haciendo especial seguimiento a los mismos para identificar que no pasen de leves a graves. Cada caso es confirmado por laboratorio y luego de haber descartado en cada uno de estos, otras infecciones causadas por mosquitos”, agregó Rubiano. Según expertos del INS, la afectación del Amazonas se da por una extensión del brote que en gran parte inició en municipios del noroccidente del Amazonas brasileño.
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