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Contrario a lo que se suele pensar, los cibercriminales no siempre operan en los rincones más oscuros de internet. De hecho, muchos de ellos utilizan las redes sociales para ofrecer servicios ilegales. Así lo reveló Talos, división de ciberinteligencia de la compañía Cisco, al dar a conocer 74 grupos de Facebook que servían como plataformas comerciales para delincuentes de todo el mundo.
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los investigadores de Talos, la mayoría de grupos tenían nombres obvios, como “Spammer y hacker profesional” o “Facebook hack (phishing)”, sin embargo, varios de ellos habían permanecido inadvertidos por los controles de la red social por hasta ocho años, ya que nunca habían sido reportados por los usuarios.
Los expertos encontraron que al interior de estos grupos con miles de miembros se ofrecían todo tipo de ciberataques e información, incluyendo ventas e intercambios de información de tarjetas de crédito robadas, ventas de listas con correos electrónicos y herramientas para hacerles spam,, entre otros. En total, los grupos tenían alrededor de 385.000 miembros.
La forma de pago solía ser con criptomonedas o a través de intermediarios. Usualmente se completaban las transacciones a través de Paypal, denuncian.
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Talos consiguió hacer cerrar los sitios reportándolos digitalmente o contactándose con los miembros de seguridad de Facebook, sin embargo, advierten que estas asociaciones vuelven a aparecer al poco tiempo, pues la red social se apoya en el control de la comunidad para cerrar páginas de este tipo y pocas veces recibe denuncias.
“Como consecuencia de esto, un número considerable de estafadores cibernéticos han continuado proliferando y beneficiándose de actividades ilegales. Operando con impunidad, estos atacantes sondean implacablemente las ciber-defensas de empresas en todo el mundo. Este es un esfuerzo de alto riesgo porque un atacante con incluso el punto de apoyo más pequeño dentro de una organización puede causar un daño considerable”, afirmaron los expertos en una publicación de su página web.