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La Asociación Colombiana de Sociedades Científicas (ACSC), que reúne a 64 de estas en el país y a través de ellas a más de 60.000 profesionales médicos, envió una carta a Comisión Séptima del Senado de la República sobre sus preocupaciones ante las versiones de la reforma a la salud que se presentaron en la corporación, así como sus reparos ante la participación de organizaciones en el proceso del proyecto de ley.
“Al leer el Proyecto 216 de 2023 radicado por los cuatro miembros de la Comisión Séptima del Senado, es claro que no nos han escuchado; en este momento estamos en riesgo de ser relegados del sistema y situaciones que son tan de vital importancia para nuestro ejercicio profesional y en las que incluso debemos ser convocados, no somos tenidos en cuenta, desconociendo la importancia de los médicos especialistas, tanto en el actual sistema de salud como en cualquier sistema que se estructure, pues son las especialidades médicas junto a la academia y a la investigación científica, las que permiten los avances técnico-científicos y miden la calidad de la medicina y de la prestación del servicio de salud en el país”, se lee en el documento.
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La carta, firmada por su presidenta Dora Patricia Bernal, asegura que han sido desconocidos por el Gobierno Nacional y los ponentes del proyecto. Además, indican que solo han sido invitados a una audiencia pública de proyecto, que no se les permitió participar en los debates en Cámara de Representantes y que han sido “excluidos de cualquier referencia en la que como actores principales podamos participar activamente, por ejemplo la exclusión de la designación expresa que tenía sociedades científicas en el Consejo Nacional de Salud”.
Pero, ¿cuáles son los reparos que tiene la asociación frente a la reforma a la salud? En primer lugar, la ACSC indica que no es claro el financiamiento o los recursos que se van a destinar para la puesta en marcha de la reforma y para el sostenimiento en el período de transición.
“Por otra parte, aunque la radicación realizada por los cuatro senadores reconoce en su motivación, la precarización laboral y la intermediación ilegal como problemas claves a resolver con la reforma, al leer el articulado el problema persiste; la reforma en materia laboral, tema tratado de manera tangencial, está dirigida a los trabajadores de la salud que trabajan en el sector público que, como se ha dejado claro, es una pequeña parte, por ende la mayoría de los trabajadores de la salud con o sin reforma seguiremos desprotegidos”, indica la asociación, que cuestiona la protección a los trabajadores en el sector privado.
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Además de esto, se cuestiona el pago de remuneraciones que propone la reforma y que seguiría estando condicionado al cumplimiento de los pagos de las entidades pagadoras a las prestadoras de servicios, situación que, alegan, ha generado la crisis laboral de los trabajadores de la salud. “Somos el único sector de la economía cuya remuneración no depende del trabajo que realicemos, sino del pago que un tercero le realice a nuestro empleador o nuestro contratista; esto vulnera cualquier derecho laboral o fundamental y la reforma no soluciona ni siquiera medianamente esta situación.”
De esta manera, la ACSC asegura estar dispuesta a participar en el diálogo que inicia en el Senado de la República para dar sus aportes en torno a los cambios que se proponen en el sector salud.
Lea acá el documento:
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