Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó la prueba de Thermo Fisher Scientific Inc, la primera de su tipo en el país y la que muchos consideran el primer avance real en el diagnóstico de la preeclampsia desde 1900, cuando se definió por primera vez la afección.
Básicamente, la preeclampsia define de presión arterial alta y signos de daño hepático o renal que ocurren en las mujeres después de la semana 20 de embarazo. Si bien es poco frecuente, también se puede presentar en una mujer después de dar a luz a su bebé, casi siempre dentro de las siguientes 48 horas.
Puede ver: La mortalidad por contaminación atmosférica se debe al tráfico y las viviendas
La nueva prueba ofrece una advertencia temprana, identificando cuáles de las mujeres que tienen síntomas que podrían permitir el desarrollo la enfermedad en las próximas dos semanas. La autorización de la FDA se basa en un estudio que examinó datos de más de 700 mujeres embarazadas en 18 hospitales de EE. UU.
“El visto bueno regulatorio para la prueba de biomarcadores tendrá un impacto significativo en el pronóstico y el tratamiento de miles de mujeres en riesgo de preeclampsia cada año en los EE. UU.”, dijo Alan Sachs, director de Thermo Fisher Scientific.
Puede ver: Las rutinas para hacer ejercicio podrían tener un grave problema
Aunque esa es la expectativa, no está claro que vaya a ser así, ya que no existe un tratamiento eficaz para la preeclampsia. La única cura para la preeclampsia es dar a luz. Al tomar decisiones de tratamiento es necesario tener en cuenta la gravedad de la enfermedad y la posibilidad de que la madre tenga complicaciones, cuán adelantado está el embarazo y los riesgos potenciales para el feto.
La preeclampsia afecta aproximadamente a uno de cada 25 embarazos, y la incidencia ha ido en aumento en los últimos años en los Estados Unidos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.